SECCION ESPECTACULOS PAG. 39 BALAZO: CONVERSACIONES CABEZA: Los suenos de Ettore Stratta CREDITO: XAVIER QUIRARTE Hundido en la butaca de un pequeno cine de la provincia italiana de Cuneo, como hundido en un sueno, Ettore Strattta siente como la musica le recorre el cuerpo. Mientras Cary Grant interpreta a Cole Porter en la cinta Night and Day, en la oscuridad el pequeno canturrea las notas del tema: la musica lo ha atrapado irremediablemente con su calidez abrazadora. Muchos anos despues, Ettore Stratta, director de orquesta y arreglista que ha dado nueva vida a sus suenos infantiles a traves de discos como Symphonic Bossa Nova, Symphonic Boleros y Symphonic Tango esta frente a nosotros, reviviendo su pasion por la musica. Egresado del Conservatorio de Santa Cecilia en Roma, donde estudio piano y composicion, en 1960 decidio "hacer la America" y viajar hacia Nueva York. "Desde que estaba en Italia siempre me habia interesado el jazz, la musica de Hollywood, los tangos", dice en entrevista exclusiva para El Nacional. "En esta musica encontraba mas libertad. Cuando era nino me volvia loco por las peliculas estadounidenses, la musica de Gershwin y Cole Porter. En esos dias no me interesaba mucho la musica italiana, que en su mayoria era pop de escaso interes artistico". Luego de estudiar composicion y direccion orquestal, Stratta comenzo a dirigir una orquesta de camara, al tiempo que tocaba el piano y fungia como productor y arreglista de discos de jazz y musica pop para artistas como Barbra Streisand y Dave Brubeck. Su llegada, dice, coincidio con un periodo de transicion en el que el rock y el folk adquirian gran popularidad y el jazz cambiaba. En 1968 produjo un disco que revolucionaria el concepto de la musica electronica, Switched on Bach, de Walter Carlos. "Descubri al arista que se habia pasado seis meses realizando este disco con una tecnica primitiva. Antes de Switched on Bach todo se hacia a traves de pulsantes electronicos de sonido y cada nota tenia que afinarse. Despues Walter se dedico a crear un teclado, luego un doble teclado y de ahi surgio la revolucion completa que ha derivado en los sintetizadores". A pesar de su interes por la electronica, Stratta volvio a su pasion infantil, pero esta vez brindandole a la musica con la que crecio un nuevo ropaje. "Me interesaba la combinacion del jazz con la musica clasica y comence por hacer discos como Anything Goes, con Yo-yo Ma y Stephane Grappelli tocando musica de Cole Porter, y Viva Vivaldi!, en el que se toco la musica tal como esta escrita, pero con una seccion ritmica moderna. Fueron algunos de los primeros intentos de crossover entre e l jazz y la musica clasica, cuando ni siquiera existia el termino. Ahora es algo que se hace todos los dias". En principio, la idea de iniciar una serie de grabaciones con la Royal Philarmonic Orchestra no fue muy bien recibida por los productores. "Les platique que queria hacer un disco de tango y se sorprendieron. Deben tener confianza, les dije, porque lo voy a hacer con un grupo de tanguistas de primera linea y una orquesta sinfonica". Symphonic Tango, que reune al Quinteto de Buenos Aires con la Royal Philarmonic Orchestra, resulto un encuentro muy afortunado y los productores respiraron aliviados. La libertad improvisatoria del tango es el elemento que le ha atraido a Stratta. "Una vez en Buenos Aires un periodista me decia que el tango es muy rigido, que no habia improvisacion. No, le decia, yo, no es verdad. Porque si hay reglas, como las hay en el jazz, pero los instrumentistas improvisan. Piazzolla, el gran artista del tango moderno, llevo aun mas lejos esta libertad de improvisacion". Al concluir Symphonic Tango a Stratta le parecio natural deslizarse hacia la musica brasilena y concebir Symphonic Bossa Nova, un disco en el que un grupo de jazzistas darian una interpretacion diferente a esta musica, pero sin cambiar la melodia original. Con Al Jarreau, con quien habia colaborado en ocasiones anteriores, resulto muy facil trabajar, dice el director. Jarreau hace una hermosa version de "Like a Lover (O cantador)" de Dori Caymmi, mientras que Dori canta, sin palabras, la pieza que Stratta le compuso especialmente, "Magic Moments". Otra participacion importante fue la de Gary Bruton, "para mi gusto el vibrafonista mas grande en la actualidad, un artista extraordinario. El