PAG. 28 SECCION: DEPORTES CABEZA: FERNANDO MARCOS COMENTA Pensemos que el capitulo Mejia Baron y asociados esta cerrado. No busquemos errores en el director tecnico ya que cuando los cometio no quisimos verlos. Es decir, hubo mucha gente que no quiso a pesar de que era evidente para toda persona que viera el futbol como un arte o una ciencia y no simplemente como un corretear detras de una pelota. La reaccion popular calo la resistencia de los dirigentes, los forzo a lo que tenian obligacion de hacer, es decir, servir al publico como en politica se tiene que servir al pueblo. No concibo gobierno sin pueblo y dirigente sin aficionados. Pero tampoco nos basemos en la falsa teoria "en que la voz del pueblo es la voz de Dios", de hecho, el futbol representa sentimientos mas que pensamientos, emociones mas que actitudes. Por lo tanto, consideremos que el capitulo Mejia Baron es un capitulo cerrado. Los aficionados que presionamos para una modificacion en el mando una vez conseguido nuestro proposito debemos senalar que llego el momento del borron y cuenta nueva. Por lo tanto, nada contra Mejia Baron, todo para el reemplazo. Tenemos poco tiempo para construir un equipo nacional por lo menos al nivel tecnico y combativo que tuvo cuando Cesar Luis Menotti. De ahi para adelante y el tiempo apremia. A lo largo de la historia hemos consumado muchos errores que nos han costado sendas eliminaciones a nivel centroamericano, lo que significa la caida mas oprobiosa puesto que nuestro nivel es y debe ser superior al de esta region del mundo. Bastaria hacer una simple cuenta: la poblacion de Mexico rebasa con mucho a la total poblacion de centroamerica y por lo tanto estamos obligados a realizar obras proporcionales a nuestra fuerza. Recuerdo, que por errar e insistir en el error cuando se nombro a Javier de la Torre, cinco veces campeon con el Guadalajara, se penso haber hecho una resolucion correcta. El resultado de nuestro error fue nuestra eliminacion en Haiti. Y es que debemos darnos cuenta que hay una gran diferencia entre conducir un equipo de club y armar una seleccion. El equipo de club tiene los jugadores que necesita y no puede echar mano mas que de ellos. En cambio, el seleccionador nacional dispone de todos los jugadores mexicanos y en esa situacion el error puede ser mas frecuente. Con el nombramiento de Jose Antonio Roca tuvimos buen manejador de equipos de club, pero de ninguna manera un hombre capaz de trascender los limites locales para entrar a una competencia mundialista. El resultado de ese error fue la eliminacion penosa y humillante en el Mundial de Argentina. Raul Cardenas tuvo exito en el mundial del 70 y la razon fue sencilla: tomo al equipo en el punto y hora en que lo habia dejado Nacho Trelles, quien fue cesado despues de una apasionante y hermosa gira por Europa. El resultado fue que cuando volvieron a nombrar a Raul Cardenas, mi viejo amigo, fuimos eliminados en Honduras. Cuando se nombro a Miguel Mejia Baron di mi punto de vista favorable a dicho nombramiento; pero en cuanto lo vi manejar al equipo en la Copa America empece a pedir, casi a gritos, su remocion. Los resultados fueron enganosos, aunque en realidad pudimos ser campeones a pesar de que hubo circunstancias favorables que influyeron en llegar a la final con solo dos partidos ganados. En la final contra Argentina quedo claro que un error de un hombre que no entiende de tacticas nos iba a costar: de todos los goles que nos hicieron en ese torneo siete fueron causados por la desastrosa decision de usar a Ramon Ramirez en un puesto que no era el suyo. Clame y nadie oyo, insisti y nadie atendio las r azones que se daban y ahora mismo todavia hay personas que creen que el cese de Mejia Baron es injusto a pesar de que se trata solamente de un acto de salud colectiva de nuestro deporte. Dicen que no hay quinto malo y ahora voy a dar mi quinta opinion en materia de entrenador nacional. Vaticine cuatro veces resultados fatales y eso se obtuvo. No quiero vaticinar la quinta ocasion. Por lo tanto, senores dirigentes, piensen antes de obrar y no tendran que lamentar un quinto desastre por no haber acertado en la eleccion del general en jefe del equipo mexicano. Piensenlo bien, con el cerebro, no con la cartera y obtendran, si asi lo hacen, cartera llena y un equipo triunfador. Con nada menos me conformo siguiendo la opinion de la masa del publico que quiere ya, pero ya, victorias o derrotas pero no debidas a errores o a malas referencias. Nos faltan poco menos de dos anos para tener un equipo nacional nuevo, competente y triunfador. De ustedes senores dirigentes depende ahora. .