SECCION CULTURA PAGINA 31 BALAZO: CABEZA: Librerias: Especie en peligro de extincion CREDITO: JORGE CISNEROS MORALES Ante la falta de lectores, las librerias enfrentan un panorama sombrio. El contexto de crisis economica ha agudizado los problemas de los libreros, quienes ven a sus negocios como una especie en peligro de extincion. A pesar de que Mexico es el pais latinoamericano donde existe el mayor numero de librerias, en fechas recientes el Distrito Federal ha visto desaparecer establecimientos casi legendarios, como la Libreria Reforma y la Hamburgo, debido a problemas economicos. No existe fomento a la lectura Las acciones de fomento a la lectura emprendidas por autoridades o particulares son desconocidas por los libreros. Hector Pereyra, encargado de la Libreria del Paseo, ubicada en Reforma, dijo: "Lo ultimo que supe es que ha habido talleres, pero creo que no se ha hecho nada. Las labores deben empezar desde primaria: como poner una materia de lectura; tener una asignatura similar a la que se tiene en Estados Unidos u otros paises del primer mundo. En esos lugares, ademas de la geografia, las matematicas, el idioma y todo eso, hay una materia dedicada a la lectura. Eso nunca se ha promovido aqui. Los talleres de lectura se dan como una opcion a escoger entre fotografia, modelado, pintura o lectura; pero son talleres que ni siquiera estan dirigidos. Se concretan a pedir que se lea un libro, el alumno tiene que entregar un resumen, pero que yo sepa no hay, en las escuelas, siquiera un buen taller dirigido." El triste espectaculo que ofrece una libreria vacia se debe a la competencia que representa la television. Mercurio Lopez Casillas, encargado de la libreria El Viejo, ubicada en Donceles, senalo que "hay una competencia a nivel distraccion que impide que la gente lea. La television, las videocaseteras, los juegos de video han ocasionado que cada vez haya menos lectores, y eso aunado con la deficiente formacion escolar provoca esta crisis del libro". Para Lopez Casillas, las actividades de fomento son no solo insuficientes sino casi nulas. Refirio que hace muchos anos no se realiza un esfuerzo importante en la promocion de la lectura: "No se hace gran cosa en cuanto a formacion de lectores. Creo que desde la epoca de Jose Vasconcelos donde se realizo una muy buena labor de promocion, llevando los libros a la provincia no se ha hecho nada mas. Es necesaria una buena campana para que los ninos se acostumbren a leer." Esta ausencia de lectores se agrava con un catalogo muy reducido, que hace que ciertos temas solo se localicen en bibliografia de importacion, lo que se convierte en tarea ardua, debido a su elevado precio. En palabras de Pereyra, de la Libreria del Paseo, el problema es "la falta de lectores, pero tambien de produccion editorial. Ahora que subieron los libros, en cualquier libreria mas o menos decente el 70 o 60 por ciento de su inventario se compone de libros importados, principalmente espanoles. La industria editorial nacional no tiene un buen nivel en las areas de humanidades, ciencias sociales, cultura, ciencia. No existe. El Fondo de Cultura Economica (FCE) ha descatalogado muchisimos libros, se ha dedicado a cierta linea de economia pro-gubernamental. No se de que viva actualmente el FCE". El libro: precio prohibitivo La variable del costo del libro tambien es importante para que cada vez se lea menos. Abel Manrique, de la Libreria Salvador Allende, ubicada cerca de Ciudad Universitaria, expreso: "Ya son pocos los que recurren a la lectura, y son menos aun los que compran libros. Nosotros manejamos muchos de texto para universidad, pero nos damos cuenta de que la mayoria de los estudiantes prefieren sacar copias fotostaticas de los ejemplares, antes que comprar el libro. Los precios se ha elevado muchisimo, principalmente debido al cambio en la paridad." Esta panoramica desoladora hace las librerias cada vez sean menos rentables. Pereyra menciono un descenso sustancial en las ventas, que representan cifras preocupantes: "Las ventas han bajado en razon de un 40 o 50 por ciento en relacion al ano pasado. Este descenso no es un problema particular de este ano, sino que proviene de junio del ano pasado. Las ventas no se han levantado para nada; todo lo contrario: se observa una caida vertical. Las ventas han bajado muchisimo. Se habla de que las crisis son para todos, y si, lo sin, pero a las librerias le pega mas fuerte. Por ejemplo, en el sexenio pasado, cuando se suponia que habia dinero, las