SECCION CULTURA PAG. 35 BALAZO: EL SON JAROCHO CABEZA: La celebracion ritual de la alegria CREDITO: JUAN CERVERA La sabrosura del son jarocho no tiene igual. Escuchandolo, cantandolo y bailandolo, el drama inevitable de la vida pasa a ser una fiesta. Dado que desde que el ser humano habita en este planeta la vida ha tenido y tiene demasiada carga de penas y sacrificios, el aspirar a la alegria es algo a lo que jamas deberiamos renunciar; no obstante las crueldades del realismo cotidiano. En Veracruz, cantando y bailando sones, el pueblo se olvida de las carencias y derrocha su alma y su carne en la abundancia que emana de su musica, con sensualidad preciosa y gentileza notable. No hay mas que escuchar a la gente cantar Maria Chuchena e imaginar a Maria banandose paradisiacamente desnuda en las claras aguas del rio, coronada de versos tan lindos como estos: "Por aqui paso volando/ una bella chuparrosa/ una bella chuparrosa/ por aqui paso volando,/ y en su piquito llevaba/ tres claveles y una rosa/ que el viento le deshojaba/ como blanca mariposa". Filigrana de verso en luz de son, y es que el son, que es celebracion ritual de la alegria, es una fiesta: "Bailen, bailen, palomitas,/ y no dejen de bailar,/ aunque este el palomo triste/ bailando se va a alegrar". Asi es: bailando se alegran los corazones. El son es danza y la danza es regocijo. La picardia del son es parte de su alegria. La verdadd es demasiado tragica como para ir diciendola por ahi a todo el mundo. El jarocho de alma clasica se pirra por el son y prefiere ir cantando por la vida que, finalmente, a todos se nos acaba sin remedio. Es por eso que el son, hecho decima, nos comunica: "La poesia de la vida/ rompe el molde de los versos./ Por los caminos dispersos/ emprendemos la partida,/ confiando nuestra venida/ a las manos del Creador./ El hombre trabajador/ hace del trabajo un canto,/ destierra dolor y llanto/ forjando un himno de amor". Verdad de son jarocho nunca mejor dicho que en la citada decima del gran poeta popular Guillermo Chazaro Lagos, que lo resume todo magicamente, al igual que el aire del son. Ese son que canta a Balaju, al toro sacamandu, a la petenera y se hace, una vez y otra jolgorioso y nino cascabel: "Bonito tu cascabel,/ vida mia, quien te lo dio?/, vida mia, quien te lo dio?/ Bonito tu cascabel... A mi no me lo dio nadie. Upa!/ A mi no me lo dio nadie,/ mi dinero me costo/ y quien quiera un cascabel/ que lo compre como yo". La fiesta del son tiene sus trasfondos y mensajes, pero sin duda, lo que cuenta es la fiesta, porque la vida sin fiesta no es vida. Es por eso que, como canta Chazaro Lagos por boca del son, "el hombre trabajador/ hace del trabajo un canto, destierra dolor y llanto" y hace de la vida una fiesta, porque un himno de amor es una gran fiesta y, el son, es un himno de amor, el son jarocho, que no tiene igual, en su hondura y sabrosura en flor de alas. (Notimex) .