seccion inf. gral. guia: ALP-26... Pag. 1-1a. balazo: LA NACION Y EL MUNDO cabeza: Yeltsin en Polonia, Yeltsin ante el Baltico credito: Juan Maria Alponte Veo a Boris Yeltsin, en una bella fotografia, en Polonia. La fotografia recoge un momento importante de la negociacion entre Moscu y Varsovia. En efecto, Yeltsin se inclina ante un monumento polaco besando, en su base, una corona: es el Monumento a los Muertos a Katyn. Con ese gesto, como antes el de Mijail Gorbachov creando la Comision Especial para deslindar las responsabilidades en el asesinato de los 15 mil oficiales polacos, la Union Sovietica primero y la Republica Rusa de nuestros dias acometen la terrible tarea, de cara a sus vecinos: admitir su protagonismo en la barbarie. Nunca es facil. Ahora se inicia esa etapa, dramatica, en Japon. Antes, y para siempre en nuestra memoria, estara en nuestra conciencia el momento en que, tambien en Polonia, arrodillado y recogido en si mismo, metido en el interior de su conciencia, un hombre de ese siglo, un aleman del exilio, Willy Brandt, se posternaba ante el monumento a los judios asesinados por el ejercito nazi en el ghetto de Varsovia. La matanza de los oficiales polacos por la policia sovietica en la foresta de Katyn (4,100 en Katyn y los demas, hasta 15,000 en los demas campos de concentracion sovieticos) forma parte de una tragedia colectiva: del Pacto Ribbentrop-Molotov, del Pacto de No-Agresion firmado entre la Alemania de Hitler y la URSS staliniana el 23 de agosto de 1939. En las clausulas secretas del Pacto se establecian unas disposiciones cuyas consecuencias historicas recaerian, inexorablemente, sobre dos rusos de la generacion de la caida y derrumbe de los muros. En efecto, Mijail Gorbachov supo que jamas podria llegar a una paz verdadera con Polonia sin asumir y esclarecer la matanza de Katyn que Stalin, en carta asombrosa enviada a Churchill y Roosevelt (21 de abril de 1943), achacaria a los nazis. Antes de que la URSS de Gorbachov aceptase la necesidad de la revision de la matanza, el Congreso de Estados Unidos, despues de interrogar a 81 testigos, examinar 183 documentos y 100 deposiciones escritas, llego a la conclusion (22 de diciembre de 1952) que la masacre de Katyn era una masacre sovietica y no nazi aunque estos no quedaban exculpados, obviamente, de ninguna de sus atrocidades, bien entendido. En el texto del presidente de la Comision de esclarecimiento sovietica, Alezandre Yakolev, por cierto, hace la siguiente observacion: "Los resultados de la Comision del Congreso estadounidense no ejercieron ninguna influencia sobre la historiografia sovietica". En suma, esa historiografia se atuvo, simplemente, a la version oficial de Stalin. La Comision Sovietica le haria responsable, al reves, de las ordenes que determinaron la hecatombe. "Los periodicos sovieticos y polacos publicaron, al mismo tiempo, dira Yakolev, los resultados de la investigacion". Una frase del presidente de la Comision Sovietica me sorprende y me conmueve por varias razones. "Nunca sabremos -dice Yakolev- el porque del caso de Katyn ni quien fue el principal responsable" (aunque senala que las ejecuciones fueron realizadas por la policia secreta, entonces la NKVD, y que en las ordenes de las ejecuciones aparecen las firmas de Stalin, Molotov, Kaganovitch, Kruschov, Malenkov y Vorochilov). Las causas estan claras: la URSS como la Alemania nazi, que tomo decisiones semejantes en el area de ocupacion germana de Polonia, intentaron eliminar, con todas sus consecuencias, a los hombres y mujeres que representaban la conciencia nacional de Polonia. Se trato de una liquidacion masiva de las elites nacionales, puesto que en el Pacto del 23 de agosto de 1939 se institiye, con todas sus consecuencias, un reparto del Este. La eliminacion, en el area de ocupacion nazi de Polonia y en la zona de ocupacion sovietica (cuyas tropas ocuparon su espacio territorial a partir del 17 de septiembre de 1939, es decir, 17 dias despues de la invasion nazi de Polonia que daria ocasion a la iniciacion de la Segunda Guerra Mundial), de esas elites incluia, sin duda, a la oficialidad del ejercito polaco. En el caso de la URSS se trato de un crimen por demas espantoso -si hay grados en lo abominable- porque una gran parte de los 15 mil oficiales polacos que desaparecieran en la URSS buscaron refugio, huyendo de los nazis, en el area sovietica. No sabian que lo que les ocurriria a ellos aconteceria, tambien, a los comunistas polacos que, por su alto sentido social y politico, constituian una elite del pensamiento y de la interpretacion de los problemas. En el area nazi de Polonia fueron, obvio es decirlo y pese al reparto de Polonia y del Baltico con la URSS, el enemigo identificado. En el area sovietica esos comunistas fueron tratados casi igual que los 15 mil oficiales. Boris Yeltsin en ese viaje al Monumento de Katyn en Varsovia (que solo tiene en su muro de granito estas palabras "Katyn. 1940") ha efectuado, tambien, un viaje hacia la historia contemporanea al firmar, con el presidene Walesa, la finalizacion de la presencia de las tropas sovieticas en el pais. En octubre de este ano las ultimas unidades de la ex URSS se alejaran, definitivamente, de Polonia, donde, desde el tratado del 23 de agosto de 1939, las fronteras de la Ucrania polaca fueron modificadas y una parte de esa importante region fue incorporada, hasta hoy, a la Republica de la Ucrania, entonces, ex sovietica. Para bien de todos ese problema no ha sido presentado. En la Conferencia de Yalta esas nuevas fronteras fueron ratificadas, y en compensacion, se entregaron a Polonia, en el territorio de Alemania, de la Alemania vencida, una zona que provoco la evacuacion forzada, a su vez de los alemanes. Al derrumbarse los muros la principal preocupacion de Polonia fue que la Alemania unificada ratificase esas fronteras ya que, en caso contrario, el avispero hubiera sido enorme. Eso hizo el Parlamento unificado de las dos Alemanias. Ojala que el delirio del nacionalismo irredentista no replantee, otra vez, el viejo problema. De todas las formas, por la anexion sovietica de la Ucrania polaca, sus fronteras nacionales en 1938 (entonces de 380.000 Km2) se redujeron a los 312 mil de nuestros dias. Alrededor de 6 millones de polacos fueron deportados y muchos de ellos perecieron. Interminable agonia y catastrofe. Pero, en su viaje a Polonia, Boris Yeltsin ha tenido que volver a revivir, y el problema se agudiza cada dia que pasa, otras consecuencias del pacto del 23 de agosto de 1939: el de los paises balticos. De acuerdo con las clausulas secretas del Tratado de No Agresion de 1939 (que fue ratificado y ampliado, normalmente, entre la URSS y la Alemania hitleriana hasta el 22 de junio de 1941 fecha en que Hitler ordeno, sin declaracion de guerra, la invasion de la URSS) los tres paises fronterizos, Estonia, Lituania y Estonia, reconocidos como Estados independientes, al igual que Polonia, por el Tratado de Versalles (y por Lenin en el Tratado de Brest- Litovsk) quedaron en el "area de influencia de la URSS" que, en 1940, los convirtio, sin mas, en nuevas republicas sovieticas.