guia: 0812601 seccion: Inf. Gral. pag. 2 cabeza: Erradicar vicios en los centros de readaptacion Los lamentables acontecimientos ocurridos en el Centro de Readaptacion Social (Cereso) de Almoloya de Juarez -vecino de la prision de alta seguridad del mismo lugar, pero desligado de esta-, demuestran una vez mas la urgencia de erradicar practicas nocivas de autogobierno en los centros penitenciarios. El amotinamiento se produjo cuando, despues de trasladar a un grupo de delincuentes comunes al Cereso, estos rivalizaron con otros reclusos que mantenian un control interno del centro. La perdida de vidas en esta batalla campal entre internos hace imperativo adoptar medidas correctivas y acciones que prevengan situaciones semejantes en el futuro. Es preciso que las autoridades penitenciarias restablezcan el orden dentro de este penal y garanticen la integridad f'isica y moral de los reclusos. No se pueden tolerar practicas de hegemonia de unos reos sobre otros, pues esto conduce a una forma viciada de autogobierno que impide su cabal readaptacion. Menos aun deben darse circunstancias en que grupos de reos tengan un control efectivo sobre la administracion interna de las prisiones. Lo sucedido ayer revela tragicamente las consecuencias del relajamiento en la disciplina interna de los penales. En teoria, el autogobierno en los centros para readaptacion social deberia permitir una mejor reintegracion de los presos a la sociedad, pero el exito de este metodo requiere un profundo e intenso trabajo de equipos multidisciplinarios integrados. El autogobierno es posible cuando existen condiciones apropiadas de educacion, preparacion de personal expresamente entrenado para la rehabilitacion social, infraestructura que posibilita la actividad productiva y -sobre todo- cuando las autoridades supervisan responsablemente el proceso. Por desgracia, ha sido frecuente que se den formas viciadas de autogobierno en los centros penitenciarios por una desafortunada combinacion de problemas. Debido a multiples causas, que van desde sobrepoblacion carcelaria hasta impreparacion de funcionarios, evasion de responsabilidades y dificultades para establecer una disciplina en forma sistematica, en muchos centros de readaptacion destinados a los reos de delitos comunes se han tolerado formas viciadas de autogobierno en la organizacion de las actividades productivas, de limpieza y de trabajos internos. Esto hace que la practica de autogobierno sea inadecuada desde su origen. Es decir, se delegan responsabilidades por incapacidad y no por contar con una estructura conveniente para establecer un autogobierno idoneo a las necesidades de los internos. Por otra parte, los reos comunes suelen ser personas con escasa educacion que han vivido en situaciones sociales muy negativas y por ello requieren -para que su readaptacion sea plena- orientacion, apoyo pedagogico o incluso tratamiento psicologico. Por ello es importante mantener un sustrato de condiciones propicias para la reintegracion social dentro de los penales, evitando un autogobierno cuando no hay los requisitos para su implantacion. Existe un compromiso claro de las autoridades de mejorar los esquemas de readaptacion en las carceles y acabar con la sobrepoblacion y con otros vicios. Se esta avanzando en estos propositos, pero los sucesos desafortunados en Almoloya indican que aun queda mucho por hacer, por lo cual hay que redoblar esfuerzos s, pero los sucesos desaf .