PAG. 17 SECCION: ECONOMIA CINTILLO: DEBATE CABEZA: AL FILO DE LAS DOCE CREDITO: Enrique Contreras Montiel Estan a punto de sonar las doce campanadas que daran por concluido un ano de desencantos y tensiones que, sin embargo, tratando de ser un tanto optimistas, es, ha sido, un esfuerzo para avanzar. Descalabros, porque la caida de la actividad economica "fue mayor de lo que se esperaba", a decir del dirigente del Consejo Coordinador Empresarial, Luis German Carcoba. Pero las dificultades se dieron en un ambiente de tensiones, en varios sentidos, que confluyen en un reacomodo de los interreses politicos y economicos con vista a la sucesion presidencial. Este ano de 1993 sera un parteaguas en la historia nacional porque, por un lado, ha sido de importantes cambios en el balance de las contiendas electorales y su desahogo a traves del debate publico. Pero tan importante como eso y quiza mas, es que este ano tambien dio inicio a un replanteamiento de las relaciones clasi stas en el sistema productivo nacional al introducirse la formulacion del aumento salarial con base en la productividad. Ese acuerdo fue logrado por medio de la mesa de concertacion en que se ha convertido el PECE, despues de prolongadas negociaciones que iniciaron hace varios anos. Lo cierto es que tanto por el lado empresarial como obrero llegaron a correr versiones que hablaban de la posibilidad de abandono y rompimiento de la concertacion. Sin embargo, el primer paso importante fue cuando el lider cetemista, en su ultima declaracion tradicional en julio, dijo a la prensa que daria a conocer un mecanismo para recuperar g radualmente el poder adquisitivo del salario. El proyecto aludido habia sido preparado por la CTM y con la asesoria de los secretarios del Trabajo y de Hacienda, Farell Cubillas y Aspe Armella. Ese paso resultaba importante porque no era la primera vez que se ponia sobre el papel y se tenia que retirar. Ello era porque la medida del aumento del salario de acuerdo a la productividad habia estado sirviendo tambien para deslindar posiciones politicas frente a los empresarios y tambien dentro del mismo movimiento obrero organizado entre la vieja escuela y los renovadores. Al grado habian sido las controversias despertadas por el mecanismo que en la fase IV del PECE, que entro en vigor el 27 de mayo de 1990, se introdujo el Acuerdo Nacional para Elevar la Productividad, mismo que no opero y se elimino de plano en la firma siguiente a instancia del movimiento obrero. Por ello, cuando el 25 de mayo de 1992 se firma el Acuerdo Nacional para la Evaluacion de la Productividad y la Calidad (ANEPC) parecia haberse logrado el cambio en la cultura del trabajo en Mexico. Pero viendose bien, el ANEPC no establecia propositos firmes ni precisos. De la misma manera, en la penultima firma del PECE, que entro en vigor el 20 de octubre de 1992 y concluyo el 31 de diciembre de 1993, se precisaba en el punto 4o. que "en las revisiones contractuales los sectores obrero y empresarial reiteran su voluntad de procurar el sostenimiento de un clima propicio a la negociacion en la mas amplia libertad de las partes. La necesidad de mantener el crecimiento de la economia y del empleo ante un entorno economico recesivo, y de lograr simultaneamente el fortalecimi ento de los salarios reales, exigen consolidar la inflacion de un digito para 1993 y promover que las negociaciones contractuales se resuelvan dentro de la tasa inflacionaria objetivo de esta concertacion". Dicho de otra manera, se volvia una vez mas a subordinar la negociacion salarial a los objetivos macroeconomicos, sin que realmente se introdujera la negociacion microeconomica, que es lo que implica la medida del aumento de los salarios de acuerdo a la productividad. Pero no porque se haya dado un paso importante en el PECE, que entro en vigor este 3 de octubre, significa que se hayan eliminado todas las dificultades. La etapa actual es de transicion, de establecimiento de nuevas reglas del juego y de readaptacion de otras con viejas historias, como sera la discusion fiscal en los bonos de productividad. Asi comenzaremos 1994, con nuevos retos, pero habiendo avanzado en lo mas dificil: la estructura microeconomica. .