SECCION ECONOMIA PAGINA 20 CABEZA: La decena tragica CREDITO: ANIBAL GUTIERREZ* La decena tragica ubicada ahora en los ultimos 10 dias de diciembre de 1994, tuvo como consecuencia la aparicion de una crisis financiera que pone en entredicho la consolidacion de los esfuerzos de modernizacion y los sacrificios realizados por la poblacion practicamente durante los pasados 13 anos. ¨Como emerge esta crisis que se pensaba lejana? Una de las explicaciones es la relativa a los desequilibrios existentes en la relacion economica con el exterior. En ausencia de niveles elevados de inflacion, con un programa permanente de saneamiento de las finanzas publicas y con avances reales en la conformacion de una nueva base productiva, la crisis entro por la puerta del desequilibrio externo, expresado en una demanda creciente de mercancias y servicios del exterior mucho mayor a lo que la economia mexicana estaba en posibilidades de financiar con recursos propios y captacion de capitales del exterior. Se sabia que a cambio de un endeudamiento excesivo, la captacion de ahorro externo recaia en la mayor apertura a la inversion del exterior y, de manera fundamental, en la captacion de capitales a traves de los mercados financieros. Asi un flujo creciente de capital externo ingreso al pais para colocarse en activos financieros de corto plazo. En la medida en que este flujo de capitales se mantuviera era posible cubrir las necesidades de financiamiento en dolares e incluso, como ocurrio, incrementar las reservas internacionales del pais. De este modo, la estabilidad financiera quedaba sujeta a dos factores: mientras que la entrada de Inversion Extranjera Directa si podia autorregular la magnitud del desequilibrio externo que generaba via importaciones, la inversion financiera solo garantizaba su permanencia a cambio de contar con un horizonte de estabilidad, certidumbre y ganancias reales derivadas de los rendimientos que obtenian en instrumentos financieros en moneda nacional. La necesidad de mantener este ingreso y permanencia de divisas fue la otra cara de lo que antano se manifesto como la contratacion excesiva de deuda: la incapacidad de la economia para generar recursos propios para sostener un proceso de desarrollo autofinanciable. Este problema del ahorro fue discutido en los momentos previos y finales del proceso de privatizacion bancaria, ya que se vio que el sistema financiero en su conjunto juega un papel central en el diseno de mecanismos que propicien una adecuada y eficiente generacion del ahorro que necesita el pais. Esta situacion tenia que verse acompanada con la maduracion de una reforma microeconomico que permitiese que las empresas productivas comenzaran a generar mayores excedentes y ahorro,s creando asi un acervo de activos y recursos adicionales y crecientes con los que se financiaria el crecimiento y el desarrollo. Ante el retraso de la reforma microeconomica y la falta de mecanismos financieros que dieran sustento a un fortalecimiento microeconomico, las necesidades de recursos descansaron en el cambio de signo de la cuenta de capital. Asi el importante ingreso de divisas como capitales que venian a inversion directa o financiera se convirtio en el soporte de la economia. El mismo caracter de las reformas estructurales promovidas, asi como la problematica microeconomica interna dieron un horizonte temporal mas largo del esperado para que hubiese resultados tangibles e inmediatos en materia de crecimiento del ingreso y el ahorro nacional; asi la Inversion Extranjera Directa se vio atada a estos ritmos de maduracion de los procesos de reforma. Por otra parte, la via de la captacion de capitales externos en mercados financieros mediante colocaciones en la bolsa de valores y en los mercados de dinero del pais, se convirtio en el mecanismo mas socorrido para mantener el financiamiento de la economia. En estas condiciones era evidente que mientras que los capitales del exterior respondieran a los argumentos de certidumbre y rendimiento que les ofrecia la economia mexicana, la ruta de la desinflacion y el crecimiento podia ser mantenida. Sin embargo, la magnitud del desequilibrio en la cuenta corriente comenzo a generar dudas sobre la capacidad real de financiar el desbalance; en esta idea la impresion de que el nuevo peso se encontraba sobrevaluado (propiciando