PAG. 31 SECCION: DEPORTES CABEZA: Procuna y Mantle: heroes de nuestra mitologia CREDITO: Juan Jose Reyes* Con diferencia de unos dias, han muerto dos grandes figuras de la mitologia popular de nuestro tiempo. Se dira que poco tienen que ver entre si Luis Procuna (1923-1995) y Mickey Mantle (1931-1995) y tal aserto seguramente es valido, a condicion, solo, de que se olvide que sus actuaciones publicas, sus hazanas respectivas, entusiasmaron durante los mismos momentos al publico mexicano, y al de otros lares. Luis Procuna fue directamente nuestro; la gloria de Mickey Mantle nos llego sobre todo mediante los diar ios y la radio, y al ultimo la television. Importan menos las diferencias que el dato comun: ambos fueron distintos, verdaderos personajes de la real mitologia de este siglo XX. Ambos, por lo demas, se enfrentaron con entereza a diferentes y comunes desafios. I. Hace casi cincuenta anos partia plaza junto a Manolete -la gran figura espanola- y un maestro mexicano: Luis Castro El Soldado, en la primera corrida de la gran Mexico. Era el 5 de febrero de 1946, y seis poderosos ejemplares de San Mateo estaban listos para pelear con los diestros. Manuel Rodriguez corto la primera oreja. Luis Procuna obtendria la segunda; seria el primer matador mexicano en obtener apendices en el gran coso. Habia comenzado ya su leyenda. El Berrendito de San Juan -como se le llamo aludiendo al barrio donde nacio y al mechon blanco que ilumino su frente- fue desde el comienzo un diestro seductor, un torero magnetico. Uno de esos casos mas o menos raros que a fin de cuentas no dejan de animar la leyenda que brota entre los pitones de los bureles. Fue, como muchos, un diestro irregular, con lo que quiero decir que el neovillamelonaje de hoy no lo habria comprendido minimamente siquiera. Por ejemplo, Luis Procuna gustaba de torear por alto, con donosura, con nerviosa sonrisa, con hombria. No se enfrentaba a las reses del gusto de los matadores actuales y de los expertos que llenan las barreras y los tendidos. Toreaba por alto Procuna, aguantando mucho, todo el tiempo. Y toreaba desde luego con la mano abajo, por la derecha y por la izquierda. No muy d espacio. Las reses no ayudaban -por su fiereza-, y ademas Procuna era un torero de trazo nervioso. De mas imaginacion que poder; de mas valor que sensibilidad; y, a la vez, de mas intensidad que pintureria. Se le hizo fama a Procuna de "valiente-cobarde". Lo cierto es que fue un torero de veras. Nunca hizo trampa cuando se enfrento a una res: toreo con cadencia con el capote, con buen aguante con la muleta. Algunas veces salio despavorido ante la fiera; lo impulsaba el miedo, mas poderoso a veces que el valor. Un pavor real ante el peligro cierto de la muerte, que puede equivaler a la zozobra del artista ante el lienzo vacio o la pagina en blanco. Luis Procuna supo siempre lo que sucedia en el ruedo, frente al burel. Nunca hizo trampas, y nunca oculto su temor. No fue un torero fino, es lo cierto. No llego a la profundidad de Silverio, tambien es cierto. No tuvo el senorio de Lorenzo Garza ni la maestria de Fermin Espinosa. Fue un torero de corazon, de corazon abierto. Alguna vez estelarizo una pelicula (con Sofia Alvarez y Jose Baviera) bien llamada Un corazon en el ruedo. Quien mejor lo vio en esta danza dramatica fue Carlos Velo, autor del filme Torero, que resume bien el drama del taurocidio: la confusion del valor y el pavor de un hombre que acabaria por sentirse liberado en la mejor de sus tard es. La de su despedida, en 1974, hace poco mas de veintiun anos. II. En la temporada de 1951, Joe DiMaggio conecta 12 jonrones y empuja 71 carreras. Es su ultima campana; despues de Babe Ruth y de Lou Gehrig, ha sido sin duda el mas grande jugador del equipo emblematico del beisbol: 361 jonrones, 1537 carreras producidas, 56 juegos consecutivos dando por lo menos un hit. Quienes lo vieron dicen que nadie ha tenido su elegancia, su categoria... Aquel 1951 debuta en el equipo del gran DiMaggio, en los Yanquis de Nueva York, el joven Mickey Mantle, nacido en Oklahoma veinte anos antes. En aquella temporada conecta sus primeros 13 jonrones e impulsa sus primeras 65 carreras. Habra de ocupar el jardin central, el campo del reino de DiMaggio; habria de ser el nuevo simbolo del gran equipo, hasta 1968. Mantle tiene un principio no muy espectacular, pero de seguro progreso. En 1955 se convierte en una gran estrella: gana el titulo de jonrones y el de car reras empujadas. Su gran ano sera el 61: 54 cuadrangulares y 126 impulsadas. Al retirarse, en 1968, habra superado facilmente a DiMaggio en cuanto a jonrones: alcanzo 536 (solo 7 jugadores han conectado mas que el). Tiene varias marcas, como la de mas cuadrangulares en series mundiales (18), y la de mas ponches en estos juegos (54). En su tiempo solo hubo uno tan grande como el, otro mito, afortunadamente vivo: el gigante Willie Mays. (*) Critico literario y periodista. .