PAG. 30 SECCION: DEPORTES CABEZA: FERNANDO MARCOS Que Dios y los Santos Reyes los lleven con bien. Especialmente, que iluminen al director tecnico para que pueda tomar las decisiones adecuadas a un escuadron en combate. Y no me refiero a la estrategia, la tactica, la condicion fisica, animica, la voluntad de vencer y todos esos valores que transforman, con mucha frecuencia, a un timorato asustado en un caudillo con aires de conquistador. Desde luego, la victoria llega, como las mujeres, cuando el hombre sabe luchar por ella. Y ese trabajo se lleva al cabo antes de saltar a la cancha. Ya, en el terreno de juego, los muchachos estan tan entregados a la pelea, que nada de lo que les puede alterar en su animo, salvo la capacidad del rival que es preciso derrotar, los afecta. šEl publico? Ese grita, pero no juega! Hay otros factores normalmente descuidados, pero que a la larga son los que definen el curso de una actuacion. Ahora no van a jugar en otra cancha simplemente, factor que tampoco hay que descuidar. Pero lo fundamental son otras cosas. Ellos van a cruzar el oceano. Ellos van a cambiar, incluso, de continente. Volaran, horas y horas, en el medio aereo que no es el natural del ser humano. Van a cambiar de alimentacion. Las camas en que dormiran no son las suyas y eso afeca necesariamente al ser humano, acostumbrado a una suavidad o a una dureza que es la suya. El lenguaje y los horarios son radicalmente distintos. El cuerpo humano precisa tiempo para regular su reloj vital. Y esta el temor natural a no hacer las cosas adecuadamente. Y, por supuesto, tambien estaran preocupados por sostenerse dentro de la plantilla -como dicen en Espana- o del equipo, como decimos nosotros en Mexico. Y estaran pensando en su cotizacion, en sus honorarios que son muy altos y es preciso conservar, por lo menos, o aumentar si hay superacion. Podriamos decir que muchos partidos se ganan o se pierden, segun la actuacion del entrenador en un papel que se asemeja mucho al papel que el juega en la consolidacion de la autoestima, del orgullo, pues, que es el alma del gladiador, muchas veces mas preocupados por el temor a la derrota y que en ocasiones es mas importante que la derrota misma en el equilibrio emocional del jugador. Este tema no es puramente teorico. Asi fueron tratados todos los jugadores que tuve el honor de dirigir cuando se trataba de partidos de tipo especial en el extranjero. Y los resultados fueron sencillamente alentadores. Asi trato Nacho Trelles, en Rusia, a ciertos jugadores que se estaban derritiendo de pavor. Ojala y el doctor Mejia Baron apriete esa tecla que todos tenemos y la que produce plena confianza y hasta cierta arrogancia que en dosis adecuada dista mucho de ser perjudicial para los resultados. Veamos el caso de los argentinos, cuya arrogancia es un alto porcentaje explicativo de sus victorias. O la arrogancia seca, del uruguayo, que la gente llama simplemente "garra" y que no es otra cosa que la aplicacion a hechos concretos de alta cofianza en si mismos. En fin, en torno al seleccionado nacional hay tanto que decir que con un comentario de las dimensiones de este no cubre sino un leve tramo del paisaje emocional. Los futbolistas -y esto debe saberlo el entrenador que tiene ademas un titulo universitario- obtienen mejores resultados cuando quien dirige los trata como seres humanos mas que como futbolistas. Y esto es facil de entenderlo: cualquier futbolista seleccionado juega mejor al futbol que el mejor de sus entrenadores. Es el hombre el que interesa. .