SECCION INF. GRAL. PAG. 9 BALAZO: DEBATE CABEZA: Reglamentar el derecho a la informacion CREDITO: Enrique Condes Lara La disidencia es consustancial a la democracia. Grave seria que no existieran las opiniones divergentes u opuestas al punto de vista oficial. Las uniformidades han sido siempre manifestacion de intolerancia y totalitarismos. La democracia como sistema de vida y de gobierno se construye todos los dias. En el respeto a las normas de convivencia y a las leyes, en la defensa de derechos, en el debate y libre manifestacion de las ideas, en el reconocimiento de la pluralidad, en el apego al mandato constitucional. Pero, como es de sobra conocido, la renovada vida democratica en que se adentro nuestro pais en anos recientes, ha tropezado con obstaculos y dificultades que reflejan desajustes o rezagos de porciones de la sociedad politica nacional respecto de los avances y aspiraciones de la sociedad civil. Falta aun por recorrer un largo y complicado trecho antes de proclamar el triunfo de una nueva cultura democratica. La complejidad, variedad y velocidad de los acontecimientos oscurece con frecuencia la percepcion de la perspectiva mas general dando lugar a juicios parciales y precipitados que confunden a muchos, aunque por poco tiempo. Y de ello, algunos sacan proyectos. En efecto, la etapa politica e institucional que atraviesa Mexico, explica y permite la existencia de gente que se nutre y beneficia con la confrontacion entre grupos, con los conflictos entre protagonistas, con la ausencia de acuerdos globales que norman cambios y reformas, con los ambientes politicos enrarecidos, con las desconfianzas, dudas y resentimientos, con la persistencia de practicas caducas. Como ayer, cuando publicaciones amarillistas de tipo policiaco y secciones de nota roja impactaban a amplios grupos de la poblacion de inmediato pasado campesino, alimentando sus prejuicios y tambien sus temores frente al ritmo de vida compulsivo y a la vez maravilloso de su nuevo habitat urbano, hoy en dia los columnistas y periodistas que magnifican odios y revanchismos, pleitos y divisiones entre partidos, catastrofes politicas y sociales, que convierten los rumores en verdades, que afirman sin comprobar, que sugieren "fuentes informativas" inexistentes y que su opinion la disfrazan como informacion, tienen un espacio que han sabido muy bien aprovechar. La falta de una reglamentacion moderna en materia informativa los ha hecho intocables: nadie les reclama por sus infundios, cuando los vierten, por temor a ser acusados de "represor"; nadie les pide explicacion alguna por sus falsedades, cuando las hay, por miedo a ser catalogados como parte de una "campana sucia contra la libertad de expresion". No se trata de "maquillar" la realidad: las cosas son como son, no debe ocultarseles pero tampoco distorsionarseles. Las reflexiones, propuestas, analisis criticas -fuertes criticas, si se quiere- e incluso hasta los calificativos, se valen. Lo que es inaceptable es la mentira, la deliberada distorsion de los hechos, y eticamente, la manipulacion perversa de la informacion. En la actualidad, afortunadamente se pueden encontrar en las paginas de los diarios y revistas a brillantes academicos y dirigentes politicos que, con agudeza y conocimiento, desarrollan sus puntos de vista, polemizan, refutan, critican, muchas veces con pasion y dureza -la discusion no tiene por que ser de color rosa- Su contribucion a la construccion de una sociedad abierta esta fuera de toda duda. De ninguna manera se les puede confundir con aquellos que han hecho de las columnas politicas, calumnias politicas. Algunos comentaristas-golpeadores, se han convertido en prototipo de la impunidad. Seguiran envenenando el ambiente en tanto, como en muchas otras cosas que suceden en Mexico, no haya la disposicion para encararlos correctamente. Basta de cobardias. Quien sea difamado que proteste, quien sea calumniado que exija, ante los tribunales, reparacion del dano. Pero sobre todo, es necesario un esfuerzo colectivo para llevar adelante lo que innumerables voces reiteradamente han demandado: reglamentar el derecho a la informacion olectivo para llevar adelante lo que innumerables voces reiterad .