GUIA: 4PORNO3 SECCION: Espectaculos Pag. 8 CINTILLO: GARGANTA PROFUNDA CABEZA: El poder de las convenciones eroticas SUMARIO: La porno es, ante todo, imagen y lenguaje corporal, por lo que el punto mas alto de su critica se da en el video y el cine porno CREDITO:Naief Yehya No es raro escuchar a la gente comentar que el problema de la porno no es tanto su obscenidad, sino su absoluta falta de contenido. Para muchos, la porno se reduce a la descontextualizacion de las partes del cuerpo, al anonimato genital. Esa ha sido una de las criticas conservadoras mas recurridas: la porno es irredimible porque no tiene valores, porque carece de ideas y solo proyecta al hombre en actos bestiales que lo reducen a un estado primitivo. En un articulo publicado en el Journal of Popular Culture, William E. Brigman cita al profesor Frederick Schauer, quien capturo la logica basica de la critica contra la porno que le niega todo valor en el terreno de las ideas: "... El rechazo a tratar a la porno como discurso esta fundado en la consideracion de que el prototipo del elemento pornografico en un analisis detenido comparte mas caracteristicas con las actividades sexuales que con el proceso comunicativo. El elemento pornografico es en sentido real un sustituto sexual. "... El uso de la porno puede ser interpretado conceptualmente como una experiencia puramente fisica y no mental". Tal juicio no solo es limitado sino que de entrada falsea la verdad. Es imposible aislar la experiencia porno de toda implicacion mental. El hombre, a diferencia de los animales, emplea su imaginacion en sus actos sexuales. ¨Como entender la atraccion sexual y la discriminacion que hace cualquier sujeto ante ciertas opciones si no es aceptado que existe un lado intelectual, aun en los actos sexuales mas brutales? A pesar del poder innegable de las feromonas en la conducta sexual humana, no podemos ignorar el poder de las convenciones eroticas, alimentadas por los media y asimiladas por la gente en casi todo el planeta. Porno como rebelion A contracorriente de la tesis que niega todo valor cultural o cualquier contenido de ideas a la porno, Lawrence W. Rosenfield ha desarrollado una teoria en la que afirma que la porno es la literatura y el medio de expresion de los marginales, de los que carecen de poder. "La pornografia no esta destinada a los violadores potenciales sino a aquellos que son victimizados por diversas fuerzas sociales y que estan ocupando las `posturas' politicas con las que enfrentan a esas fuerzas". No hay que olvidar que el concepto mismo de la pornografia se refiere a los escritos (graphos) sobre prostitutas (pornei), una clase desprovista de poder, pero indispensable y omnipresente en todas (o casi) las culturas y civilizaciones. La puta es el simbolo del marginal por excelencia, de la persona empujada al ultimo rincon social, una figura estigmatizada por el uso de su cuerpo como mercancia y como medio de supervivencia. No por nada en la cultura romantica la prostituta y el poeta habitan en el mismo espacio de irredencion y desasosiego. La ramera vive en la miseria de los callejones oscuros, en la podredumbre de la urbe (ya sea de la ciudad de Mexico, de Bombay o el Londres del siglo XIII) y a la vez en las alcobas mas diversas, en las intrigas parlamentarias y en los escandalos de la nobleza. Esa extrana movilidad social le da una caracteristica unica: la de poder asistir y ver a la sociedad en corte transversal y desnuda (en sentido real y metaforico) de sus atributos. La porno ha servido a traves de la historia (desde los grabados eroticos y caricaturescos en donde se ridiculizaba la imagen del rey y de las personalidades de la corte que circulaban en Francia antes de la revolucion hasta publicaciones como Hustler o Screw) como un medio de venganza y consolacion para los desposeidos por su situacion de impotencia politica y social.