GUIA: 27DEMOCR SECCION: ESPECTACULOS PAG: 8 CINTILLO:CINE DE FIN DE MILENIO CABEZA: Zancadilla a la Academia; buscan favorecer una cinta SUMARIO: La Comision de Premiacion debe consultar a todos los galardonados CREDITO: Francisco Sanchez La Academia se quiere democratizar, pero no acaba de hallar el camino. Me refiero a la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematografi-cas. Se parte de un proposito y a media marcha empiezan las zancadillas. Por ejemplo, gracias a una buena iniciativa de Ignacio Duran Loera, la Academia inicio una reforma democratizadora. En lugar de que la Comision de Premiacion elija las ternas para los Arieles, esta eleccion se realizara -a partir de este ano- por el voto de todos y cada uno de los anteriormente gala donados (lo cual los convierte en miembros honorarios). Como dichos miembros somos hoy trescientos diecisiete (me inlcuyo entre ellos), la configuracion de las ternas surgiran de un amplio consenso democratico. Hasta aqui todo esta bien. Pero -el pero que nunca falta en la sopa- la Comision se sigue adjudicando el derecho de otorgar sin consulta los galardones especiales. šEs malo esto? Me temo que si, puesto que ya se dejo oir una voz de alarma. ­Aguas! El santo rumor nos informa que la Comision esta tramando concederle un Ariel especial, por "altos meritos historicos" Gertrudis, de Ernesto Medina. ­Esto, la verdad, es un escandalo! No conozco a ninguna persona, dentro del medio cinematografico o fuera de el, que le haya gustado dicha cinta. Se que los miembros de la actual Comision de Premiacion son personas honorables. Muchos son inlcuso amigos mios. Pero se tambien de las presiones externas a que estan sujetos, presiones a veces poderosas. Lo se por experiencia propia. Yo fui miembro de la Comision de Premiacion en el bienio 76-77. A nosotros tambien nos toco ser presionados, esa vez para que concedieramos un galardon especial a una cursileria catolica de dibujos animados titulada Los tres reyes magos. Nos negamos rotundamente. Porque me honra haber pertenecido a ella, en seguida doy integra la configuracion de aquella Comision de Premiacion que opero hace casi dos decadas. La presidenta era Josefina Vicens, una escritora que, como es bien sabido, tenia los ovarios muy bien puestos. La secretaria, Maria Luisa Mendoza, nuestra querida China de Guanajuato. Luego venia Dolores del Rio, Janeth Alcoriza, Jorge Martinez de Hoyos, Ignacio Lopez Tarso, Gabriel Figueroa, Carlos Savage, Jorge Stahl, Manuel Gonzalez Casanova, Enrique Molina Reyes, Fernando Gou Emert, Tomas Perez Turrent y finalmente, sin duda colado en un descuido entre tanta personalidad, un servidor. En los dos anos de nuestra participacion, premiados como mejor pelicula a La pasion segun Berenice, primero, y luego -ex aequo- a Naufragio y El lugar sin limites. Tambien nosotros otorgamos sin consulta (no se pensaba en eso entonces) dos Arieles especiales: uno a Luis Bunuel y otro a Rodolfo Echeverria. De inmediato aclaro que el Ariel a Rodolfo Echeverria se lo dimoscuando su hermano ya era Presidente de la Republica: Es decir, en el momento critico en que la jauria hacia pedazos al sexenio que acababa de concluir. Fue el nuestro un premio a contracorriente, lo opuesto al oportunismo. La hermana de Jose Lopez Portillo era ya la jefe del cine. Hizo el berrinche de su vida. Eso fue ayer. Volvamos al presente. Se habla en la actualidad de sociedad civil, de consensos mayoritarios y de fin del autoritarismo. Escuchamos que la democracia es la meta a alcanzar en todo el planeta, pero que desgraciadamente en Mexico se tropieza con mas reluctancias. Trabajemos porque esto no sea asi. Hagamoslo en nuestro radio de accion. Si la Comision arieladora quiere dar un galardon especial a Gertrudis, ­que lo ponga a votacion de los miembros honorarios de la Academia! Como ya dije, somos 317 Si la mayoria dice si, se le da el premio; si la mayoria dice no... entonces le decimos good-bye al cine de estatuas .