SECCION CULTURA PAGINA 34 BALAZO: CONTRA EL OLVIDO, DE MARIO BENEDETTI CABEZA: Poesia que no se resigna a recluirse en catacumbas CREDITO: MIGUEL GARCIA-POSADA Por una suerte de significativa coincidencia, este libro de versos de Mario Benedetti ha aparecido a la vez que afloraban en Argentina nuevos testimonios, esta vez oficiales, sobre las atrocidades de la infausta junta militar. Tales revelaciones han vuelto a poner en tela de juicio las actuaciones de diferente signo, encaminadas al perdon y a la exculpacion, que se produjeron en todo el Cono Sur al termino de las dictaduras que la region padecio en las dos decadas anteriores. Significativa y no sorprendent e coindicencia en la medida en que una zona sustancial de la obra de Benedetti se ha nutrido de la amarga materia de la cruel represion ejercida por esos regimenes policiales contra los defensores de la soberania popular y los derechos humanos. Fiel al impulso moral y civil que alienta en el centro mismo de su poesia, Benedetti habia ya tocado el tema de la preservacion de la memoria y la lucha contra la amnesia colectiva. Valga, por ejemplo, el esplendido poema De olvido siempre gris, de su libro anterior Las soledades de Babel: "Los cautos vencedores / no moriran de contricion precoz; / a medianoche marcan y celebran / el palmo conquistado a la memoria..." Pues bien, tal es la linea tematica mas subrayada, ya desde el mismo titulo, de este poemario abundante (92 composiciones) y variado, como todos los de Benedetti. El texto, que invoca, entre otros, a Borges ("el olvido / es una de las formas de la memoria"), despliega y desarrolla esta idea central, que es tambien una paradoja -y, como tal, verbalmente rentable-, en la primera parte del libro, para volver incidentalmente sobre ella en el resto y retomarla en el poema final, Vuelta al primer olvido. En el proposito del autor se trata de mas que de un planteamiento politico, aunque tambien lo sea. Pero lo que esta en cuestion aqui es, sobre todo, una actitud o, si se quiere, una moral basada en los grandes principios de la dignidad y la libertad del hombre, que desemboca en la postulacion de la solidaridad, en la propuesta de compartir, desde una conciencia recobrada -esto es, iluminada por las experiencias de la vida y de la historia- , "los suenos / del projimo mas proximo y mas nino", segun canta el poema final. Pues si el olvido es un acto voluntario ("no olvidadizos sino olvidadores" se llama a los "verdugos / de pacotilla y pesadilla"), la restauracion de la memoria lo es tambien y se convierte en fuente de una etica civil. De una etica y de una poetica. En esta direccion surgen algunos poemas impresionantes, como Olvidadores y Se habia olvidado o, de modo mas oblicuo pero igualmente persuasivo, el Retrato de verdugo con loro, intensisima cancion donde el ave parlante se convier te en portavoz de las victimas. Esta linea tematica no excluye la comparecencia de otras. Con ella enlaza la linea critica y social, otra cara de la misma moneda. Benedetti sigue siendo leal a una de las grandes tradiciones poeticas del siglo, que al cabo de los anos, pese a haberse intentado su proscripcion, por anacronica, percute cada vez con mas fuerza sobre nuestra actual poesia. Llamo la atencion en especial sobre Conservadores, Tributo (dedicado a la memoria de Yoyes, la ex etarra asesinada por la banda armada ETA) y Quien sabe. Al ambito tematico del amor, de la pasion vital, de los paisajes, de la consideracion de poesia y poetas se adscriben muchos otros poemas, donde Benedetti destila connstantemente su poesia penetrante, fluida, desembarazada, cuya aparente facilidad es enganosa, pues el coloquialismo no excluye la elaboracion verbal; antes al contrario, le sirve de vehiculo. Facilidad y variedad. Asi en la metrica: al verso blanco y al verso libre, que son dominantes, hay que agregar varios sonetos, el uso del serventesio en algun poema de arte mayor y un punado de canciones en estrofas y metros diversos (no se excluye la seguidilla) donde el autor revalida su conocida maestria en el genero e insiste en el cultivo de unas formas neotradicionales cuya preservacion resulta indispensable para la poesia que no se resigna a recluirse en las catacumbas. Hay que senalar tambien las tonallidades humoristicas, a veces amargas cuando no grotescas, que se resuelven en ocasiones en felices juegos verbales (vease La misma pocima). Son los recursos de un poeta capaz de comunicar siempre con el lector. Este poder de comunicacion es abrumador, indiscutible. Mario Benedetti sabe explicarse y explicarnos. Por eso es un poeta con lectores. (Especial de El Pais para El Nacional) .