SECCION CULTURA PAG. 38 BALAZO: Filarmonica de Los Angeles CABEZA: Un compatriota revive a Jean Sibelius CREDITO: ROBERTO GARCIA BONILLA Hace unos dias se presento la Orquesta Filarmonica de Los Angeles (OFA), dirigida por su titular desde 1989, Esa-Pekka Salonen (1958). Esta orquesta tiene una tradicion de tres cuartos de siglo y entre sus directores se nombran Artur Rodzonski, Otto Klemperer, Zubin Mehta, Carlos Maria Giulini y Andre Previn. En segundo programa que presento en Bellas Artes la OFA, ademas de interpretarse la obertura La consagracion de la casa op. 124 de Beethoven (1770-1827) y el Concierto No. 1 para cello y orquesta de Shostakovich (1906-1975), dejo una honda version, por momentos dramatica, de la Segunda sinfonia de Sibelius. Entre tantos nombres y obras, con frecuencia nos preguntamos quienes son los artistas realmente esenciales; la historia, la critica y en menor proporcion la acogida de las obras son reflejo y explicacion de esa verdad que no siempre es muy clara. Jean Sibelius (1865-1957) es uno de los sinfonistas tardios mas conocidos y tambien tocados regularmente; representante del llamado Nacionalismo, su obra se alimento en distintas vertientes; la critica senala temprana influencia de Chaikovski (1840-1893) y de Strav inski (1882-1971). Pero el parecio haber recogido la esencia de la tradicion nordica en el Kalevala, la epopeya nacional finlandesa, recopilada por Elias L”nnrot hacia 1849 y basada en los cantos populares recogidos a lo largo de su viajes por Finlandia oriental, asi como en las leyendas oidas en sus viajes que contaban los celebres runoia (cantadores, juglares). Se supone que son versiones poeticas de hechos historicos que sucedieron hacia el siglo X. Ya en su primera obra de importancia, Sibelius tiene presente el Kalevala; Kullervo op. 7 para solistas coro y orquesta. La leyenda dice que Kullervo se atraveso con una espada despues de seducir a su hermana sin saberlo (de esta obra existe una reciente y esplendida grabacion con la Filarmonica de Los Angeles y Esa-Pekka Salonen -Sony, SK/52/563-). Seguiran obras como En saga op. 9 (1892), 6la suite Karelia (1893). La presencia directa de Kalevala esta en Cuatro leyendas; El cisne de Tuonela (1893-95) es u na de ellas. Sibelius transformaria su obra a partir del Concierto para violon (1903) que se despide del romanticismo; en ese tiempo su vida tambien cambia, compra una casa en las afueras de Helsinki, donde vivira con su familia el resto de su vida. La critica ha senalado que el estilo orquestal de Sibelius se basa en pequenos motivos ritmicos en ostinato, estridentes fanfardias de alientos y metales, y abruptos cambios de texturas (timbricas), son crecientes y mezclados con permanentes cambios tematicos, que se facilitan con el soporte de la linea principal; con mucha frecuencia diversificados por la armonia. Sibelius tambien vislumbro el adelanto senala Veijo Murtomki- de un neoclacisismo dinamico que favorecio su popularidad en los anos veinte. En e ste lapso se inclino por un estilo de orquestacion mas flexible, basado en suaves capas sonoras, superponiendo motivos tematicos con texturas mas llanas. El autor, cuyas obras mas conocidas son El vals triste, y Finlandia, ya seria una celebridad hacia 1930, aunque despues de la Primera Guerra solo produjo cuatro obras mayores: la Sexta y la Septima sinfonias (1923 y 1924), la musica incidental para La tempestad (1925) y el poema sinfonico Tapiola (1925). Se cree que compuso y destruyo una octava sinfonia. Significa que, antes de morir, durante mas de 30 anos Sibelius no compuso nada. Su reputacion e influencia ha sido notable entre compositores, sobre todo escandinavos, ingleses y estadounidenses; sin embargo, hay quienes piensan que la mayor parte de la obra de Sibelius que con la de Bartok (1881-1945) representa uno de los mayores ejemplos del nacionalismo europeo es efimera. Mas alla de las opiniones de los criticos, la Orquesta Filarmonica de Los Angeles nos dejo una interpretacion unica de la Segunda sinfonia en Re mayor op. 43 (1902) (al menos este redactor nunca habia oido a un Sibelius tan intenso). Esta es una obra que emblematiza la musica nordica; por simple asociacion (arbitraria o no) los vastos bosques coniferos en medio de frialdad y soledad, estan presentes en esta obra que tambien tiene momentos luminosos; Salonen la recreo con briosa vitalidad; quiza esa fue la m ayor de las virtudes que no fueron pocas de esta version. La masa orquestal pudo oirse como una conjuncion de sedimentos sonoros, siempre distinguibles entre si; hubo un contraste de la sonoridad, el timbre y la textura creada entre estos elementos y la parte melodica y armonica. La OFA logro atmosferas tenues y finas (primer movimiento) sucedidas de bloques intensos y brillantes. La flexibilidad de esta orquesta es notable. Como diria Ricardo Chailly, los grandes musicos son como camaleones: el sonido debe ser preciso, de acuerdo al tipo de autor y epoca. Pareciera que esta orquesta, como todas las de primer nivel, no parece necesitar director (claro, es un decir); hay un dominio de todos los elementos de ejecucion. El joven director finlandes nos hizo pensar que Sibelius, compositor importante, y que su ia hace medio ano virtudes de las orquestas estadounidenses: espectacularidad y equilibrio sonoros, tecnica depurada. Salonen revivio a un compatriota de manera ejemplar. .