SECCION INF. GRAL. PAG. 2 CABEZA: PND: Politicas anti-pobreza CREDITO: CIRO MAYEN La primera fue que el crecimiento por si mismo no fue suficiente para disminuir los niveles de pobreza. Aun cuando el promedio del crecimiento economico fue positivo, su intensidad resulto precaria pues los niveles de pobreza solo se redujeron apenas levemente. Una de las causas mas importantes que explican el restringido efecto derrame del crecimiento es la existencia de una alta concentracion de la riqueza e ingresos en la economia nacional; nuestra experiencia indica que cualquier crecimiento que se logr e bajo un esquema tan desigual como el actual corre el riesgo de trasladar limitados beneficios a las franjas mas pobres de la sociedad. Una segunda leccion que se desprende del periodo previo a la crisis es que un mayor nivel de ingresos, por si solo, no asegura mejores niveles de desarrollo humano. Asimismo, el crecimiento no se asocia estrechamente con el nivel y estructura del gasto social. Es cierto que en nuestro pais se ha incrementado notoriamente el nivel de gasto social en los ultimos cinco anos. Sin embargo, su nivel real sigue siendo por debajo al de las decadas anteriores a la crisis. La tercera leccion que emerge de la experiencia es que las politicas anti-pobreza basadas unicamente en la redistribucion de ingreso, tampoco son sostenibles en el largo plazo. Es necesario que la redistribucion vaya acompanada de un crecimiento sostenido pero tambien de un manejo adecuado de los equilibrios macroeconomicos, pues los desequilibrios macroeconomicos, cualquiera que sea su origen, afectan en mayor medida a los sectores pobres porque son los que poseen menos mecanismos de defensa. Tal es el cas o de la inflacion o de las politicas de contraccion que han seguido a las fases de expansion economica. Las propuestas sobre politica para combatir la pobreza son, sin embargo, muy complejas. Si bien es necesario cuidar los equilibrios macroeconomicos y recuperar la capacidad de crecimiento, ello no es suficiente. Se requieren instrumentos adicionales, como por ejemplo, usar de manera eficiente el activo mas abundante de los pobres, su fuerza de trabajo, lo que implica definir una serie de politicas de incentivos, institucionales, de infraestructura y tecnologicas, tendientes a mejorar el acceso de los mas po bres a los recursos productivos. Por otro lado, se debe promover la capacidad de los pobres mediante politicas de gasto social en educacion, salud y vivienda. Una politica anti-pobreza deberia cubrir una amplia gama de actividades mediante diversos programas especificos que ataquen de manera eficaz las diferentes dimensiones de este fenomeno; quizas podrian clasificarse en cinco grandes ambitos: programas de apoyo a la alimentacion, programas de dotacion de servicios sociales, principalmente educacion y salud, programas de apoyo a proyectos productivos, programas de infraestructura y de capacitacion. Aparentemente existe un consenso entre los diferentes actores sociales y politicos del pais, sobre la necesidad de formular politicas anti-pobreza, pero existen todavia interrogantes sobre la manera para alcanzar los objetivos buscados. Hasta el momento las acciones en favor de los sectores mas desprotegidos han probado ser efectivas, pero de efecto limitado. La dificultad es pasar de beneficiar un numero reducido de personas a convertirlas en permanentes. El combate a la pobreza en Mexico presenta algunos contratiempos como los siguientes: no obstante que existe una larga historia de diferentes propuestas para su solucion, todavia no existe una elaboracion conceptual y presupuestal comun entre las diferentes dependencias que tienen como objetivo erradicarla. En la promocion del desarrollo de las zonas mas pobres han estado comprometidas (y todavia lo estan), un sinnumero de instituciones publicas; esas dependencias no siempre han coordinado sus esfuerzos y p oseen programas de calidad desigual y metodos distintos, que en ocasiones entorpecen la eficiencia de las actividades planificadas. Aunque Mexico cuenta con la infraestructura suficiente para cumplir con los objetivos de combate a la pobreza, la existencia de inercias burocraticas y la erronea priorizacion de las obras a realizar conduce a una desviacion de recursos hacia grupos que no son pobres y acciones superpuestas de las dependencias. Dado el gran numero de instituciones y dependencias gubernamentales que dedican parte importante de sus recursos a la atencion de la pobreza y a la infraestructura con que cuentan, no parece necesari a la creacion de otras nuevas, sino mas bien una coordinacion eficiente entre las instituciones en los diferentes niveles de gobierno, con el proposito de emplear los exiguos recursos, evitando dispendio y duplicidad en las funciones. La politica a seguir en la lucha contra la pobreza trasciende los esfuerzos de un gobierno y presenta desafios para el sistema en su conjunto. Es necesario que el combate a la pobreza se convierta en una politica de Estado, es decir, que no se limite a lo que un gobierno pueda hacer durante seis anos o a lo que de manera puntual se puede llevar a cabo mediante el ejercicio del presupuesto de egresos de la federacion. Cuidado con las propuestas simplificadas que proyectan la imagen de que la eliminacion de l a pobreza puede alcanzarse de manera voluntarista si el gobierno asume la voluntad de hacer mas eficiente la economia y simultaneamente pone en practica medidas de apoyo directo a los pobres. Mas alla de algunas medidas compensatorias de caracter temporal, de lo que se trata es de disenar una estrategia nacional de lucha contra la pobreza que articule recursos, acciones y politicas para que se muevan en la misma direccion y con los mismos objetivos, que propicie que las acciones de los estados y municipios actuen en consecuencia y con la misma orientacion. .