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SEC. CIUDAD
PAG. 16
CINTILLO: N$80 POR UNA REPARACION TOTAL
CABEZA: No hay carestia que valga si se trata
del nino Dios; hasta N$60 por vestirlo
CREDITO: FRANCISCO MEJIA

Nino de la Abundancia.
Nino de la Salud.
Nino Cristo Rey.
Nino San Martin de Porres. 
Nino de Atocha.
Nino Dios Doctor.
Ruega por ellos!
Pero no por los ninos, sino por los marchantes en este su peregrinar por el viejo mercado de la Merced.
Es el ultimo ramalazo de las fiestas navidenas. Donde se evoca el Ora Pronobis, a la rorro nino, a la rorro ya o la consabida rosca de reyes.
Ahora los marchantes en plena crisis economica "pero si vea usted los precios!", se aprestan tal y como lo marca el calendario judeo cristiano a celebrar el Dia de la Candelaria.
En este dia, los lazos de compadrazgo se estrechan aun mas y se entregan a los ninos Dios y a los de la rosca, todos bien vestiditos: con sus huaraches, su camizon de tafeta, su capa de terciopelo, su lazo de oro, su baston o sus alas, segun sea el caso. Es decir, que el nino que salio, ahora si que encuerado de la casa, regresa todo ajuareado; con ese pretexto se arma el guateque, los tamales, las tostadas, la comida y el chupe, pues que caray! al fin que las penas con vino se olvidan mas pronto. Salud!
Se pone al nino Dios en el altar y hasta no arrullarte Jesus mio. Ahi se quedara durante todo un ano, que mono!, ¨no?
Sebastiana Duarte es una mujer de escasos 27 anos que tiene su puesto en el pasillo seis del mercado de la Merced. A un lado suyo cuelga el letrero en verde fosforecente que dice: se visten y se retocan ninos Dios.
"Para esto, le dire, no hay carestia que valga, aqui la gente llega solita pues son muy creyentes y como van a dejar a su Nino Dios todo encueradito, pues no ¨verdad? Ademas, como ya son puros marchantes mios de anos, les damos un buen precio y se van re contentos", indico.
Sobre su puesto se ve ropa de terciopelo en colores muy sacros: purpura, rosa, verde, azul celeste, amarillo canario. De las vigas del local cuelgan lazos de puritito oro, bueno, es un decir; en manojos se escurren en el aire huaraches de todos los tamanos, los hay desde un centimetro hasta seis. Sillones, alas, bastones, velitas, colchoncitos, canastos, ropa, coronas, sombreritos. Todo para el Nino Dios y para el de rosca.
En la mesa de trabajo de Sebastiana Duarte se ve laca, pasta y herramienta muy pequena. Es la mesa de las operaciones. "Nos llegan ninos que con un bracito caido, un piecito, la cabeza cortada, un golpe en el muslo, sin un ojo, con el cuerpo partido en dos o de plano en seis o siete cachitos, aqui se los armamos con un poco de fe en Dios y un poco de laca, quedan como nuevos los ingratos".
Las marchantas son buenas para anunciar sus desgracias. Al puesto llega una que dice con un tono casi divino.
Se lo queria comer el gato...
Anuncia y saca de la bolsa los trozos de la figura del Nino Dios.
Los pedazos de ninos se deparraman sobre la mesa.
Nino de las Palomas.
Nino Sagrado Corazon.
Nino San Judas.
Nino de la Candelaria.
Nino de Praga.
La versatilidad del Nino Dios no tiene limites. La imaginacion de los comerciantes tampoco y la de los marchantes, ni hablar. Segun el santo de su devocion es la eleccion o lo que es lo mismo, segun el sapo es la pedrada. Ni modo, todo sea por la tradicion esa.
¨Cuanto me sale vestirlo de Papa?
¨Es grande?, 60 pesos y sale rapido.
¨Y uno pequeno como ese?
¨Como lo quiere vestido?
De San Miguel Arcangel.
Le sale en 25 pesos.
Ruega por ellos!
Pero no por los ninos que andan de brazo en brazo. Que bajan y suben. Que van y vienen. Sino por los marchantes que son compadres de a deveras. Y cargan al nino como al ahijado que todos quisieran tener.
Las canastitas con que presentaran al nino ante el altar para que sea bendecido, las hay de cinco y siete pesos. Su colchita o colchoncito o algo parecido, que va entre la canasta y el nino, en un color blaco purisimo, "le cuesta 12 pesos patron, pero veala, es de buena calidad".
Concepcion Chapul Hipolito es otro comerciante que por anos se dedica a lo mismo en la Merced. Se quejo: "las ventas estan caidas por eso de la crisis, la clientela ha bajado, esta canija la cosa. Pues los precios han subido, para que mas que la verdad, por ejemplo, un silloncito de madera de esos grandes vale tres pesos mas caro en relacion al ano pasado".
Nino Divino Pastor.
Nino de los Enfermos.
Nino de los Angeles.
Nino Santo Papa.
Nino Azteca...
Que alguien ruegue por ellos!
No por los ninos, sino por los marchantes. Con tantos atuendos seguro que los quieren todos. Con tantos ninos vestidos asi y asa, seguro que obtendrian la santidad eterna. El perdon total de sus pecados.
Con cuidado que le acaban de arreglar su manita, suplica una marchanta que se la pasa con el Jesus! en la boca.
"Es la creencia de los mexicanos, asi es la tradicion cada ano, claro!, tenemos mucha clientela, que le vamos a hacer, los precios son asi, el que tenga que pague, el que no ni modo", afirmo la comerciante Rosa Vega.
Otro doctor de ninos es Miguel Uribe, quien aprendio el oficio desde su infancia. Asi, viendo a su padre y  familiares le fue encontrando amor a la tarea. En sus manos se observan los restos de yeso y laca. Con destreza agarra al nino Dios y lo juega entre los dedos, ubica la herida y con una cegueta y punzon raspa y raspa, coloca la pasta del color de la carne, une el miembro de que se trate y ya esta. Lo manda a rehabilitacion. 
¨Cuanto cobras por poner un brazo?
Quince pesos y queda como nuevo.
¨Desde cuando te dedicas a esto?
Uhhh, desde que tengo uso de razon...!
Y si traigo un Nino Dios hecho cachitos ¨es reparable o no?
Se lo reestructuro completamente por ochenta pesos.
Nino Santo.
Nino Pastor.
Ruega por ellos! 
Pero no por los ninos, sino por los festejadores de las tradiciones santas. En el Dia de la Candelaria la crisis es leve y ademas que importa. Salud!.

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