SECCION: INFORMACION GENERAL PAGINA: 2 CABEZA: Reforma electoral CREDITO: CARLOS SIRVENT* El miercoles pasado, el Centro de Estudios para la Reforma del Estado que dirige Gilberto Rincon Gallardo, organizo un evento insolito si tomamos en cuenta que vivimos en una democracia que todavia mantiene fuertes rasgos de exclusion e intolerancia. Rincon Gallardo convoco, junto con la Secretaria de Gobernacion a un amplio debate plural, que refleja lo que es el sentido del centro, en que se abordaron temas y propuestas para impulsar lo que esperamos que sea una reforma electoral mas definitiva, o menos efimera que las anteriores. Ahi se dieron cita miembros de todos los partidos politicos y destacados intelectuales, que desde distintas perspectivas argumentaron sobre la composicion de los organos electorales y la equidad en la competencia entre partidos. El segundo tema al menos, esta en la agenda de las democracias contemporaneas y fue uno de los puntos que Clinton incluyo en sus propuestas de campana, aunque hasta hoy lo tenga olvidado. Lo que destaca de la reunion convocada el miercoles pasado, es el hecho de que entre las posiciones de Ricardo Valero, militante del PRD, o de Manuel Barquin quien asistio con la representacion del PRI, o del asambleista Francisco Jose Paoli, si bien existian puntos de vista diferentes, estos dejaron de tener ese contenido antagonico que hasta hace unos anos hacia que las partes no pudieran ponerse de acuerdo en un proyecto electoral comun. Todos coincidieron en avanzar hacia una autonomia plena de los organos electorales respecto al Poder Ejecutivo, para garantizar elecciones imparciales y producir confianza en los ciudadanos. En los detalles se encuentran las diferencias. Para unos, la autonomia de dichos organos debe ser absoluta respecto al Ejecutivo y tambien de los partidos politicos y del Congreso, apuntando a lo que han dado en llamar el cuarto poder electoral; para otros, ante el peligro que para el buen desempeno de los organos electorales puede representar dejar el proceso en manos de un pequeno grupo de seis consejeros, que ademas en sentido estricto no representa a los ciudadanos y tampoco son apartidistas, la solucion es que en dicho organo concurran de manera co rresponsable todos los poderes con voto, incluidos los partidos. El tema de la equidad, a diferencia del anterior, suscita mayores controversias, dado que incluye el financiamiento a partidos y campanas, y el acceso a los medios de comunicacion. Para empezar, hay coincidencias en que es necesario precisar el termino para no confundirlo con el de igualdad absoluta, como le sucede frecuentemente al PAN y al PRD, y con el principio de proporcionalidad estricta como lo hace el PRI. Ambos son caminos que conducen a reproducir desigualdades entre los contendientes; en el primer caso porque otorga los mismos recursos financieros y los mismos espacios en medios de comunicacion a partidos con distintos desempenos y votos; en el segundo porque a partir de un a fuerte desigualdad historica entre los partidos se refuerza para mantenerla. Sobre el financiamiento publico que se otorga a los partidos, al menos hay coincidencias en que es sumamente alto. Vale la pena recordar que en otros paises es comun que al ciudadano se le pregunte al momento de pagar sus impuestos si desea que una parte de estos se destine a financiar a los partidos. Si hicieramos algo similar en Mexico, probablemente nos llevariamos la sorpresa de que hay una actitud popular mas critica a los partidos de lo que solemos aceptar. * Politologo. .