SECCION: ECONOMIA PAGINA: 19 CABEZA: Escenarios de Mexico entre el corto y el largo plazo CREDITO: PEDRO VALDEZ VALDERRAMA* Otra vez los mexicanos nos encontramos a la espera de las decisiones del congreso norteamericano, otra vez el empresario, el trabajador, el ama de casa quisieran tener un horizonte claro de largo plazo. Hace tan solo unos meses los mexicanos empezabamos a pensar en el futuro ya no tan cercano, por primera vez fue posible (para las clases medias) tomar decisiones de largo plazo, como la compra de un inmueble a credito o bien de un auto. Para el empresario pequeno y mediano comenzaban a surgir fuentes de financiamiento como alternativa a sus propios recursos; sin embargo hoy todo eso esfumo y en medio de esta tormenta financiera tenemos que reflexionar que mas tardara el recobrarse esa mentalidad de largo plazo que lo que llegue la estabilidad a este pais. Esta vez no solo se engano a las familias ahora, los empresarios que ya no solo veian la ganancia de corto plazo se vieron defraudados. Y lo que hoy todos podemos percibir es que los origenes de esta crisis no solo es un problema de entradas y salidas de divisas (o bien un problema de caja) y que es algo mas profundo y que tiene que ver con la forma en la que la economia funciona, con la manera en que nuestros empresarios, consumidores y gobierno operan. Es claro que nuestro pais para crecer depende en gran medida del exterior y esto se ha acentuado en los ultimos anos (en gran parte por la desmedida apertura economica), puesto que cada dia necesitamos mayor numero de bienes importados para producir. Mientras en los anos setentas para avanzar 1% en el PIB nuestra economia necesitaba aproximadamente un incremento del 3% de las importaciones, esta relacion para 1983-93 se incremento a mas del 10%, lo cual refleja una desintegracion productiva muy grande y hoy en dia casi todos nuestros sectores industriales importan mas de lo que exportan, situacion totalmente distinta a lo acontecido durante los anos setentas, por ejemplo: el sector de aliment os en 1970 tenia un superavit comercial de aproximadamente el 12% de producto que generaba, para 1982 se habia reducido a 4% y en 1993 registro un deficit como relacion de su producto total de casi 13%, de igual forma sectores modernos como la metalmecanica (donde se encuentra la industria automotriz) presentan deficits de mas del 100% del producto que generan. Esta situacion solo refleja la gran necesidad de importaciones que requiere el sector productivo. Ademas de que las necesidades de importaciones se acentuaron en los noventas, ocurrio que importabamos mas para consumir y menos para ampliar nuestras capacidades productivas, es decir las importaciones bienes de consumo pasaron de 8% del total a 12% entre 1975-93, mientras las importaciones de bienes de capital (que generalmente son maquinaria y equipo) redujeron su participacion de 28% a 17%. Lo anterior hace necesario reflexionar que si bien el consumidor mexicano pudo tener acceso a una cantidad de bien es mayor (y algunas veces de mejor calidad), esto se dio con un gran detrimento de la capacidad productiva. Hoy en dia los despidos masivos del empresas del sector moderno como las de la industria automotriz se ven como la punta de un iceberg, y tal vez debiese hacerse la reflexion en torno a como hemos tratado de hacer competitiva a nuestra economia, puesto que si para ser competitivos es necesario que importemos gran parte de nuestros insumos, entonces estaremos dentro de una dinamica que torna a la econo mia cada vez mas. La estructura de las importaciones y la situacion comercial que enfrentan los sectores productivos nos muestran que el deficit comercial es de caracter estructural, lo cual implica dos cosas: en primer lugar que para reducirlo en el corto plazo no basta una devaluacion y solo es posible parando la actividad economica, creando para esto una recesion mayor en donde los salarios seran el factor que hara posible (como lo senalo el Secretario Herminio Blanco) que la devaluacion sea real y no nominal, por otro l ado las posibilidades de eaprovechar la devaluacion por parte de los exportadores son minimas en un contexto de reduccion del credito, por la dificultad de amplisar sus capacidades productivas, ademas de que en la actualidad la posibilidad de exportar depende de una variedad de factores que va mas alla de un problema de precios relativos. Ante esta situacion el horizonte de los mexicanos es hoy mas corto que nunca, depende de decisiones mas alla de sus fronteras y condiciones que posiblemente afecten en gran medida la vida cotidiana de todos, es por eso que hoy cabe tambien no solo pensar en escenarios del si o no al apoyo financiero, es necesario que pensamos que nuestras debilidades son estructurales por lo que se necesita un replanteamiento del problema productivo, hoy es necesario replantear la politica industrial en una vision de largo plazo y asi recordar que la economia mexicana va mas alla de un problema de caja. * Colaborador en la division de Estudios de Posgrado de la Facultad de Economia de la UNAM. .