SECCION: ESPECTACULOS PAG. 8 CINTILLO: Veinte anos despues CABEZA: La cancion no es la misma CREDITO: Temo que apenas se apaguen las luces en el Auditorio Nacional, en medio del silencio empezaran los gritos, primero timidos, despues imperiosos: "Queremos roooock!". Gracias a la desinformacion, lease cierta publicidad que anuncia a Robert Plant como si el solo -sin Jimmy Page, John Paul Jones, ni por su supuesto el fallecido John "Bonzo" Bonham- fuera Led Zeppelin, buena parte del publico puede decepcionarse si desde el principio no escucha las notas de -digamos- "Whole Lotta Love". Robert Plant viene presentar material de su disco solista mas reciente, Fate of Nations, y no a hacer proselitismo a favor de Led Zeppelin, a pesar de que han surgido -hace apenas unos dias- los rumores de una posible reunion de Plant, Page y Jones para realizar un concierto en Nueva York. Hasta ver -y escuchar- no creer. Cierto que uno no dudaria en incluir la belleza poetica de "Stairway to Heaven" en la lista de las diez canciones para la tan sobada isla desierta. Imposible evitar el regreso cotidiano a esas canciones de cabecera en las que la voz de Plant es un derroche de deliciosa obscenidad y cachonderia. Basten dos ejemplos: la sensualidad desenfrenada de "Dazzed and Confused" y la orgiastica letra de "The Lemmon Song". Saludable es atentiguar que -demandas judiciales de Willie Dixon aparte- los escarceos de Plant y Compania con el blues en piezas como "I Cantt Quit You Baby", "You Shook Me", "Bring it on Home", "Since Ive Been Loving You" y "Thats the Way" suenan tan desafiantes como cuando fueron grabados. Sentir las incisiones del metal punzocortante de "Comunication Breakdown", "Whole Lotta Love" o "Heartbreaker" resulta tan recomendable como una bocanada de oxigeno en nuestra contaminada ciudad (o, en su caso, de smog cuando se esta en el campo). Uno no puede abstenerse de recordar el alucine colectivo que suponia escuchar por Radio Capital los siete minutos de "When the Levee Breaks" en el programa Vibraciones y constatar que uno andaba por el buen-mal camino. La misoginia de Plant se pasa por alto cuando su voz, en pleno derroche de caricias, conduce a Led Zeppelin por piezas amorosas como "Thank You" y The Rain song" o en sus odas epicas al estilo "No Quarter" y "The Battle of Evermore". Pero la cancion ya no es la misma. Desde que el Zeppelin dejo de volar Plant ha seguido su carrera solista en otras direcciones, aunque es inevitable en ciertos momentos escuchar las reminiscencias de su estadia con el grupo que le dio la fama y la fortuna. No solo eso: tambien se han dado fajes, peleas verbales y amagos de reconciliacion entre Plant y Jimmy Page, al grado de que incluso compartieron el escenario con Jones y el hijo de Bonham en la bateria para celebrar los cuarenta anos de vida de Atlantic . La magia, al menos en lo que he visto y lo que mis sentidos me dictan, ya no ha surtido el mismo efecto. Mejor escuchar a Plant -y a Page con Coverdale- con sus nuevas propuestas, como debe ser el concierto de este viernes. Espero equivocarme y encontrar que el publico recibira con atencion la musica de Plant. Resultaria lamentable que, en medio de piezas como "Down to the Sea", "Colours of a Shade" o "The Greatest Gift" de su grabaicon mas reciente, se escucharan silbidos y, en el impune anonimato que da la oscuridad, el grito de guerra patenando en el futbol y ahora desplazado a otras reuniones multitudinarias: "culeeeeeros!". No, estimados lectores, segun nuestros informes Robert Plant viene a tocar la musica de Robert Plant, aunque siempre cabe la posibilidad de que nos ofrezca una probadita de Led Zeppelin. En cuanto a la posible reunion del grupo, Plant podria cambiar de opinion y parafrasearse a si mismo para ahora decir que Zeppelin "es una puerta abierta". Dejemos por el momento en paz el asunto de la probable reunion y concentremonos en el concierto del creador de una reflexiva Fate of Nations, seguramente Plant nos lo ag radecera .