PAG. 21 SECCION: ECONOMIA CABEZA: Ahorro Nacional hacia el 2000 CREDITO: MARIANO FERNANDEZ* Sometidos a aquella idea de la eterna recurrencia, Mexico en los ultimos anos ha enfrentado crisis signadas por los tiempos politicos, si bien por causas diversas, la incidencia ha sido sexenal. Ya vivimos el fracaso de la estrategia industrial y centralizada, contradicciones de la sociedad y las instituciones, el colapso del estado benefactor, la caida de los precios del petroleo, reveses del neoliberalismo social y el rechazo de los Tesobonos, pero el resultado es mas o menos similar: los ordenes politico s, sociales y economicos entran en crisis. Algo asi como si el pais desfalleciera para luego renacer y al cabo de seis anos volver a hacer crisis y vuelta al inicio. Devaluaciones, contraccion en la actividad economica, inflacion y caida del ingreso son solo las partes visibles de la anudada madeja de la sociedad, que si bien evoluciona por algunos anos, luego la sucesion por el poder revierte su marcha. Haciendo del pais uno de los tristes lideres de la concentracion del ingreso. Ahora bien, el fomento del ahorro domestico es uno de los objetivos esenciales de la estrategia de largo plazo del actual gobierno (por domestico entendamos que es el ahorro de mexicanos en Mexico), bajo el supuesto de que esos recursos son estables y permitan la planeacion a largo plazo. Pero aun este argumento de tono evidentemente nacionalista tiene sus asegunes. A pesar nuestro, se puede comprobar que la mayor desinversion del ano pasado se dio en sectores identificados como ahorradores nacionales en el territorio nacional. Sin embargo, el problema no radica en una falta de amor a la patria, simplemente en la anticipacion de problemas recurrentes. Si el horizonte mas amplio se reduce a poco menos de seis anos, ¨que podemos esperar hacia el ano 2000, un 88, un 82, un 76 o un 70, nostalgicamente hablando? De hecho, la sociedad bien pudo haber votado en 94 pensando en una transicion sobre aguas claras y quietas, no fue asi. El pais perdio poco mas de 30 mil millones de dolares y compromete otros 37 mil millones, porque la transicion ha sido una de las mas violentas de los ultimos tiempos. Finalmente caemos en cuenta de que somos una nacion con un sistem a politico premoderno, que coyuntura tras coyuntura exhibe sus lados mas debiles en lo economico: lo que fuera la bonanza petrolera se convirtio en la extrema dependencia de un producto, lo que fuera la promesa de una economia industrial se volvio en fuerte apertura al ahorro externo. En ambos casos tenemos un excesivo endeudamiento y un grave problema de flujos, por lo cual hoy no tenemos con que pagar lo que debemos. Desafortunadamente el fomento al ahorro domestico bajo las condiciones actuales no es viable como solucion de largo plazo. Finalmente quienes retiran sus recursos lo han hecho al menos desde el inicio de los ochenta. 1.-Un fomento acelerado del ahorro supondria un esfuerzo mas para generarlo y, si el ahorro supone que hoy se consumira menos, entonces la poblacion que vive al dia o que no dispone de excedentes de ingreso sobre su consumo diario, dificilmente ahorrara, antes bien solo participara del esfuerzo para captar ahorro, consumiendo menos. 2.-La extrema concentracion del ingreso permite arreglos entre individuos con ingresos altos, dandoles un amplio poder de negociacion ante las autoridades, incluso injerencia directa en las decisiones nacionales, volviendo implicitamente mas vulnerable al Estado. 3.-Los incentivos al ahorro de largo plazo en moneda nacional no existen. Dada la experiencia, las personas racionalmente prefieren instrumentos que conserven su valor en el tiempo, digamos en otras divisas o en la especulacion hipotecaria. Ante estas condiciones es inconsistente que el ahorro se genere en el sector publico, teniendo cierto que un gobierno no puede ser superavitario permanentemente, cuando este debiera asumir una politica de redistribucion del ingreso, cuidando los incentivos concretos para el ahorro, es decir, la recuperacion del ingreso personal. Orientarse a fortalecer el mercado interno, en particular los sectores basicos de baja tecnologia. Sin embargo, estas metas seguramente excederan este y otros periodos sexenales. Para estas metas los indicadores gruesos de la economia son inutiles, no es objetivo incrementar el ahorro nacional, sino el ahorro individual, ni tampoco disminuir la inflacion, sino al menos mantener el ingreso real personal, abatir el desempleo y la emigracion, mejorando los indicadores de salud, creciendo en cada rama especifica de la produccion. Por lo pronto, comenzaremos a escuchar nuevos halagos a Mexico, que supera su crisis, pero creo que si en los proximos anos no ocurre un cambio cualitativo y sustantivo en la estructura del ahorro nacional, la economia seguira tan vulnerable como siempre ante la recurrencia sexenal. .