GUIA: N26ELPRE SECCION: ESPECTACULOS PAG. 20 CINTILLO: Apocalipsis musical CABEZA: El presagio de la maquina de metal CREDITO: SERGIO MONSALVO C. La vision profetica que Lou Reed tuvo con Metal Machine se ha materializado en la decada final del siglo. Metallica representa ese sonido monotono y de densas impresiones con el cual es seguro la CNN musicalice la narracion -a traves de las pantallas chicas- del genocidio final y muy probable tambien con el escaso lenguaje para hacerlo como el que evidencian los cuatro jinetes de Metallica. El apocalipsis musical que estos fulanos encarnan, con todo y los fuegos pirotecnicos y el sonido bombastico, hace recordar el ``principio de los dolores'' contado con lujo de detalles en las narraciones biblicas: puertas abiertas en el cielo, la voz de trompeta que oye el arrebatado en espiritu, los personajes sentados en el solio con entornos de arco iris que irradian colores esmeraldas y anaranjados; de dicho solio se lanzan relampagos y voces y truenos, mientras las lamparas arden delante del lugar repr esentando los espiritus selectos. Y enfrente del multicitado solio hay un mar semejante al cristal, y en medio del trono y alrededor de el cuatro animales llenos de ojos por delante y detras. Tales visiones de los precedentes a la destruccion total son repetidas en el escenario por Metallica. Enter Sandman, por ejemplo, marca el inicio de la Apertura de los Sellos que describen el apocalipsis. ``Vi, pues, como el Cordero abrio el primero de los siete sellos y oi al primero de los cuatro animales, que decia, con voz como de trueno: Ven. Mire y vi un caballo blanco y el que lo montaba tenia un arco, se le coloco una corona y salio para decapitar y vencer. Y con la segunda ruptura salio un caballo bermejo, y al que lo montaba se le concedio el poder de desterrar la paz de la tierra y de hacer que se matasen unos a otros, y se le dio una gran espada. El tercer sello desprende un caballo negro; y el que lo montaba tenia una balanza en la mano; el cuarto, un caballo bayo, cuyo jinete tenia por nombre Muerte, salio y el infierno le iba siguiendo...'', y asi sucesivamente: terremotos, el sol que se pone negro y la luna se vuelve toda de sangre; las estrellas caen del cielo sobre la tierra y luego desapare ce como un libro que es arrollado; y todos los montes y las islas son removidos de sus lugares... a base de thrash y de speed metal con The Unforgiven, Wherever I May Roam, The Four Horsemen, Jumpin the Fire, Whiplash, Seek and Destroy, Metal Militia. Asi es la presencia de Metallica en el Palacio de los Deportes. La monotonia de la destruccion, ejemplarmente ecualizada. Tres horas de martilleo a base de videos, tomas en circuito cerrado desde los camerinos o solio desde donde envian mensajes de pasmosa elementalidad discursiva rociada generosamente con todas las derivaciones del fuck. Ellos mismos son su grupo abridor, nada de mamadas. Y adornandolo todo el singular podio redondo que permite al publico acercarse de manera considerable al grupo. En vario s puntos de la orilla del estrado hay microfonos y monitores, para que no se tenga que mirar constantemente los movimientos del mismo guitarrista. Para Kirk Hammett se instalaron varios pedales wah wah, lo cual le permite hacerla de Jimi Hendrix o Mick Box desde cualquier lugar. Incluso el baterista Lars Ulrich no esta restringido a un solo sitio, gracias al uso de dos baterias giratorias movibles que aparecen y desaparecen de manera alternada a ambos lados del entarimado. Excepto la vez en que el cantante- guitarrista James Hetfield se coloca tras la segunda bateria para ejecutar un solo con Lars. En eso de los solos habria que mencionar que en ellos se hacen geyes por mas de 45 minutos y pasa el tiempo impunemente ante el conformismo del publico. Mencion especial merece el lugar creado para parte de este ultimo: el snakepit o fosa de serpientes donde ``afortunados fanaticos'' (que por medio de concursos radiofonicos consiguieron dicho lugar y a la postre la oportunidad de conocer a los musicos) se instalan en medio de la accion; con monitores que permiten observar la actuacion de los miembros de Metallica lo mas cerca posible. Al snakepit lo atraviesan puentes de acero por arriba, de modo que los musicos lo rodean y los ocupantes no saben con precis ion de donde viene el calor, como los pollos de Don Facundo. Asi, Metallica trata de crear el esquema de un grupo de rock que presenta su accionar en combinacion con imagenes de video en vivo y las bambolinas ofrecen a todo mundo una mirada tras las pantallas. No se preocupan los fanaticos. En el larguisimo encore interpretan Nothing Else Matters, para prender los encendedores y todo eso .