SECCION ESPECTACULOS
PAGINA 34
BALAZO: SALSA
CABEZA: UN DIA CON JERRY RIVERA
CREDITO:ALEJANDRO SALAZAR HERNANDEZ
Jerry Rivera o la historia de un vertiginoso ascenso a la fama. Consolidado en una de las figuras mas notables de la salsa, el cantante puertorriqueno confirma tener el ofrecimiento para actuar en diciembre en la pelicula El padrino (parte 4), al lado de Al Pacino.
Conseguidos en apenas un lustro de carrera, estos y otros logros artisticos complementan su "dificil y fuerte" experiencia de ser padre de dos hijos apenas a los 20 anos de edad!
Aspectos conocidos y no de quien bien puede catalogarse un autentico Pancho Lopez -a los 16 anos papa resulto-, se trataron el viernes en charla convocada con fines promocionales de su cuarta y mas reciente grabacion: Cara de nino.
De entrada, y para evitar cualquier comparacion, aseguro desconocer como va la carrera de su hermano Edwin, tambien salsero. "¨Competencia? Nunca he pensado en ella, de lo contrario, no viviriamos tranquilos".
El interprete del exito Amores como el nuestro se confeso ante todo hogareno (busca estar el mayor tiempo posible con su familia) y negado para componer canciones.
"De esto me doy cuenta cuando escucho temas de excelentes autores como Omar Alfanno, Juan Carlos Calderon... Me parece ademas una falta de respeto que, en un afan de ganar regalias u obtener popularidad, algunos artistas hagan cosas tan malas. Claro, he tenido innumerables vivencias, pero no pienso escribirlas".
En cambio resalto en mas de una ocasion el inigualable placer que le produce actuar sobre un escenario. "Desde pequeno mi idea fue siempre ser cantante a costa de lo que fuera -su padre era guitarrista y director de grupo, su madre cantante aficionada-; abandonaba hasta mis novias con tal de conseguir mi proposito!", comento Jerry Rivera, quien recientemente hizo su debut filmico en la pelicula norteamericana Blackout, compartiendo creditos con Andy Garcia y Rita Moreno.
-¨Estarias dispuesto a seguir la carrera de actor?
-Depende de las condiciones que se presentaran. Aunque lo que mas me gusta es cantar. Actuando no experimento el mismo placer que sobre una tarima acompanado de mis musicos y gozando el apoyo del publico.
Como representante de una nueva generacion de este guapachoso genero, se proclamo tambien contra la interpretacion de la denominada salsa erotica. "No me gusta, no va conmigo. Ademas, ya paso de moda hace mucho tiempo".
Vestido de manera informal y gafas redondas antepuestas a un rostro que rara vez sonrie, el boricua en ningun momento se mostro envanecido por su exito, actualmente fortalecido por los temas Que hay de malo y No hieras mi vida, cuyos correspondientes videoclips se proyectaron en un salon de un hotel citadino.
-¨Que tan dificil es controlar la fama?
-No mucho, pero requiere innumerables sacrificios. Se puede controlar, claro, sobre todo teniendo conciencia de que esta es efimera. De lo que de ella deriva, la popularidad entre el publico es lo mas bonito.
Una noche en Los Angeles
Los frutos de la aceptacion de que goza Jerry Rivera en nuestro pais, pudo saborearlos la madrugada del sabado en el salon Los Angeles, atiborrado por cientos de seguidores que bailaron al son de sus mas sonados exitos alternados, entre otros, con los del grupo colombiano Niche y la Sonora Senorial.
Ahi, en una atmosfera ardiente, Jerry Rivera dejo escapar su sentimiento, su voz. En total libertad, en plena comunion con el publico fue desgranando cada uno de sus exitos para fundamentar el prestigio, la popularidad de la que goza en el medio salsero.
La actuacion de Jerry resulto un rotundo mentis a sus detractrores; sobre el escenario nunca aparecio el interprete que busca solo, y sobre todas las cosas, el lucimiento personal, sino el cantante dispuesto a ganarse al publico a fuerza de voz, de buenas canciones, de una magnifico acompanamiento. El cantante que goza y hace gozar a sus seguidores con una musica que resulta envolvente, seductora, y que flagela el cuerpo y lo obliga a movimientos inusitados, ritmicos a morir.
Asi, la noche se fue haciendo larga, transcurriendo en medio de notas y melodias arrancadas del tropico. Asi, hacia el final de la maratonica velada, no resulto extrano que el publico aclamara la actuacion del joven interprete, cuyo rostro en todo momento reflejo placer, ese al cual habia aludido en repetidas ocasiones unas horas antes en conferencia.
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