SECCION CULTURA
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CABEZA: Cineastas contemporaneos: Nick Zedd/Joe Christ
CREDITO: JUAN PABLO VILLASEĽOR*

El canadiense Nick Zedd es una de las pocas leyendas recientes del cine underground, ademas de ser el padre de uno de los movimientos mas infames que se hayan podido engendrar. Lo llamaron Cinema of transgression, y como senala su nombre consistia en vulnerar los valores, pero de la manera mas perversa posible. Sus seguidores surgieron a fines de los ochenta, tiempo en el que el mundo habia caido en un repentino barranco de pesimismo y autodestruccion. "No future" era para los jovenes punks ma
s que una falta de expectativas, una ausencia total de intereses. La muerte se volvia moda, costumbre, y la sangre la verdadera, no la escenografica alcanzo los templetes del espectaculo.
A Zedd correspondio el poco envidiable merito de intentar introducir las snuff movies (muertes verdaderas que son filmadas para venderse en el mercado de pornografia sadomasoquista) como una propuesta de arte alternativo, dejando con ello constancia de su oscuro retrato publico: iconoclasta, revolucionario de lo inmoral, depravado sexual, intelectual demente, drogadicto, pendenciero. Llego a ser una de las personas mas indeseables de Manhattan y, al no tener foros para exhibir sus enfermas peliculas,
 las llevo a los barrios bajos para mostrarlas entre borrachos y pordioseros, sitio a donde dificilmente podria encontrarlo la policia, esa a la que de forma tan brutal pinto en Police state, filmada con violadores, asesinos y viciosos (la mayoria de los protagonistas eran o habian sido verdaderos policias).
Otras peliculas de este cineasta delincuente son I shit on God y Whoregasm, ambas protagonizadas por el mismo. En ellas abundan sus temas recurrentes: suicidio, castracion, necrofilia y travestismo. El estado de conmocion que provocan las imagenes de sus peliculas lo hizo famoso, los delitos verdaderos mostrados en ellas, un profugo permanente. Su camara llego a ser tan peligrosa como cualquier arma, pues con esta fue capaz de cometer los actos mas atroces. Conquisto dos apodos ganados a pulso
: "El rey del sexo" y "El cineasta mas peligroso del mundo".
Menos carismatico que Zedd, Joe Christ, realizador de I just thank God my thoughts are pure (donde vestido de sacerdote se dedica a mutilar credos), dejo sonar su nombre despues de que exhibio un corto titulado Communion in room 410. Habia pagado con droga a su amiga Mary Leohr para que hiciera frente a la camara lo que le gustaba hacer en privado, cortarse el pecho y los brazos con un cutter. Despues, Joe y otra persona mas bebieron la sangre de Mary, celebrando una maligna comunion que les r
edituo varios miles de dolares cuando la distribuyeron en video. Asi llego a ser el unico cineasta que cuando gritaba corte! la camara empezaba a filmar.
Al preguntarle cuales eran los ingredientes basicos que el consideraba debia tener el cine, respondio: "Muy sencillo... sexo, violencia grafica, locura, perversion y algun tipo de droga usada de manera destructiva. Para que a mi me guste una pelicula debe tener al menos tres de esos elementos, o bien uno de ellos llevado al extremo. Por supuesto que mi trabajo los contiene todos, y sin ningun argumento que obstaculice su desarrollo".
Nacido por una malsana necesidad de provocacion, el cine de transgresion estuvo siempre condenado a desaparecer por sus mismas caracteristicas. Muchos de sus cultivadores como el propio Christ terminaron detenidos. Nick Zedd, ante la imposibilidad de encontrar financiamiento para sus desequilibradas aventuras, y cansado de huir de la policia, opto por la literatura.
Tommy Turner, tambien transgresor famoso, recientemente ha preferido hacer dinero como actor porno y gastarlo en heroina. Gumby Spenger murio de sida en Paris. Otros se suicidaron, pero para su desgracia, no hubo nadie en ese momento que pudiera filmarlos.

Profesor del Colegio de Literatura Dramatica y Teatro de la FFyL de la UNAM.
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