librerias se siguieron cerrando. Parece que los planes buscan acabar con las librerias, la cultura y todo eso." El alto precio del libro fue senalado tambien por Lopez Casillas como un fuerte impedimento para que la gente se acerque a la lectura. En su opinion, los costos de produccion no son tan elevados sino que las editoriales buscan una rentabilidad muy elevada: "Un gran problema de los libros es su costo. Ahora el libro es muy caro. Antes eran baratos pero en los ultimos anos han tenido un incremento altisimo, este se debe a que las editoriales quieren tener ganancias desproporcionadas. Podemos ver que hay editoriales como Espasa-Calpe y Porrua, que tienen precios muy bajos. No se si se deba a que tienen tirajes grandes". La reduccion en las ventas es una constante en las librerias. Manrique, de la Salvador Allende, indico: "Nuestro mercado se reduce a clientes que buscan ofertas. Ya no vienen a buscar un libro determinado, sino que solo compran los que estan en oferta." En anteriores ocasiones, los libreros han externado quejas en el sentido de que, a pesar de que el libro es un articulo exento de pago al Impuesto al Valor Agregado, los libreros tienen que declarar impuestos. Sin embargo, esta cuestion fiscal no resulta tan grave a los ojos de Pereyra: "Tenemos que declarar impuestos, pero no creo que estos sean el problema de las librerias. Los impuestos no serian tanto problema si hubiera ventas. Lo malo es que, como no las hay, los impuestos repercuten en contra tuya porque los tienes que pagar y no tienes con que." La competencia con tiendas departamentales que se han convertido en referencia casi obligada para quienes desean comprar libros tampoco reviste una gran importancia, dijo el encargado de la Libreria del Paseo: "La competencia con las tiendas departamentales no es tanta. La clientela que llega a ese tipo de lugares es diferente, no te quita gente. A lo mejor, quien llega a comprar un libro en esas tiendas solo va a leer un libro al ano. El problema es la falta de lectores. Los locales cerrados no son compe tencia, porque se dedican a otro otro tipo de libros. Frente a las librerias no tienen un surtido que pueda ser muy atractivo. Se dedican mas bien al libro del momento, al best-seller y ya. Vas a Sanborns y quiza tendran 500 titulos en toda su area de librerias. Frente a eso, tenemos una libreria pequena como esta, donde hay alrededor de 50 mil titulos. Como puedes ver, la competencia no es el problema. Esos lugares no van hacia el publico lector sino al consumidor, que va a al tienda por otras cosa s, ve un best-seller y lo compra". Un sombrio panorama Los libreros coincidieron con escritores, autoridades y maestros en que las acciones para aumentar el numero de lectores deben hacer enfasis en la educacion basica, sin olvidar el impulso que en el hogar debe darse a la lectura. Para ejemplificar como influye la falta de una cultura del libro, Hector Pereyra cito una anecdota: "Hay veces que los padres de familia vienen a comprar un libro que les pidieron a sus hijos en la escuela, y cuando se los mostramos preguntan sorprendidos: ¨Este libro tan grande es el que tiene que leer mi hijo? Generalmente, terminan pidiendo el resumen del volumen, para que el hijo no se esfuerce tanto en leer." Para Abel Manrique, es necesario seguir el ejemplo de editoriales que presentan a autores de renombre a precios reducidos, como un medio de aumentar los lectores: "Lo que podria hacerse para aumentar el numero de lectores es sacar un variedad de titulos que sean accesibles, tanto al bolsillo como a los lectores. Un ejemplo son las colecciones Alianza Cien o Planeta, donde se presenta parte de la obra de un autor a precio reducido." Ante las perspectivas sombrias de un negocio que cada vez lo es menos, los libreros presentan sus expectativas. Mercurio Lopez, de El Viejo, expreso: "La verdad es que el futuro pinta un poco negro, cada vez menos gente viene a las librerias. Nosotros como tenemos libros viejos y antiguos que no son tan caros somos una opcion para el lector; pero aun asi, la situacion es dificil." Hector Pereyra, de la Libreria del Paseo, lo planteo asi: "Las perspectivas son bastante dificiles. Este es un pais que se va a a quedar sin librerias. La luz de esperanza es que se empezara a fomentar la lectura entre ninos y adolescentes, con planes bien definidos, pero la educacion en Mexico esta por los suelos, es bastante mala. No veo buenas posibilidades. Creo que nos vamos a quedar sin librerias y sin libros". .