PAG. 14 SECCION: INF. GRAL. CABEZA: BENITA GALEANA CREDITO: ELENA PONIATOWSKA Anos mas tarde, Pepe Revueltas, ya secretario de las Juventudes Comunistas, ocupado en su trabajo, no escuchaba a Benita en una reunion. Alli estaba ella con su rebozo cruzado, sus trenzas y su cigarro frente a el, hablele y hablele sin que este le respondiera nada. No le prestaba la menor atencion. Benita le proponia con su voz ronca de tanto hablar en los mitines, hacer un planton en el Zocalo para no dejar entrar al ejercito aleman que venia de visita a Mexico, en 1937 o quien sabe en cual ano pero por a hi iba el ano. Pepe pedia orden a los companeros y nada que volvia la cabeza hacia Benita, los asuntos tenian que tratarse uno por uno, Benita insistio de nuevo, se hicieron de palabras y Pepe la llamo anarquista. Ah! ¨anarquista yo? Y zas, que le suelta el primper trancazo. Porque Benita ya tenia formacion politica y sabia que anarquista y apestado eran lo mismo. Siguieron peleando y peleando hasta que Benita se enojo bien y bonito. Mas tarde, cuando le preguntaron en la celula a Benita enfurecida que quien habia ganado, respondio: Pues yo, no ven que lo agarre sentado y le di una paliza. Muy independiente, muy segura de si misma, Benita tuvo una hija de Salvador Solano, Lilia, un tipo que la abandono, que bueno, gracias a Dios, porque era un verdadero estorbo. Su hija murio a los 24 anos, del corazon. Mario Gil y Benita resolvieron adoptar seis ninas, pero a ella no le gustaba que estas la cuidaran ni le sirvieran. Se bastaba a si misma. Iba por su pollo en la manana y se lo cocinaba. Vivia con sus recuerdos. En 1985, cuando el terremoto, les dijo a sus hijas una vez pasado el susto: A ver hijas, abran el ropero, saquen todo, vamos a regalarlo. Ese dia no solo regalo todos sus enseres sino que decidio deshacerse de su coleccion de libros y de pinturas. A sus 80 y tantos anos decidio que sus hijas deberian ser libres y les permitio irse a hacer su vida. No queria depender de nadie, aun con sus enfermedades. La ulcera y todo lo demas le hacian los mandados. Era una mujer fuerte. "En 1985 me di cuenta que todo me sobraba", decia. En 1987 un grupo de mujeres cubanas la invito a La Habana. Contaba: Cuando llegue a La Habana no senti nada. Tenia una gran ilusion, ya habia sonado ir a La Habana y al aterrizar no senti nada, ni emocion, ni nervios, ni gusto, nada. El dia de la reunion, me presente con todas las mujeres. Fidel Castro se retraso cinco horas. Yo ya estaba aburrida, acalorada, y me fui a caminar por los pasillos. Las companeras de Mexico empezaron a corear: Que Fidel reciba a Benita! Se acerco una cubana y les dijo que iba a investigar si el comandante podia recibirla. Regreso muy apenada y le dijo que estaba muy ocupado el comandate y que tal vez otro dia. Benita sintio que el sueno se habia derrumbado y se alejo. Al rato, la misma cubana se acerco alterada para decirle que el comandante la esperaba en ese mismo momento. Benita solo se aliso las trenzas y se dirigio a la oficina del comandante. Entro. Y ahora si empezo sentir que estaba en Cuba. El comandante la abrazo y le pregunto: ¨Conociste a Julio Antonio Mella? Claro que si. Yo estuve en la defensa de las cenizas de Mella. Venga una abrazo! Benita lo secundo: ¨Le puedo pedir un favor, comandante? Claro, claro. ¨Le puedo dar un beso? Entonces el comandante le dijo: Venga un beso. Y Benita le dio un beso muy tronado. Regreso a Mexico satisfecha. Para ella, visitar Cuba era ver a Fidel. Lo demas le venia guango. Anos despues de la muerte de Mella, contaba Benita que un grupo de comunistas, entre ellos Juan Marinello, que echo mucho perico en el cementerio, quiso mandar las cenizas de Julio a Cuba y el Ejercito no dejo, que porque los comunistas no tenia derecho a nada, ni siquiera a las cenizas de muerto. Por fin, fueron rescatadas las cenizas de Mella que ahora estan en La Habana. Benita pudo ver la estatua de Mella frente a la Universidad de La Habana. Desde luego la personalidad de Benita era muy energica, la que mas fortaleza nos comunicaba, la que mas nos ensenaba. Vivir la vida como la vivio Benita es ya una leccion de salud mental y cuando uno cierra el pequeno libro de no mas de 100 cuartillas, su autobiografia Benita, no puede uno menos que concluir: Que ser humano formidable! En Mexico, hoy por hoy y gracias a nuestra madrecita de Guadalupe, varias mujeres son contestatarias. Rosario Ibarra de Piedra, desde luego, es la que mas jalon tiene en la "base". Hasta Clouthier la respetaba y la queria. Las mujeres zapatistas, igual, o las costureras. Benita siguio la tradicion de Maria Pistolas, que le grito a Carranza que era un usurpador. Pudo ser un Adelita de ahora. Tuvo algo del mejor personaje femenino de Mariano Azuela, "La Pintada" de Los de abajo, y mucho de la Jesusa P alancares de Hasta no verte Jesus mio. Resulta sorprendente pensar que esta nina cabronsisima que le corto dos dedos a su cunado de una cuchillada, esta nina que moria de ganas de poseer un par de zapatos, esta muchachita del estado de Guerrero, haya sido la Benita que viajo y acudio al llamado de los periodistas de America Latina. Hoy ha dejado de estar fisicamente entre nosotros, sin embargo, todavia podrian gritarle como le gritaron a lo largo de su vida en todas las luchas, trifulcas, en sus 58 encarcelamientos y en sus multiples batallas ca mpales: "Agarren a Benita!". .