el crecimiento y magnitud del desequilibrio externo) y la consecuente inquietud sobre la permanencia de la paridad y la politica cambiaria, tuvo efectos negativos sobre los inversionistas extranjeros. Luego, los hechos de violencia del ano aun no suficiente y convincentemente explicados y la incertidumbre generada por el silencio de los interlocutores del proceso de pacificacion en Chiapas, vinieron a mermar las garantias de estabilidad y certidumbre que se le habian ofrecido a los capitales del exterior. Su opcion fue volver al dolar y colocarse fuera del pais. Asi, las presiones sobre los mercados cambiarios y de dinero llevaron a la reedicion de una crisis financiera que se presento de manera abrupta e irremediable. Adoptada la medida inevitable, dura y dificil de la devaluacion, el costo economico y social tendra que ser remontado de nueva cuenta a partir de las bases creadas por la concertacion. Ademas de los problemas que impone la actual coyuntura, el problema economico fundamental es el de la insuficiente capacidad de generacion de recursos propios para financiar el desarrollo del pais. El desequilibrio en la cuenta corriente no es mas que la expresion de que la economia mexicana requiere de una gran cantidad de bienes y servicios del exterior para poder operar y que no cuenta con la capacidad suficiente para generar las divisas, los dolares necesarios para poder comprar las partes y refacciones, alimentos, tecnologia, asesoria o el conocimiento de procesos administrativos que demandan los sectores economicos. Para superar esta situacion, cabe mencionar que el punto de partida para reiniciar la politica de estabilizacion es diferente a los del pasado, en virtud de que se cuenta con un avance real de las reformas estructurales que le han dado un nuevo perfil a la planta productiva. Asimismo, hay que reconocer muchas de las causas basicas de los procesos hiperinflacionarios que se han eliminado y que no se abandona el proposito de ahondar en el manejo racional de las finanzas gubernamentales y que ahora el Banco de Mexico esta facultado para manejar de manera mas autonoma el control monetario de la economia. Al mismo tiempo, el fortalecimiento de la capacidad de exportacion es real y la modernizacion de los procesos productivos y mercados de la economia ya se encuentran en marcha, lo cual sera la base para que se pueda dar un impulso inicial a la recuperacion economica. A diferencia del pasado, en esta ocasion si se cuenta con un sustento productivo que puede sacar provecho de la devaluacion. La apuesta presente es la de establecer un nuevo marco de prioridades para enfrentar la reduccion del financiamiento externo, dando un uso mas racional a las divisas disponibles y estableciendo una relacion mas sana y equilibrada entre las necesidades de recursos del exterior y la capacidad de generacion de ahorro interno. El crecimiento tendra que estar sustentado con mayor medida en la propia capacidad interna de financiamiento, lo que implica un sacrificio compartido por todos los sectores economicos, entre ellos el financiero. Al encarecerse el financiamiento del exterior se tendra que recurrir en mayor medida a la utilizacion de los recursos excedentes que genera la propia economia, ello implica mayor racionalizacion en el gasto de todos los sectores economicos y, en consecuencia, la necesidad de generar un mayor ahorro interno. El Acuerdo de Unidad con el que se enfrentara la emergencia economica reconoce la necesidad de que el ajuste no cause danos irreversibles en la capacidad de crecimiento de la economia y tampoco abandona la idea de poner el enfasis en lo social y en la promocion de la inversion como unica fuente generadora de los empleos y de los salarios que permitiran la mejoria en las condiciones de vida de la poblacion. Lo que se busca es que el efecto inflacionario de la devaluacion sea de corto plazo y que no se vea acompanado de factores que induzcan un mayor descontrol monetario o productivo. Un ajuste ordenado, que presente de una sola vez sus efectos, facilitara la reconstruccion de los escenarios de certidumbre que requiere la economia. Por ello la transitoria flexibilidad de la politica cambiaria debe permitir que en un plazo breve se fije un nuevo nivel de equilibrio del precio del dolar, creando un horizonte de certidumbre para los