PAG. 30 SECCION: DEPORTES CABEZA: FERNANDO MARCOS COMENTA La duda es esta: ¨siendo mejor el equipo mexicano, se debe suponer que no tomamos en serio ese tipo de eventos? Si es asi, cuidado! Podriamos concluir que los muchachos, mas que jugar al futbol lo estan tomando como un oficio rentable que hay que "administrar" y por eso, en algunas ocasiones, nos tumbamos en la hamaca y, como en el liberalismo clasico, su norma es "dejar hacer, dejar pasar". Y esto, de ser cierto, debe cuidarse mucho a nivel de seleccion. Por supuesto, no es lo mismo jugar un partido contra un adversario que nos puede dar poco con una victoria y nos puede quitar prestigio con una derrota. Los rivales de la seleccion deben ser de alto nivel. Solo compitiendo con grandes se puede llegar a ser grande. La Copa America, esta vez, sera de gran importancia. No llegaran los equipos de Sudamerica en el estado languido en que arribaron a la anterior, cuando Mexico debio ser campeon y se quedo en la orilla solo por el capricho de hacer de Ramon un hombre de movimiento y zonas constante y variado, que por dejar su sitio permitio los goles de nuestra caida. Ese punto parece que ya se ha arreglado. Pero queda otro por definir. Uno de ellos, de extrema urgencia, es saber, a ciencia cierta, cual es el verdadero equipo nacional. Si el motivo para las constantes variaciones es "querer conocer" a los jugadores, me pregunto donde estuvo tantos anos el senor Mejia Baron que no llego a saber hasta de que lado se recuestan los futbolistas para dormir. Pero hay algo mas: si el entrenador nacional, aparentemente a perpetuidad, quiere "conocer" a los jugadores, nosotros, los aficionados, ya queremos conocer la verdadera identidad de nuestro equipo. Lo mas grave del asunto es que YA CONOCEMOS CUAL ES NUESTRA ALINEACION MAS ADECUADA. Pero la eterna indecision de Miguel lo lleva a cambiar y cambiar... menos cuando un cambio podria haber supuesto una victoria que nos llevara bien adelante en el pasado campeonato mundial. Y la reaccion a las criticas, casi unanimes, que lo senalaron como indeciso y hasta incompetente, el tecnico nacional -y su cuerpo auxiliar que en nada lo ayuda- han dado en hacer cambios, como decia Gila, "a lo bestia". Recordemos nuestra victoria sobre Uruguay, un equipo al cual le tenemos pisado el callo desde el mundial de Inglaterra en 1966. Y este triunfo, debido a un zapatazo afortunado de Rizo y a un error de ubicacion del guardameta charrua, mas que gozo nos han dejado, a muchos, amargo sabor en la boca. Pero, con todo, el primer tiempo de ese encuentro, con un equipo uruguayo de medio tono -sus estrellas estan en Europa o la Argentina- fue calido, erroneo por la excesiva presion de uno y otro equipos y por la violencia generada por el temperamento uruguayo y por la deficiencia del arbitraje. En ese tiempo, nuestros chicos se jugaron la piel en cada uno de los lances violentos, a veces hasta brutales, que hicieron declarar a Marcelino, ante la TV estas palabras, mas o menos citadas en su forma, pero fieles en su significado: "No podiamos rajarnos. Y le entramos a la pelea, de tu a tu. Si ellos daban, tambien nosotros sabemos dar". Y no es ese el mejor camino de virtud para nuesro equipo. Pero, en el segundo tiempo, la cosa fue peor: se volvio una especie de confusion provocada por los cambios absurdos e inutiles de nuestro equipo. Si se quiere probar novatos, hay que hacerlo con medida. Uno por uno y no en peloton deformante que, lejos de darnos una idea de lo que valen los futuros seleccionados, los descarta, porque no se les da el apoyo necesario de sus companeros ya experimientados internacionalmente. La seleccion esta lograda. Por lo menos una vez la integro. Y ahora, habra que comparar, por ejemplo, el rendimiento de Blanco en el America, bien apoyado y mejor dirigido, con lo que hizo en la seleccion. Mejia Baron debe saberlo... digo. .