se enamoro mucho del disco Symponic Tango, al grado que compro cuarenta copias para regalarselas a sus amigos en Navidad. Cuando lo llame acepto de inmediato y vino dos dias a Nueva York para grabar un par de piezas". En este encuentro con la musica brasilena no podia faltar un saxofonista, papel que recayo en Tom Scott, que destaca sobre todo en su acariciante version de "If You Went Away" ("Preciso aprender a so ser") de Gilberto Gil. "Lo interesante es que yo le dije: me gustaria que tocaras algo mas melodico, mas a la Stan Getz. Y el me respondio: maravilloso, nunca me piden eso y es lo que mas me gusta!" Tambien colaboran en el disco el flautista Hubert Laws y el trompetista Claudio Roditi. "Laws es un virtuoso que hace muchos anos no grababa, tenia problemas y cambiaba constantemente de residencia. El no conocia las melodias de Ivan Lins The Island/Daquilo que eu sei y se identifico de inmediato con ellas. El resultado es formidable. Claudio Roditi es un gran trompetista, muy conocido porque trabaja con Paquito DRivera y fue parte de la United Nations Orchestra de Dizzy Gillespie. Un gran solista". Homenaje a Tom Jobim Symphonic Bossa Nova fue saludado por Antonio Carlos Jobim como un disco esplendido: "Buena musica brasilena, hermosamente arreglada, con maravillosos musicos de jazz como solistas". Una vieja amistad unia a los dos musicos, ademas de que habian trabajado juntos en varios conciertos en Nueva York. "Lo vi dos semanas antes de que muriera. La noche antes de venir a Mexico hubo un gran concierto en Nueva York, un tributo en su memoria con Milton Nascimento, Gal Costa, Joa Gilberto, Sting y Herbie Ha ncock. En noviembre voy a hacer un concierto en el Carnegie Hall con la musica de Tom, acompanado por Michel Legrand, George Shearing y artistas brasilenos que iran especialmente para la ocasion". Con evidente tristeza, recuerda su ultimo encuentro. "Estuve en su casa de Nueva York donde nos encontramos para hablar sobre el proyecto de hacer un disco juntos. Me dijo: Bueno, nos vemos en Rio, tenemos que trabajar en los arreglos. Dos semanas despues lo operaron y aunque salio bien de la operacion, su corazon no resistio", dice con voz apenas audible y un dejo de tristeza. "Para mi Tom Jobim es uno de los mas grandes compositores de este siglo", dice recuperandose. "Creo que esta al nivel de grandes autores como Cole Porter, George Gershwin y Jerome Kern. Es un gran melodista formado en la tradicion clasica, a quien le interesaba mucho la musica de Chopin, Debussy y Ravel, y naturalmente tenia la influencia de Heitor Villa-Lobos". Entre los proyectos inmediatos de Ettore Stratta figura la edicion de un disco y un video grabados en el Festival de Montreux, Suiza. "El ano pasado dirigi Pure Woods, suite para orquesta sinfonica y cuarteto de jazz que escribio George Duke inspirado en un bosque muy viejo de San Francisco, el cual cuenta con enormes arboles de dos mil anos de edad. Tocamos esta suite con la Orquesta Nacional de LIle, George Duke piano, Stanley Clarke en el contrabajo y Chester Thompson en la bateria. El concierto tuvo mucho exito". El proximo ano, Stratta regresara al Festival de Montreux para ofrecer un homenaje a Stan Getz y Antonio Carlos Jobim. "La idea es tocar en concierto el disco de bossa nova y a la vez rendir homenaje a Getz y Jobim, con piezas muy identificadas con ambos. Seguramente van a participar Gary Burton, Tom Scott Dori Caymmi y Claudio Roditi, aunque no creo que asista Al Jarreau porque tiene programados otros proyectos para esos dias". Aunque la bossa nova, al igual que el blues, es una musica que constantemente se renueva, en estos dias parece haber un "redescurbimiento" de su riqueza a traves de nuevas grabaciones y reediciones de obras maestras. La formula de esa longevidad, es que "la melodia y la estructura armonica de la musica brasilena son siempre modernas, no pueden envejecer", sostiene el director. Ettore Strata se acerca a la musica sin importar el genero de que se trate, en ello radica su exito. "Uno tiene que escuchar la musica por su valor, la diferencia esta en si es buena o no. Lo que escucha la gente en ella es algo personal, uno no puede decidir a priori si le va a gustar o no. La gente debe escuchar la musica para decir si la parece bien o no. La musica es el idioma universal, va directo a los sentidos" .