PAG. 4 SECCION: INF. GRAL. CABEZA: Los dilemas de la politica y los debates del feminismo ENTRETEXTO: Tenemos que asumir la responsabilidad y el compromiso social de la negociacion, las alianzas y los pactos, mal que nos pese CREDITO: ANNA M. FERNANDEZ PONCELA* (Primera de dos partes) "Renovarse o morir" dice un viejo y sabio refran. "Piensa que algo queda" dice otro. Y tal como estan los tiempos y soplan los vientos, nunca fueron tan ciertos los dichos populares. Ni la politica en su version de democracia parlamentaria y representativa, ni cierto feminismo en su lucha a favor de la igualdad de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres, parecen estar en su mejor momento. Espacios inhospitos, estudios ingratos Hay temas de investigacion que pueden llegar a ser ingratos, uno de ellos ha sido el de la participacion femenina en la politica formal _aquella que se desarrolla en el marco de la instituciones politicas como los partidos politicos y los poderes del Estado_. Para los mas lejanos a la polemica les dire que desde cierto feminismo se ve como poco menos que traicion y desde la politica como una especie de usurpacion o intromision. Los movimientos sociales y las organizaciones populares, donde las mujeres participan politicamente de forma mayoritaria en nuestro continente, ha sido y es el nucleo duro de estudio de la politica para ciertas especialistas en relaciones de genero, en mujeres o en feminismo; lo que esta fuera de ese circulo fundamental, pero tambien ya ampliamente estudiado, es diabolico: pasarse a las filas del enemigo. La politica formal androcentrica desde su mas profunda concepcion y masculinizante en su practica cotidiana, tampoco ve con buenos ojos la intromision de las mujeres ni de las estudiosas del tema, quizas ya carecen de argumentos creibles al final del segundo milenio, pero eso no significa que ciertos resquemores y un atisbo de competencia brille en sus miradas y documentos. Es como si hubiera una alianza macabra entre ambos espacios, incompatibles a fuerza de pensarlo, decirlo y creerlo, un acuerdo entre opuestos por el hecho de serlo. El reto femenino y la apuesta politica Sin embargo, nos encontramos en una encrucijada y creo que ha llegado la hora de decir basta y echar a andar. En unos tiempos en que la democracia tradicional parece semicolapsada y en que el feminismo mas radical no tiene propuestas creibles y eficaces. Hemos dejado de ser jovenes rebeldes y tenemos que asumir la responsabilidad y el compromiso social de la negociacion, las alianzas y los pactos, mal que nos pese, y esto va por los partidos, el Estado y por las mujeres y grupos de mujeres tambien. No solo por tratarse de una cuestion etica, sino por pura logica racional de intereses mutuos, nada mas y nada menos. Afortunadamente a ambas margenes del oceano que parece separar a las mujeres de la politica, se estan realizando obras de infraestructura y servicios: puertos y hasta puentes de dialogo. Y sectores inteligentes y modernizantes estan repensando la politica y redefiniendo la participacion de las mujeres en su seno, ya sea principio etico o interes practico, y es que a veces distintos caminos llegan al mismo sitio. La democracia agotada y en un callejon sin salida Alain Touraine, el sociologo frances especialista en America Latina afirma que la democracia tiene un futuro tragico, y que el dilema es renovarse o morir. Mientras la lectura del filosofo aleman Heidegger nos recuerda que la fuerza del pensamiento radica en lo no pensado, por lo que hay que realizar un esfuerzo en pensar lo inedito. Por si fuera poco la fragilidad de las democracias en nuestro continente y su degradacion formal y moral, desde una E uropa donde se consideraba al parlamentarismo como asentado y responsable, llegan ecos de grandes escandalos politicos y financieros que superan toda sospecha mantenida hasta la fecha. Por otro lado, hay un gran desencanto politico y social por parte de los ciudadanos y ciudadanas, que dia a dia parecen desconfiar y desmarcarse mas de una elite politica profesional que ha decepcionado sus expectativas e inquietudes, y que para nada representa sus necesidades e intereses. Esta distancia va desde el desencant o politico hasta la mas cruda desesperanza social al sumarse el primero a la crisis economica reflejada en el nivel y calidad de vida de las personas y colectivos sociales. Es por ello que se hace urgente renovar el sistema democratico de partidos, una de cuyas vias seria con la integracion de las mujeres, pero no desde una postura de asimilacion sino desde la intencion de la introduccion en cuanto a formas de lenguaje, estilos de trabajo, flexibilidad de horarios, y lo que es mas importante, la introducc ion de los temas de las mujeres como temas de la sociedad en su conjunto y de la agencia politica del pais. *Periodista. .