GUIA: SEDITL SECCION INF. GRAL. PAG. 2 CABEZA: Pocas novedades enla reunion del G-7 La ausencia de un crecimiento economico sostenido en sus paises fue la principal preocupacion de los ministrosde Finanzas de las siete naciones mas industrializadas, que se reunieron en Londres. El Grupo de los Siete (G-7) elogio el plan de reactivacion economica para Estados Unidos propuesto por el presidente Clinton y reconocio que un mayor crecimiento economico en Europa sera esencial para reducir los elevados indices de desempleo en ese continente. Este ultimo tema, al parecer genera cierto nivel de al ar ma entre los ministros europeos del G-7. Resulta desalentador, sin embargo, que de esta reunion de potencias economicas no hayan surgido perspectivas reales de superacion de los fenomenos de estancamiento y recesion que se observan en la economia mundial. Ciertamente, no hubo muchas expresiones de optimismo en este sentido. Tampoco hubo un consenso claro en favor de promover la rapida conclusion de la Ronda Uruguay del GATT, que resulta crucial para un comercio mundial mas abierto y justo como via de reactivacion de la economia internacional. Mas bien, es posible que algunas de las potencias traten de dirimir diferencias en el marco de las negociaciones del GATT. Tampoco se produjo en Londres un compromiso para fomentar el urgente repunte economico que necesitan todas las naciones del orbe y, sobre todo, las que se encuentran en vias de desarrollo. Basicamente, el G-7 tomo dos determinaciones: por una parte, estrechar la cooperacion entre los tres bloques (America del Norte, Europa y Japon-Lejano Oriente) de naciones industrializadas y, por otra, buscar un paralelismo en los objetivos perseguidos por los tres bloques, por ejemplo, en una voluntad comun de reducir sus deficit y fomentar la inversion tanto publica como privada en sus economias. Desde hace algun tiempo, la tendencia en el G-7 ha sido la de exigir a Alemania y Japon que sean motores de la economia mundial. De hecho, los dirigentes aleman y japones, Helmut Kohl y Kiichi Miyazawa, se reunieron ayer en Tokio y reconocieron su responsabilidad comun frente al mundo en materia economica. Tanto en Londres como en Tokio, se hizo un llamado a Japon a abrir su economia, estimular su mercado interno e invertir dentro y fuera de sus fronteras para propiciar el crecimiento mundial. Sin embargo, se reconoce que se han desacelerado las economias de estos dos paises, por lo que se mira cada vez mas hacia Estados Unidos para dar un nuevo impulso a la economia global. Los ministros europeos calificaron el plan economico de Clinton como un paso valiente que propicia el crecimiento y que comprende el papel de impulsor economico que debe emprender el Estado. Por el momento, no se observan politicas igualmente audaces en las otras potencias que comprenden el G-7. En general, no hubo ninguna novedad importante en esta reunion del G-7. Se establecio la prioridad de luchar contra la recesion y promover un crecimiento no inflacionario, pero fue planteada basicamente como un reto de las naciones industrializadas y no como una prerrogativa global que pudiera tener una significacion especial para la superacion de los problemas de los paises pobres. Asi, para la mayoria de las naciones, incluyendo Mexico, el avance economico continuara dependiendo mucho mas de sus propios e sfuerzos y disciplina que de un impulso que pudieran recibir de las potencias economicas. En efecto, no queda mas que esperar que el crecimiento de los poderosos finalmente se reactive y que llegue a repercutir en beneficios palpables a nivel global .