SECCION CULTURA PAGINA 35 CABEZA: CREDITO: Su particular arte de lectura e interpretacion se veia amenazado hacia fines del s. XIX, cuando los judios decidieron asimilarse a la cultura europea occidental. La obra de Freud, dicen algunos, salvo del olvido al patrimonio judio, sin saberlo ni uno ni otro. Ese modo tan suyo de descifrar los multiples sentidos de las palabras, lo traslado del discurso divino al cotidiano de todo el mundo, desacralizo su modo de interpretacion y lo expuso, aplico a lo trivial cosa que habria llenado de horror a los rabinos, pero paradojicamente fue asi como lo rescato y actualizo. Tenaz lector de la biblioteca hebrea Freud, que no creia en Dios, renuncio a la sacralidad del texto sagrado. Pero al mismo tiempo trato a cualquier otro texto o discurso, para empezar al de los suenos, con la misma devocion, el mismo fervor que exige el texto sagrado. Supo, como todo judio, que la escritura es un texto abierto, un laberinto de sentidos a descubrir, inventar; que toda palabra es esquiva y ambigua. Destituyo a Dios del lugar de la Verdad, para atribuir la verdad, multiple y plural, al neurotico de cada dia. "Freud es el ultimo de los talmudistas", decia Kafka, otro "talmudista". Y si, pertenece sin duda a esa inconfundible estirpe de exegetas habitada por la pasion del arte de conjeturar. Es cierto que existen dos corrientes en el judaismo: la del racionalismo ritualizante derivada del Talmud, y la mitica de la Cabala. Que no se oponen, sin embargo, ambas pertenecen a la tradicion judia. Por eso no es dificil imaginar a Freud como un talmudista, y tambien como cabalista frente a una vision de la naturaleza humana atrapada en el desastre y la desdicha, conflictos y sinsabores; una naturaleza humana que no le ofrecio letras luminosas, sino un texto para siempre corrompido. Freud estaba seguro de que el hombre no quiere ser feliz. En el edificio teorico del psicoanalisis escuchamos resonancias de antiguos enigmas, presentimos el retono de antiguos y perseguidos modos judios. Y de veras, uno puede fascinarse, hasta cegarse con la abundancia de puntos de encuentro, similitudes entre la tradicion talmudica-cabalistica y conceptos psicoanaliticos. Aunque renunciemos a esos encuentros, en su momento ellos volveran a insistir. Son inagotables los textos o elementos que en la tradicion judia anticipan el psicoanalisis o se le adelantan. Hay mucho en la riqueza y tradicion judias que encontramos en la teoria psicoanalitica, podriamos incluso decir que sus principales hallazgos estan ya en ella como intuicion. No es que los lazos entre esta disciplina y el judaismo sean evidentes, o mecanica la traduccion de una u otra; pero es indudable que comparten una idea medular: la del hombre como efecto del lenguaje, y que su modo de interpretar a las palabras sigue los mismos prncipios. Una ausencia o perdida como causa, el lenguaje en el origen de hombre y realidad, y la fascinacion por letras y palabras, la narracion oral, las multiples versiones de lo mismo, el sentido del humor y los juegos de palabras, las trampas del lenguaje, esa pasion por el equivoco y el deslizamiento de sentido; eso tienen en comun psicoanalisis y judaismo, pero no solo. Tambien comparten la importancia que conceden a la funcion paterna. De los judios es el Dios unico Yo Soy el Que Soy y a ellos corresponde el merito de haber puesto al dia la funcion paterna. De los judios es el haber puesto al dia la funcion paterna, portadora de ese significante cuya marca es imprescindible para la constitucion subjetiva. "Hay Padre", fue el mensaje que transmitieron al mundo y ese, la puesta en primer plano del padre simbolico, con todo y lo que de impenetrable tiene, es el aporte principal del pensamiento judio a la cultura occidental. El padre, columna vertebral el judaismo, lo es tambien del psicoanalisis: Edipo y castracion. Y hay mas. *Psiconalista y escritora. .