SECCION INF. GRAL. PAG. 11 BALAZO: El hombre de la Huasteca salio al encuentro del candidato priista CABEZA: Nada dijo, solo esperanza habia en sus ojos CREDITO: ARTURO ZARATE VITE HUEJUTLA, Hgo., 10 de enero.-Abrio sus brazos morenos y sus ojos se agrandaron llenos de emocion y de esperanza, salio al encuentro del candidato priista, Luis Donaldo Colosio. Hombre de la Huasteca, curtido por el trabajo del campo, con las manos callosas, con la tierra en las unas, vestido de camisa y pantalon de manta que salio de entre la valla, la que se formo en la avenida Juarez, cuando los papelitos verde, blanco y rojo caian sobre la comitiva, y el sol a plomo, al mediodia. Aproximadamente 40 anos, no pronuncio ninguna palabra, solo esa mirada de esperanza, de alguien que veia que llegaba, a esta tierra que no esta exenta de marginacion y pobreza, el hombre, el politico, del que espera una solucion definitiva para los problemas de rezago en la region. Habia que estar ahi para ver esa mirada, con ojos que se agrandaban, que decian mucho mas de lo que uno pudiera imaginar y que se fijaban en el abanderado priista, que camino mas de 500 metros, sobre la avenida central para arribar al sitio del acto, a la Plaza Revolucion, arbolada de sauces. Una mirada que se topo con la del promotor de la cultura del esfuerzo, dispuesto a llevar adelante una profunda reforma social, que sabe que para superar la pobreza se tiene que llegar a las regiones con nuevos instrumentos y nuevas formulas de concertacion. El candidato, vestido informalmente, con los zapatos empolvados, no vacilo en darle el abrazo, en reconfortarlo, ante la mirada de decenas y decenas de campesinos e indigenas que formaban valla para saludar y ver al candidato. Gente del pueblo, aqui donde habitan alrededor de 80 mil personas, que luchan por dejar atras, para siempre, la pobreza, los mas con ropa de ciudad, los menos con vestimenta del campo, con su sombrero de palma, calzones blancos y huaraches. Ahi estaban, en la valla, los huejutlenses. Luis Donaldo, a paso rapido; lento, muy lento por momentos por quienes salian a saludarlo, alzaba los brazos para agradecer las manifestaciones de apoyo. Un grupo de mujeres, al mismo paso del candidato, con la vestimenta de la region, con los colores rojo y anaranjado sobresaliendo en forma de adornos, de flores, en sus vestidos blancos, rumbo a la Plaza de la Revolucion, donde ya se encontraban mas de 20 mil campesinos e indigenas de la region, de los municipios de Huautla, Atlapexco, Xochiatipan, Huazalingo, San Felipe Orizatlan, Tlanchinol, Jaltocan, y por supuesto, de Huejutla. Ante ellos, con los rayos solares sobre su humanidad, con un calor que hacia correr el sudor por la frente y provocaba que la ropa se pegara al cuerpo, Luis Donaldo Colosio, con la comitiva a sus espaldas, miembros del Comite Ejecutivo del Partido e invitados especiales, y un poco mas atras, los bustos en bronce de Francisco I Madero, Venustiano Carranza y Antonio Reyes Cabrera, huejutlense que combatio a los franceses en 1866, se comprometia con los que menos tienen. Se comprometia a poner al servicio de los que menos tienen, "todo lo que hemos logrado". Convocaba a todos los mexicanos, a todos sin excepcion, a superar la pobreza, la exclusion y la desigualdad. Asi arrancaba la campana, en su primer dia, en su primera etapa, en el corazon de la Huasteca, en momentos en que las miradas del Mexico de hoy voltean preocupantes hacia Chiapas, hacia ese estado donde la miseria extrema duele. Luis Donaldo Colosio alzaba la voz: "Los acontecimientos de Chiapas son un llamado a la conciencia de todos los mexicanos". Los indigenas y campesinos de la region lo escuchaban en silencio, atentos a cada una de sus palabras, rostros serios, de sonrisas perdidas, con la mirada de la esperanza. Solo el contingente de los petroleros, con su lider Carlos romero Dechamps a la cabeza, era el que se esmeraba en hacer ruido, en hacerse notar. El candidato no dejaba de mirar a los indigenas y campesinos, que pacientemente lo habian esperado, escuchando a un animador que hablaba en espanol y en nahuatl, y que cuando callaba, recurria al tocadiscos, que una y otra vez tocaba la cumbia "Sopa de Caracol". Un escenario donde tambien se escuchaba, en la espera del abanderado priista, la banda del pueblo, con grandes tubas y tambores, con musicos de sombrero para evitar los rayos solares sobre los rostros morenos, muy morenos. Colosio, en su discurso, de frente, de pie, era contundente: "La paz, la estabilidad y la legalidad son las vias de toda solucion verdadera. La pobreza no puede ser destino ni pretexto para dividirnos". El ausente, el que no se vio por ningun lado en este acto, fue el gobernador hidalguense Jesus Murillo Karam, pero si estaban los ex gobernadores como Guillermo Rosell, Jorge Rojo, Adolfo Lugo Verduzco, Raul Lozano, Vicente Aguirre y Ernesto Gil. Tambien miembros del Comite Ejecutivo del PRI como Pedro Joaquin Coldwell, Jose Luis Soberanes, Fernando Ortiz Arana, Jose Antonio Gonzalez Fernandez y Lievano Saenz. Gente del comite de campana, como su coordinador Ernesto Zedillo Ponce de Leon, Guillermo Hopkins, Ricardo Canavatti y Alfonso Durazo. Invitados especiales, como Fructuoso Lopez Cardenas, Victor Alfonso Maldonado y Franco Carreno. Con todos ellos arranco la campana en el corazon de la Huasteca. Luis Donaldo Colosio siguio su camino, a traves de una carretera sinuosa, hacia Tamazunchale, Huichihuayan y Ciudad Valles, San Luis Potosi. Tambien se daria tiempo para detenerse en el trayecto, en las poblaciones denominadas Las Armas y Las Palmas, donde los indigenas de la region lo aguardaban con sus demandas, con sus cartas a este candidato que esta decidido a cambiar las formas de la campana de su partido, a cumplir la promesa de la austeridad. El candidato que arranco su campana en el corazon de la Huasteca y que para llegar a este punto, primero del Distrito Federal a Tampico, viajo en avion comercial, de Mexicana, ya no avion especial, y de Tampico a Huejutla por carretera. El candidato de la cultura del esfuerzo comercial, de Mexicana, ya no .