SECCION ECONOMIA PAG. 20 CABEZA: Barzon contra banqueros II CREDITO: MARIANO FERNANDEZ* Poco despues de que se alcanzara la parte mas dura de la crisis financiera (marzo), cuando las tasas de interes rebasaron el 100 por ciento, el tipo de cambio toco los ocho pesos por dolar y el mas optimista pensaba en el destierro, parte del sector financiero llego a un acuerdo: moderar su actividad y evitar movimientos especulativos, en espera de que la tempestad pasara y volvieranlas aguas a su nivel. El resultado fue extraordinario, el incremento en las tasas de interes se detuvo y el peso se aprecio. En ese entonces daba la impresion de que el pais se desmoronaba y que nada impediria volver a 1982: inflaciones rampantes, devaluaciones endemicas (que parece ser que en el largo plazo lo son) y desorden financiero. No solo el programa de ajuste del gobierno mexicano, el acuerdo con el Tesoro norteamericano y el apoyo del Ejecutivo de ese pais, vinieron a ponerle freno a lo mas crudo de la crisis financiera. Los participantes del mercado financiero, en un acto de responsabilidad gremial, procuraron calmar l os animos, dar un voto de confianza al programa y, sobre todo, evitar una crisis que los podria llevar a la ruina, ademas acordaron actuar con madurez y calma. Los resultados ya estan a la vista y vale repetirlo: la crisis "financiera" fue superada, la emergencia de liquidez quedo conjugada. Hoy lo que tenemos en los titulares noticiosos es el efecto en el sector real: en la produccion, en el empleo, en los precios de los bienes y servicios que consumimos... Hay una expresion muy bonita que se utiliza en la alquimia... perdon quise decir en la economia: ingreso personal disponible real, que indica lo que nos queda a cada uno despues de pagar impuestos y descontar el efecto de la inflacion, es decir, la capacidad de compra real del ingreso que traemos en las bolsas. Donde actuan el cinco por cie nto adicional del IVA y el 36 por ciento de inflacion. Esa es la crisis de hoy, menos sonora, mas profunda y destructiva; menos rimbombante, mas dificil de superar. Especialmente bajo la orientacion del ajuste de emergencia, que en suma obliga a deprimir la demanda real, contrayendo el gasto real del gobierno y el consumo real de la poblacion. Con un efecto tipico: elevar las tasas reales de interes. Si hoy se anuncia en marquesinas de neon la disminucion de la tasa de interes desde los cientos por ciento hasta los 30, en la letra menuda se advierte: la tasa real crece a mas de 20 por ciento anual. Este es el drama de los deudores y, por ende, de los banqueros. Si el deudor no paga, el negocio del banco se arruina y el ahorrador se queda chiflando en la loma. Aquel ahorrador heroico del ahorro interno. Se han disenado varios esquemas que en general buscan soluciones mas bien temporales, disminuir los pagos de intereses en el corto plazo, pasando la factura para los proximos anos, ya sea que se pague solo la parte real o una porcion nominal, integrandose el resto en el capital. Hubo errores: los deudores sobrestimaron sus ingresos y tomaron deuda en exceso, en tal magnitud que muchos poseedores de hipotecas no han adquirido un bien inmueble, sino que han empenado los ingresos de casi toda su vida productiva (considerese para mayor dramatizacion la terrible contraccion del empleo y la educacion). Los bancos sobrestimaron sus flujos de efectivo y expandieron su credito en exceso y tambien se sobre-endeudaron, a tal grado que solo una accion internacional sin precedentes los salvo. Pero que tienen los bancos en particular que los hace objeto de tanta atencion y fundamental preocupacion de la politica economica? Fuera del absurdo estereotipo del banquero de bombin de seda y pelo de nutria, la funcion bancaria radica en hacer eficiente el movimiento de recursos en toda la amplitud de la actividad productiva, son finalmente negocios y empresas empleadoras de trabajadores, con riesgos de quiebra y quebrantos. Pero aqui hablamos de la actividad bancaria, no de los banqueros, la actividad bancaria es indispensable para la economia, no se trata de cubrir ineficiencias administrativas a costa del sacrificifo de muchos. Creo que en esta situacion vamos a requerir de una voluntad semejante a la que se presento a principios de ano, un acuerdo mutuo por un bien comun, aceptando las carencias del otro y las posibilidades reales de coincidencia. Una opcion puede ser que las tasas reales de interes excesivamente altas y la capitalizacion de intereses del primer trimestre deben ser negociadas. Alguien habra de aceptar perdidas y otros esforzarse en cubrir obligaciones... Que tal verian la tasa Nafin como referencia de los credit os viables bajo esta opcion? El gobierno no puede mantener una actitud pasiva; el mercado, amigos neoliberales, raramente es eficiente en situaciones como la recientemente vivida y la accion gubernamental es necesaria en el desarrollo, al menos aceptable, de la economia. Quiza el proximo informe de gobierno sea el foro adecuado para convocar a un acuerdo de voluntades que renueve la experiencia de la busqueda del bien comun como un valor nacional, capaz de sobreponerse a esta muy dolorosa crisis. .