PAG. 28 SECCION: INTERNACIONAL CINTILLO: COORDENADAS CABEZA: Bosnia, la gran deuda del mundo CREDITO: Edit Antal rque tan solo provocara mas destruccion. Al parecer los moralistas de la politica y los hombres del establishment politico-militar han llegado a acuerdo en cuanto a que los serbios de alguna manera tienen que ser castigados. No obstante sus razones son distinta. Los primeros sostienen que en la politica todavia cabe hablar de la existencia del crimen original; sea lo que fuera que ha pasado durante la guerra, fueron los serbios que empezaron, y asi, ellos son los agresores. De alli su preocupacion: ¨que pasaria con el destino del mundo, si al agresor -en las pantallas de la television y frente a todo el mundo- se le permitiera devorar sin mas su victima? Argumentos de este tipo a la elite politica no la conmueven demasiado, pues se han visto ya muchas veces de que manera suelen acabar las rapinas con su botin. Para ellos el problema radica mas bien en que -en esta ocasion precisamente en las valles del rio Neretva y el Drina- se esta cuestionando el nuevo orden europeo, e incluso, el mundial. No hay que equivocarse, pues no se trata de un asunto de principios: las formas civilizadas de resolver conflictos, la prohibicion del uso de la fuerza, o la violacion masiva de los derechos humanos. Estos principios pueden tener cierta importancia para los protagonistas en la determinacion del orden mundial actual, pero la causa principal de su indignacion es presumiblemente otra, bastante mas prosaica: ¨como es posible permitir que las potencias mundiales, y los organismos bajo su influencia, como la ONU y la estructura europea de la OTAN, durante tanto tiempo se encuentren en confrontacion con un movimiento rebelde e ilegitimo de un pais pequeno y atrasado? Pero en las viviendas sin calefaccion de Sarajevo y en las otras ciudades del este de Bosnia que estan siendo rodeadas y abastecidas por los convoyes de la ONU, lo que mas le interesa a la poblacion no es precisamente el equilibrio del poder internacional. Los politicos musulmanes bosnios se dan cuenta sin equivocos que van muy mal en los frentes de batalla. Tambien esta claro que la solidaridad islamica en si no va a ser suficiente, pues el apoyo eventual proveniente de los paises arabes, de Turquia y de I ran no tendra la fuerza necesaria para provocar un giro significativo en los acontecimientos. Sin el compromiso de algun angel de la guarda atlantica, el cambio nunca se dara. Tal vez para ello sea inevitable correr el riesgo de alguna accion militar, pues la salvacion de por si no se producira. No se puede permitir tampoco que la situacion se convierta en una constante sin eventos, porque de esta manera Bosnia dejara de ser en la media un acontecimiento de la categoria de superclase. Tan pronto que la presion ejercida a traves de la pantalla disminuya, el potencial angel de la guarda mucho menos posible que llegara. Entonces, hay que producir incesantemente pequenos enfrentamientos locales, porque ya se percibe que la atencion mundial se va en bajada. En este momento, confian algunos sonadores, qu izas por razones de politica interna, Estados Unidos pueda que este interesado en intervenir seriamente... La destruccion y el drama en Bosnia puede seguir sobre todo porque el angel de la guarda no se atreve a admitir que en este momento no esta en condiciones de salvar a nadie. El reconocimiento claro y publico de este hecho significaria una vil derrota en la politica interior. Existe un solo fracaso, que seria mayor que el anterior frente a la opinion publica interna: intervenir e inmiscuirse en una guerra balcanica de tipo de guerrilla prolongada. Los instintos de las elites politicas occidentales funcionan, por tanto saben muy bien que ninguno de estos caminos es viable. Y los musulmanes que por supuesto tambien reconocen lo anterior, sin que lo pueden aceptar del todo, siguen intentando. Mientras tanto en los frentes militares sus posiciones continuan decayendose y sus posibilidades de negociar van de mal en peor. A estas alturas no cabe duda que la clave de la solucion no esta en Sarajevo, sino en las capitales occidentales. Antes o despues va a ser inevitable decir algo explicito, y tomar una decision si se quiere evitar que la sangre siga corriendo exclusivamente para forzar una intervencion terrestre, eso es, sin sentido alguno. Al fin y al cabo la practica internacional -en total independencia respecto a los principios generales anunciados- ha sido capaz de congelar la division de territorios conseguidos gracias a la fuerza. El problema de Chipre o el del conflicto arabe-israeli por ejemplo, ofrecen algunas soluciones practicas en materia de politica militar y vigilancia a nivel internacional ¨porque no se podria aplicar lo aprendido en estos casos tambien para la antigua Yugoslavia? Para ello, ante todo y como minimo, seria necesario lograr de inmediato la suspension de las hostilidades en el campo de batalla. .