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CINTILLO: Negociaciones secretas Washington-Moscu CABEZA: Probable que misiles intercontinentales norteamericanos dejen de apuntar a Rusia
WASHINGTON, 6 de diciembre (DPA, ANSA y EFE).-Estados Unidos estudia la posibilidad de que sus cohetes intercontinentales dejen de estar orientados hacia objetivos en Rusia y apunten hacia mares abiertos, segun informaciones del New York Times, que fueron confirmadas por el presidente Bill Clinton.
Con este paso, mas bien simbolico, se desea al parecer evitar el riesgo de que un cohete atomico sea disparado por error.
El diario informo hoy que actualmente estan teniendo lugar en Washington negociaciones entre representantes del Ministerio de Defensa de Estados Unidos y altos generales rusos. Se dijo que una veintena de nuevos objetivos en todo el mundo y en alta mar han sido escogidos ya por los militares norteamericanos.
Segun el New York Times, el cambio de objetivo para los misiles fue discutido secretamente la semana pasada por los generales Igor Sergevey, comandante de la fuerza misilistica sovietica, y Lee Butler, su colega norteamericano.
Butler, un general de cuatro estrellas que fue uno de los mas estrechos colaboradores del ex jefe del estado mayor Colin Powell, esta ahora a cargo del Comando Estrategico, del cual depende el arsenal nuclear de Estados Unidos.
Sergevey habia sido invitado por Butler a Omaha, Nebraska, donde esta la sede del comando, para examinar medidas que reduzcan el riesgo de un duelo atomico accidental. La reaccion de los rusos, segun cuanto declaro un alto oficial al New York Times, "no fue tal como para desalentar la iniciativa".
"Si un misil -explico un experto- partiera por error, terminaria en el Artico o en el norte del Atlantico, y entonces solo deberemos preocuparnos por las ballenas", agrego el experto.
Segun fuentes gubernamentales, el presidente Bill Clinton podria anunciar con enfasis que los misiles norteamericanos no estaran mas apuntados contra Rusia, cuando en enero proximo se entreviste con Boris Yeltsin, en Moscu, o en ocasion de cualquier otra cita internacional.
Habia sido justamente Yeltsin el primero que prometio, en enero de 1992, que los rusos no tendrian como objetivo las ciudades norteamericanos. En realidad, segun los expertos norteamericanos de entonces, no ha cambiado nunca: los misiles rusos estaban, y estan, apuntados no sobre las ciudades sino sobre las bases militares norteamericanas
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