SECCION CIUDAD PAGINA 20 BALAZO: LOS HIJOS DE LA CALLE Y SUS HISTORIAS CABEZA: QUE HACEMOS SIN REGALOS?, MI MAMA?, SEPA, ME SALI DE MI CASA ASI DE MORRITO... CREDITO: FRANCISCO MEJIA En la esquina de Pensador Mexicano y 2 de Abril, atras del Teatro Blanquita, los ninos de la calle toman la sombra sentados en la banqueta y aspiran su ncharon ¨no?, su pastelito no nos dio ni risa, les pedimos mas pero ya no habia mas y que les hacemos un tango, se tuvieron que ir con todas sus pinches chivas. Mira, esto que tengo aqui en la mano si es vida ¨y que? Nino natural, nino terrible/ no eres hijo de tu madre ni de tu padre... De los festejos anuales por ser el Dia del Escuincle como ellos le dicen, a su realidad solo hay dos palabras que les interesa decir s y su cara llena de costras y su piel llena de costras y su vida que es una costra, afirma incoherente, sin quitar el puno de la boca ¨si lo entiendes? - Huele a pura pinche marihuana, esooooosss...!; interrumpe Pero la marihuana la trae el. Eres nuestro aullante hijo salvaje... Ufano, a las doce del dia, entre las senoras que van y vienen del mandado, que entran y salen del mercado con sus jitomates en la bolsa y las tortillas en el brazo izquierdo, .!. haber, saquen ¨no?. ¨Que tranza tio tu de que la giras? escobetas y las jergas; pero en la calle te maleas eseeee, te vuelves cabula, mas bien te vuelven; si no, te agarran de su maje, aqui los zorras no caben. A las vivas sino pum, pum y pum!, te sientan y pos yo no, yo machin con el vicio, el talon y todo, pos si pa perder hemos nacido ¨no?. Pero nel tio, aqui hay que chingarse y si no eres cafe ¨que eres?, pos como dice el idiota ese ¨que semos mi amor? ado... En la esquina de Pensador Mexicano y 2 de Abril, los ninos de la calle se sienten como en su casa, hasta don Chucho, el de la tienda, los trata con carino itos increibles que hacen cimbrar su micromundo de tendederos y agua. Pedro ha dejado de activar, ahora su mirada va y viene sobre la calle, balancea sus brazos sobre las rodillas y se duele e Mexico y voltea a ver a todos, sus ojos son como el de un perseguido. Abre un pequeno frasco y vacia algo liquido en un trapo. Lo encierra en su puno, estira su brazo al frente y como iniciando un rito, avienta el puno hacia arriba para despues bajarlo lentamente: umero 8 frente a donde se encuentra un albergue de Ninos de la Calle, es largo, sus palabras dan de vueltas en torno a puntos claves de su vida. - Consejo Tutelar - La mierda...; la respuesta - Albergue - Comes mejor en un restaurante; la respuesta - Vida - Activo, maje; la respuesta - Amor - ¨Que es eso? Segun como les ha ido en el baile de su vida callejera sugieren sus respuestas. Hacen sus comparaciones de los albergues que sostiene la Secretaria de Desarrollo Social del DDF. La disputa es entre lo que sucede en Las Margaritas, ubicado por el Politecnico y el de Ecuador 8: garradas y mugrosas, del segundo. Todos formando una rueda y dejando escapar su aliento a activo, aprueban; en eso estan cuando iende ante los ojos de todos tambien, hay se ven y que me largo; yo no estaba , yo no estaba, yo no estaba, yo no estaba Para entrar a Ecuador 8 se atraviesa un portico de madera y se da uno vuelta a la izquierda. Pero entonces, se encuentra uno con un policia y una reja como si fuera carcel. La comparacion es cierta. Entonces, lo que resta es hacerse el perdido y esperar que haya paso libre; un descuido y ahi vamos!: a la derecha la cocina, sigue uno de frente por un pasillo semi oscuro y angosto; a la izquierda, cuartos tipo celdas. Se llega a un patio donde se observan los tres niveles del edificio: todas las ventanas enre jadas, y entonces uno se pregunta ¨y la libertad infantil, que es?. Enfrente, en el nivel de abajo, en las mazmorras, perdon!, en los cuartos o recamaras se ven colchones encimados. Todo vacio. Sin vida. Un descuido y el visitante es interceptado por el personal, ¨que busca?, al director del albergue, es la respuesta. Es por aqui, pero ¨quien lo dejo pasar?, esta prohibido el paso, casi grita. Como era obvio desde un inicio, el director, Jose Vallejo, pide comprension y remite al intruso a que pida permiso al DDF para poder hacer una entrevista. En fin. Venimos de la calle, se queja afuera de la casona, Roberto Los Ninos de la Calle son expresion cotidiana, o mejor, como lo dice Rodrigo .