GUIA: DMAR SECCION: Deportes Pag. 2 CABEZA: Fernando Marcos Comenta No hay duda: el futbol mexicano tiene un increible poder de convocatoria: ciento catorce mil espectadores en los graderios y vaya usted a saber cuantos europeos viendo el juego por TV. Por eso se jugo a las quince horas de Mexico y entre diez y once del Viejo Mundo. Y confirmamos: el futbol ya no es solo un deporte, un espectaculo, sino tambien una industria que gira muchos miles de millones a lo largo y a lo ancho del mundo. Bueno, pues lo que vieron los europeos tal vez preocupe a nuestros rivales durante el mundial. Porque la verdad sea dicha vimos un primer tiempo rico en buen futbol... del lado mexicano. Por lo que toca a los alemanes, intentaban muchas cosas, pero solo le salian, mas o menos bien, dos de ellas: una defensa hermetica y contragolpes desesperados, unas veces cortadas por nuestra defensa, esta vez mas cautelosa que en otras ocasiones, o por la maestria de Jorge Campos, que hizo cosas que, sin querer ser provocativas, sin duda pusieron de mal humor a los germanos: el talento del rival no alegra mucho. Mexico tomo el control de la pelota, a base de pases cortos, vivaces, precisos, alternados con gambetas, paredes, "sombreritos" y a las veces lo que fuera preciso: en este terreno sacamos la peor parte, porque ellos eran mas grandotes que los nuestros... pero no mas hombres. Tuvimos cuatro oportunidades que frustro el arquero aleman, porque los atacantes mexicanos tenian esta vez mas decision. Pero haciamos un "futbol zurdo", abusando del pelotazo largo a la punta izquierda, olvidando que por el lado derecho tambien se podia jugar. Se decia: "lo que pasa es que los alemanes estan administrandose". Yo ignoro, obviamente, lo que piensan los demas, pero, si eso era cierto, ellos habran sabido por que: recuerdo que en el mundial de Argentina nos metieron seis goles contra cero, pero tambien recuerdo que, a partir del mundial de Mexico en 1986, no han podido vencernos ni una sola vez. Puedo sacar una conclusion a los primeros cuarenta y cinco minutos de juego. Simple y sencillamente, fuimos mejores que los alemanes: ­enhorabuena! Pero el partido continua y habra que mantener el ritmo, y aun superarlo, durante los cuarenta y cinco minutos de la segunda mitad. Y el doctor Miguelito vuelve a las andadas: saca a Garcia Aspe, que estaba jugando estupendamente y mete a Galindo. Me pregunto: ¨habra traido su caracter Benjamin o lo dejo otra vez en su casa y saca a David Patino y mando a Miguel Herrera, el "pocas pulgas", que a ultimas fechas se ha controlado ejemplarmente. Por cierto, me olvidaba: la cancha del Azteca estaba digna de la categoria del partido: felicidades, ing. Avina. Pero ­Campos nos salva de un tanto por un ataque a fondo de los alemanes, que ahora cambian su estilo y buscan la victoria. Tambien cambian jugadores... pero algunos muestran irritacion porque las cosas no les salen como ellos esperaban. El plan aleman es claro: enviar balones al frente, elevados y buscar el remate. Y quien conoce el temperamento aleman sabe que una vez hecho un plan, no lo va a cambiar. En cambio, Mexico ha cambiado notoriamente su fisonomia. La linea busca ser la misma, pero les esta saliendo chueca. En todo caso, disfruto a plenitud de un verdadero partido del futbol, cosa que no sucedia hace algun tiempo. Los alemanes no las tienen todas consigo: a estas alturas ya tienen seis amonestaciones, todo un record para los soberbios pero disciplinados teutones. De pronto, a la defensa mexicana le da por comer jaiba. Nos libramos de milagro, pero los alemanes, de plano, han perdido su decoro y tiran patadas, bofetadas, todo con tal de saciar su frustacion. Mexico entra en una etapa de observacion. ¨Hasta cuando? En todo caso, lo de menos es el resultado: lo real es que le hemos puesto los tacos a venticinco de los monarcas mundiales. Conclusion: nuestros hombres son muy hombres... ­y tambien excelentes jugadores! Y creanme, lo de menos fue el resultado final: estaremos en la pelea es son muy hombres... ­y tambien excelentes jugadores! Y .