SECCION: ESPECTACULOS PAG. 8 CINTILLO: Directo de Australia CABEZA: CREDITO: Sean Bowley, cantante, guitarrista, tecladista y vocero de Eden, un dueto australiano, es un tipo de caracter romantico para quien el saber nunca se agota. "En realidad -dice- no sabemos nada. Parte del reto es ir hacia adelante y aprender de aquello que se desconoce. Tienes que resignarte a que eres un ciego y si buscas algo te ayudara a ver, aunque nunca podras ver la totalidad. Eso es parte de la disposicion humana, un fragmento del gran misterio". Aunque la musica de Eden no es pretensiosa, tal vez en esta cita de Sean se encuentra su principal atractivo. Eden es una puerta, uno de los accesos a un mundo en donde la sensualidad y la espiritualidad imperan, un mundo no unico, pero si posible, un espacio plagado de belleza, sonidos etereos, cierto misticismo y una gran dosis de misterio. Devoto lector de la teologia medieval y celtica; apasionado de Charles Baudelaire y entusiasta de Edgar Allan Poe, el oriundo de Melbourne unio esfuerzos con Pieter Bourke (percusiones, teclados, programacion) para dar vida a Eden cuya primera produccion discografica se titulo acertadamente Gateway to the Mysteries. La referencia obligada al encontrarse con Eden es otro dueto: Dead Can Dance, pero mientras estos parecen cultivar una particular devocion por el medioevo y efectuar en cada paso una severa introspeccion, Eden recure a elementos similares en su sonido y al anadir nuevas influencias: sonidos aborigenes, visiones de Oriente, mitos celtas, truncan abruptamente la semejanza. Eden ha editado recientemente un EP, seis canciones bajo el titulo de Healingbow (Projekt, 1993), una coleccion de temas suficiente para reafirmar la reputacion del dueto y en donde los rasgos se orientan hacia una belleza espasmodica, atenazante, sin traba alguna. Cuando "Our Scent Rides the Breeze" abre el EP, se tiene la sensacion de entrar a un universo misterioso en donde nos recibe una atmofera de irrealidad que inmediatamente nos transporta mediante una envolvente percusion hacia los parajes de oriente, mientras la guitarra se mueve seductoramente para enmarca la voz, grave, de Bowley. Son oleadas tenues, nunca rotas, ni siquiera por una guitarra que quiere romper, pero se agazapa ante esa intimidad subyugante. Ese dejo de espiritualidad se acrecenta en "Healingbow". El chelo imprime un matiz de melancolia, las percusiones marcan un imperturbable ritmo y la guitarra recorre graciosa, ligera, la melodia. La voz nunca llega a desgarrarse, pero posee un toque dramatico. Eden retoma ciertos tintes de clacisismo en su musica, los desgrana en un trabajo de sampleo que en ocasiones amenaza con llegar a las orquestaciones rimbombantes, pero se contiene para no sacrificar el equilibrio. Pero si la espiritualidad es una constante, la sensualidad aflora a borbotones. "Dreamwheel" es la unica pieza instrumental y en ella el tono inicial es de presagio. Las percusiones, lugrubres, se mueven en el fondo mientras la guitarra teje un arpegio constante. Las cuerdas, sampleadas, tienden un puente entre ambos instrumentos. En un corte, Eden presenta lo luminoso y lo sombrio, como si crearan una lucha entre poderosas fuerzas. La batalla entre la oscuridad y la luz es ganada por esta, pero el esfuerzo no ha sido impune, al final es advertible, en el decaimiento instrumental, el derroche de energia. Pasion desbordante, misterio. Dos ingredientes en la musica de un grupo novel, pero cuya sonoridad es retumbante. Eden esta lejos de los agobios de la fama; sus musas son demasiado orgullosas para dejarse seducir por esas liviandades, pero poseen un influjo magnetico e irradian un encanto inigualable el cual hay que atrapar a la primera oportunidad. Healingbow de Eden. Distribuye Opcion Sonica (553-63-38). .