SEC. INF. GRAL. PAG. 10 CABEZA: Aproximaciones al 21 de agosto (III y ultima parte) CREDITO: GUSTAVO HIRALES M. Del lunes 22 al sabado 27 de agosto se dio en Mexico un fenomeno muy raro, probablemente unico en la historia de las luchas electorales. El sector de la intelectualidad y de la opinion publica que habia cifrado sus esperanzas de poder, representacion y tambien, hay que decirlo, de avances democraticos en el triunfo cardenista, paso del pasmo a la indignacion, pero no tanto contra el PRI o el gobierno, sino contra los electores. Se dio entonces la segunda insurreccion de este ano, pero ahora no fue en Chiapa s, sino en los periodicos del DF: la revuelta contra los votos. Tomemos por ejemplo La Jornada del viernes 26 de agosto. Aparecen articulos de Paulina Fernandez, Pablo Gomez, Luis Javier Garrido, Demetrio Sodi y Luis Hernandez Navarro, entre otros. Sobra decir que todos ellos le echan la culpa a un fraude (del cual ninguno aporta datos) para justificar tanto la derrota del maximalismo populista, como el propio error de calculo electoral. Dice Paulina Fernandez: "tres tipos de personas fueron los probables ciudadanos que votaron por el PRI: los priistas mas cercanos al c andidato presidecial, o que aspiran a serlo; los nuevos priistas surgidos de la crisis y que viven en y de situaciones irregulares, y las viejas bases priistas, que aunque ya no quieren serlo fueron presionadas por el patron, charro, cacique o empleador, y obligadas por estatutos, carencias y necesidades". O sea, los unicos que votaron por Zedillo fueron personas interesadas o personas desamparadas. Pero, 牢uantos podrian ser por ejemplo los priistas "cercanos al candidato presidencial?" 每ien, mil, dos mil gentes? 每uantos los "nuevos priistas" que viven en y de situaciones irregulares? 沃n millon, dos millones? 沆 cuantos los que conforman "las viejas bases priistas que ya no quieren serlo", pero que fueron coaccionadas? 每uatro millones, cinco? 沒e puede obligar a votar en un determinado sentido a quien ya no quiere hacerlo, en el marco de las elecciones mas libres, secretas y vigiladas de la historia reciente de Mexico? Pero vamos a suponer que lo que supone a su vez dona Paulina es cierto, que un numero importante, muy importante de mexicanos, votaron obligados por el interes y la coercion economica o politica. 每uantos le gustan? 沒iete millones de mexicanos sufragaron el voto de la humillacion? Sea; pero, 肘 los otros 10 millones de votos, de donde salieron? Pues no hay que olvidar que Ernesto Zedillo gano con la nada despreciable suma de mas de 17 millones de votos, la inmensa mayoria de los cuales fueron sufragados y contados en condiciones urbanas, de vigilancia y competencia. Los que se apresuran a hacer evaluaciones sociologicas light del voto ciudadano del 21 de agosto luego olvidan ciertos detallitos, por ejemplo, que Zedillo gano clara y contundentemente en los estados nortenos, los mas urbanos y comunicados, los de mas alta escolaridad, los de mejor nivel de vida, y que ademas gano en las tres entidades que gobierna Accion Nacional, 牢omo explicarnos esto sin que se nos caiga encima la utopia democratica? Dice el recien converso a la democracia Sodi de la Tijera, que el 21 de agosto no gano el PRI, "gano la desinformacion, la propaganda, el despilfarro de recursos, ganaron las viejas estructuras priistas, gano la presion, el miedo, gano el dinero de las empresas, gano el aparato gubernamental contra la voluntad libre e informada de los ciudadanos". O sea, en Mexico hay votos de cantidad y votos de calidad, eso es muy claro; no es igual ni puede valer igual el voto que se emite en San Angel, que aquel que a d uras penas es sufragado en Chalco, 肖erdad? Lo que Sodi y congeneres insinuan, pero no se atreven a decir, es que hay que instaurar el voto censatario que los toris ingleses defendieron con exito por tanto tiempo: que solo voten los propietarios, pues en realidad solo los que habitan los barrios popis de las ciudades, los que leen La Jornada, Proceso y El Financiero, los que tienen casa para albergar a 100 comensales, son los unicos informados y conscientes de este pais. Los cabecillas de esta revuelta contra el voto popular piensan que escriben a nombre de la democracia, en defensa de los mejores intereses del, asi llamado, "movimiento democratico". No perciben, por ignorancia o soberbia intelectual, cuan poco democraticos son sus juicios, que tan impregnados estan de prejuicios racistas y clasistas, y cuanto desprecio se anida en ellos contra el pueblo cuando este, inculto como es, no valida sus preconstruidos escenarios. Como dice con razon Roberto Blancarte, detras del desprecio hacia el voto "equivocado" de las masas, lo que asoma es el desprecio de muchos de esos intelectuales y miembros de partidos de oposicion, a la democracia electoral a secas. En el fondo solo aceptan la idea de "un hombre un voto" cuando ese voto se emite en el sentido de sus preferencias. Si no, es un voto invalido, ilegitimo. En su delirio, algunos han hablado hasta del fraude sicologico, que consistio en hacer creer a los ciudadanos, falsamente, que si ganaba Cardenas o Diego, sobrevendrian incontables desgracias a los mexicanos. Y hasta Carlos Castillo Peraza se burla de esa invencion de la pueril imagineria intelectual segun la cual hay un cerebro maligno y todopoderoso que, a traves de un plan cuidadoso, diabolicamente disenado, logro materializar el fraude mas grande de todos los tiempos que es, a su vez, practicamente invi sible. Y todas estas tonterias y asaltos a la inteligencia se dicen con la solemnidad y el empaque tipico de una parte emblematica de la clase intelectual mexicana. Lo que los perredistas y sus aliados, por ejemplo de Alianza Civica, no entienden ni parecen querer entender, precisamente por su falta de autocritica, es que si el voto popular mando a Cardenas a un lejano tercer lugar, eso tampoco fue casual: habia que colocar al partido de la desestabilizacion (o que al menos asi aparecia con sus alardes de resistencia civica, etcetera) en un lugar donde, por su propia situacion, se le secara la polvora, no pudiera moral ni politicamente poner en acto sus amenazas. Brinc an los enanos y graznan los cuervos, pero desentranar el hecho politico sigue siendo una tarea de la inteligencia apoyada por la teoria: "La adhesion de masa a una ideologia y la falta de esa adhesion es el modo en el cual se verifica la critica real de la racionalidad y la historicidad de la maneras de pensar", escribio hace mas de sesenta anos Antonio Gramsci. Todo lo anterior no implica ninguna objecion contra la propuesta perredista de limpiar las elecciones. Por supuesto que hay que limpiar las elecciones (y mas alla, hay que ir avanzando desde ahora propuestas para que las elecciones mexicanas sean mas justas y equitativas de lo que fueron estas), pero mi impresion particular es que esa demanda tiene mas propositos publicitarios que legales, es mas una salida politica a un callejon sin salida que la esperanza fundada en que la "limpieza" electoral cambie o si quiera modifique la contundente relacion de fuerzas que arrojo el resultado electoral validado apenas este domingo en sus grandes trazos por el Consejo General del IFE. Si nos atenemos al Cofipe, la suma de los resultados distritales ya arrojo un resultado legal y valido. Ahora solo el Tribunal Federal Electoral puede modificar estos resultados, pero haran falta mas que dichos y retorica para que esto ocurra. Haran falta pruebas, y de estas no parece haber demasiadas en las alforjas panistas o perredistas. .