GUIA: 18DEBAT1 SECCION: Informacion General Pag. 10 CINTILLO: DEBATE CABEZA: Para crecer en el debateCREDITO: Alejandro Sanciprian Asumidas las correspondientes reglas de juego, por asi decirle al debate publico de los candidatos a la Presidencia, es pertinente reflexionar a proposito de sus razones intrinsecas y en especial de las certidumbres y(o dudas que esa trascendente estrategia politica propiciara en el alma colectiva de los mexicanos, sobre todo en esas nuevas generaciones que de muchos modos se miran afectadas por la dinamica de los reciclajes economicos, politicos y sociales. Pieza clave del proceso democratico, al debate le corresponde reivindicar la tolerancia, y por la pluralidad ideologica, la factibilidad de promover senales de conciencias criticas. En ese sentido, es preciso creer en el debate en tanto que implica en su genesis un compromiso de los protagonistas con las acciones democraticas. Ademas, conviene estar al pendiente en que uno de los sustanciales propositos de este tipo de debate es dar identidad y fuerza a las ofertas de los candidatos y no propiamente ajustar la mira en eventuales faltas de ortografia que se llegasen a cometer al hacer uso de la palabra. Creer en el debate porque al menos su instrumentacion es indudable sintoma de convivencia democratica. Estar cierto de su validez, se impone porque evidentemente el animo de la llamada sociedad civil para incorporarse y ser tambien protagonista de la transicion democratica es bastante diferente a lo que prevalecia en anos anteriores. En otras palabras, vale la pena creer en el debate no precisamente a partir de las virtudes o debilidades (susceptibles de enmendarse) discursivas de los contendientes, sino de las propuestas programaticas que enarbolan y por anadidura por la contribucion ideologica que el debate mismo habra de patrocinar para enfrentar la fenomenologia de la indefinicion politica de vastos nucleos de potenciales electores. Ahora la competencia politica es formalmente algo natural, una circunstancia aceptada y considerada primordial por cuanto a los elementos de madurez politica inherentes al contexto. De tal manera, el debate como una suerte de estrategia de medios para afectar la tendencia del electorado, adquiere carta de residencia por necesidad historica y por cuanto a su extensivo aporte para justificar el poder, el respeto a la legalidad y la congruencia de las practicas democraticas. El debate representa asi una significativa accion para fundamentar los niveles de cultura politica contemporaneos. Es decir, su sentido tiene mucho que ver con la conveniencia de asestar severos golpes a la abstencion, a la negligencia y abulia que acompanan comunmente a la mayoria de las buenas conciencias que en un alarde de autocomplacencia dicen ya no creer en nada nuevo ni bajo el sol ni bajo el emblema patrio ni mucho menos en la palabra de los representantes politicos. Asi las cosas, el esquema de las campanas politicas vislumbra cambios. Entre ellos, la pertinencia de reforzar el sentido de la participacion ciudadana y sobre todo auspiciar el desarrollo de una conciencia critica que ademas rebase las epocas de comicios. Si bien las razones del debate en primera instancia son analizar las propuestas, la elocuencia y el timing de los candidatos, sus dotes y su desenvolvimiento, lo prudente es estar a la expectativa de los mensajes vitales. De otra forma, Ļa donde llevaremos nuestras esperanzas entonces? udente es estar a la expectativa de los mensajes vitales. De otra forma, Ļa donde llevaremos nuestras esperanzas .