inversionistas nacionales y extranjeros. En materia de salarios, al ratificarse el acuerdo del 20 de diciembre (4 por ciento mas 3 por ciento mas 3 por ciento) y proponerse la determinacion de incrementos adicionales basados en la productividad, se amplio la capacidad de negociacion de los sectores obrero y empresarial, contando ambos con el apoyo gubernamental para definir los indicadores especificos de productividad. Al mismo tiempo se decidio crear la Comision Nacional de Productividad y aumentar el numero de becas de capacitacion otorgadas por el Gobierno Federal. En materia de precios el sector empresarial se comprometio a no elevar precios injustificadamente permitiendo solamente ajustes proporcionales al incremento en el costo de los insumos importados. Tanto las compras gubernamentales como el abastecimiento de las empresas nacionales buscaran promover una mas eficaz sustitucion de importaciones y el establecimiento de cadenas de produccion y distribucion que integren realmente el aparato productivo nacional. Asimismo, asi como se fortaleceria el regimen de seguridad social de los asalariados, los productores rurales continuaran beneficiandose de los apoyos que brinda Procampo. El objetivo es no desalentar la actividad economica nacional fomentando la productividad de la mano de obra, manteniendo los apoyos que requieren los sectores productivos que se encuentran em mayor desventaja. En lo que toca al ahorro nacional el sector publico reducira su presupuesto de egresos hasta 1.3 puntos porcentuales del PIB manteniendo como prioritario el gasto social y los programas de abatimiento de la pobreza. Se mantendra tambien de manera selectiva la inversion publica y se estimulara la participacion de la inversion privada y extranjera en la generacion de infraestructura. Con la meta de alcanzar un superavit de las finanzas publicas del 0.5 por ciento del PIB, se erradicaran pretextos inflacionarios y se fortalecera el ahorro interno. Para evitar incrementos injustificados en el nivel de precios, junto con la reduccion del gasto publico se contraera el credito en la economia pero se disenaran esquemas para facilitar el acceso a recursos a las empresas micro, pequenas, medianas y exportadoras, que cuenten con proyectos efectivamente viables. El dinero efectivamente como ya se ve, sera caro. El aumento en las tasas de interes trae fuertes problemas a las empresas y a los consumidores, pero ademas conlleva situaciones muchas veces insalvables de cartera vencida, por lo que una vez asumido el ajuste y recuperadas las condiciones de certidumbre y estabilidad monetaria y financiera, las tasas de interes deben volver a bajar. Por lo pronto, el sector financiero y las autoridades estudian mecanismos para darle una salida a la actual situacion manteniendo un cierto flujo de credito a las empresas, al tiempo que se buscan otras opciones de pago y reestructuracion de plazos de vencimiento. La simplificacion fiscal, la creacion del Consejo Asesor Fiscal y del Consejo Nacional de la Pequena y Mediana Empresa, asi como la revision del marco regulatorio de las actividades economicas, complementan las medidas de emergencia con las que se enfrentara la coyuntura actual. Las nuevas metas del Programa de Emergencia Economica contemplan un crecimiento minimo de la economia de alrededor del 1.5 por ciento para 1995, asi como una inflacion del 15.9 por ciento. De cumplirse los compromisos asumidos por los sectores firmantes del Acuerdo de Unidad el efecto del ajuste en la actividad economica no traera un crecimiento nulo o negativo, en tanto que el disparo inflacionario mantendra la dinamica de precios en un rango no hiperinflacionario y con posibilidades reales de llevarlo otra vez a la baja. En estas nuevas condiciones el crecimiento economico y la ulterior reduccion inflacionaria marcharan mas lentamente pero con nuevos elementos para garantizar tendencias estables que devuelvan la certidumbre a los mercados. El desequilibrio de las cuentas con el exterior sera reducido practicamente a la mitad de lo que fue en 1994, pero ello obligara a una mayor racionalizacion en el uso de los recursos, contando para ello con mecanismos de aliento a la productividad, la cual sera la base del nuevo crecimiento y de la creacion de la cantidad creciente de empleos que demanda la poblacion. .