PAG. 11 SECCION: Cultura CINTILLO:Diversa CABEZA: Zaid, sobre el estado educador CREDITO: Eduardo Lizalde Aparte de sus admirables y rigurosos trabajos poeticos y sus brillantes ensayos literarios, Gabriel Zaid se da tiempo para liderear la dificil batalla de los derechos autorales. Pero tambien emplea sus capacidades enciclopedicas de investigador para adelantarsenos en el analisis y la critica de la filosofia educativa del Estado mexicano, y la de nuestra Alma Mater Autonoma, entre otras cosas. Antes de releer su breve pero demoledor articulo titulado Suprimir la SEP (La nueva economia presidencial. Saldo del grupo industrial Los Pinos. Grijalbo, 1994), que ya habia publicado Zaid en agosto de 1989, ya se me habia ocurrido volver a abordar con mas detalle en un tema ya alguna vez apuntado en esta columna: si desde el primer ano del sexenio salinista aplaudimos la certera propuesta presidencial de acabar con el mito del elante la critica implacable de ese otro mito, tambien oneroso y ruinoso: el del Estado Educador? Zaid lo ha hecho en el mencionado articulo con impecable exactitud y economia de palabras: Y mas adelante: Margarita Michelena decia en un reciente comentario editorial (en el que deploraba el mal espanol de ciudadanos, profesionales y funcionarios que hacen acto de presencia en programas televisados de comparecencia y discusion publica) que esta a la vista el fracaso historico del sistema educativo nacional, pues con toda su gigantuna extension, no ha conseguido que el pueblo aprenda a hablar en espanol, ni tampoco a leer (otro gallo nos cantara si fueramos un pueblo cuando menos lector). Es cierto: los seis an os de educacion primaria, gratuita y obligatoria, nos han convertido en un pueblo compuesto mayoritariamente de semiletrados, de iletrados o de analfabetos funcionales. Ya hemos hecho mil veces la amarga reflexion sobre los miseros tirajes de nuestros diarios (que tampoco tienen suficientes lectores), y sobre la decima parte de un lector anual que corresponderia a los 25 o 30 millones de nuevos libros que se editan en el pais (contados los libros cultos y la literatura chatarra). Tiene razon Zaid: Asi las cosas, una verdadera y positiva revolucion educativa, no deberia consistir, como suelen proponer nuestros oradores politicos, en la d hay que suprimir la SEP y el SNTE, devolviendo la educacion a los poderes locales y a la sociedad civil. No hay nada que haga la SEP que no puedan hacer mejor los estados. Habria que empezar por dividir la SEP en 32 secretarias y el SNTE en 32 sindicatos. Luego, en cada estado (y en el Distrito Federal) habria que devolver mas aun el poder educativo: a cada municipio, a cada escuela. En su articulo Ministro por un dia (julio de 1988, tambien incluido en el libro que comentamos), Zaid se divertia con su inclusion dentro de una terna para presuntos secretarios de Hacienda y Programacion, que entonces hiciera Manuel Clouthier para su posible gobierno. Zaid seria mi candidato ideal a la presidencia (y su nula vocacion escenica seria una ventaja), pero ya sabemos por el mismo que no es hombre hecho para la politica sino para las ideas. De todos modos, ya que no podemos hacer campana en su favor para que cuando menos alguien pensara en el como emergente secretario de Educacion por seis meses, seria al menos aconsejable que los dirigentes del pais, y los verdaderos candidatos a la elefantuna secretaria tantas veces referida, escucharan siquiera lo que sensat amente escribe y piensa Gabriel Zaid sobre el tema. .