PAG. 35 SECCION: CULTURA CINTILLO: DEL AMOR Y OTROS DEMONIOS CABEZA: FABULA DE LA PASION CREDITO: MIGUEL GARCIA-POSADA ancias tan sombrias, como en Del amor y otros demonios; la nina sufre de posesion diabolica y el clerigo esta encargado de exorcizarla. La problematica relacion se resuelve en el encuentro amoroso, que la atroz actuacion de la Inquisicion precipita al desastre. El demonio del amor es vencido por los oscuros demonios de la teologia y la intolerancia. La realidad es el punto de partida de la novela, a tenor de lo que cuenta Garcia Marquez en el prologo; todo arranca del descubrimiento de una larguisima cabellera en un craneo infantil desenterrado con otros restos humanos, al procederse en 1949 a la demolicion del convento de las Clarisas en Cartagena de Indias, que el escritor, entonces periodista, pudo presenciar. El novelista asocia el hallazgo a una leyenda piadosa del Caribe. La fabula queda enmarcada de este modo en la imaginacion popular, en la mem oria colectiva. El lector conoce, pues, desde el comienzo, que va a asistir a una cronica novelesca, a la reconstruccion liberrima de un episodio legendario, pero, al fin y al cabo, a su reconstruccion y, por tanto, y a la vez, a la recreacion de un tiempo historico (o de un clima, mas exactamente) que cabe situar en los ultimos anos del siglo XVIII; se da por aparecido el Fray Gerundio de Campazas, del padre Isla, cuya primera edicion integra es de 1768, y se mencionan unas obras completas de Voltaire, que murio en 1779. Esta recreacion es tan relevante en el texto como la fabula misma contada, nucleo de la accion narrativa que no existe sin la envoltura correspondiente. La recreacion de un siglo ya crepuscular en la ciudad portuaria del virreinato de Nueva Granada se lleva a cabo con ejemplar consecuencia artistica. Maxime cuando se produce siempre sobre planos proximos, sobre las realidades que gravitan y condicionan, de un modo u otro, la peripecia central, muy lejos el narrador de cualquier proposito arqueologico. De este modo, los elementos cristianos, los indios y en especial los negros, aparecen aludidos, no consignados, filtrados, no referidos, sin que la cronica pi erda por ello intensidad. El epos colectivo que sustenta el texto determina una muy graduada dosificacion en el tratamiento de los personajes, que se agrupan basicamente en dos clases: los relacionados con la nina (los padres, los amantes de estos, los criados) y los vinculados al clerigo, pertenecientes al estamento eclesiastico (el obispo, un nuevo exorcista, la superior del convento donde la nina es recluida, algunas monjas), mas la ejemplar figura de un medico, el judio licenciado Abrenuncio de Sa Pereira. En este personaje magistral se resume uno de los centros de significacion de la novela; el poder de la vida, del conocimiento no dogmatico del mundo, de la sabiduria que emana del contacto con la realidad. Sin ser equivalente en sus funciones, este personaje recuerda al Melquiades de Cien anos de soledad. Enigmatico y sapiente, toda su conducta persigue poner orden y sensatez en un universo donde la supersticion produce resultados pavorosos. El narrador se halla bien distante de cualquier posicion doctrinaria. Con la suprema objetividad del gran escritor, Garcia Marquez se esfuerza en comprender los moviles de sus criaturas sin colocarlas a priori bajo una luz negativa. Fruto de esa objetividad, el inteligente pero inquisitorial obispo encuentra su replica en el padre Tomas de Aquino, un exorcista amable y flexible, capaz de conducir el caso de posesion diabolica a dominios de resolucion facil. Una deliberada multiplicacion de los puntos de vis ta rodea el caso mismo. El narrador no especula en sentido doctrinal, respetuoso siempre con sus criaturas y atento al movil ultimo de mostrar ese universo de valores. Universo imposible y definitiva causa de la ceremonia del horror que presenciamos, cuya responsabilidad corresponde a "la opresion del mundo cristiano", segun denunciara el enamorado clerigo. Ese proposito no se traduce en mengua de la individualizacion de los personajes, plenos de sustancia existencial. El mismo proceso de destruccion de la nina es paralelo al de su casa, donde sus padres se desintegran victimas de los rigores nobiliarios y del desamor que preside unas relaciones sociales de dudosa autenticidad. Toda la fabulacion de este orbe domestico es impecable y encuentra su polo complementario en el convento de las Clarisas, lugar donde pena encerrada la nina y es exorcizada, y donde con oce tambien el amor. La potencia con que se narran los momentos mas siniestros no logra ocultar el lirismo delicado, entranable, con que los acosados amantes se entregan bajo el signo protector de Garcilaso, cuyos versos recitan en la celda conventual. Del amor y otros demonios es tambien un homenaje al padre de la poesia espanola, su obra vuelve a cantar aqui el puro amor liberado de dioses oscuros y nocivos. El estilo del autor llamea esplendoroso, signado como siempre por una poeticidad radical, pero hay que hacer notar la visible voluntad de sobriedad del escritor, que se corresponde con la cuidadosa depuracion de materiales en que se sustenta el mundo narrado, un mundo de una enorme riqueza. Maestro absoluto, Gabriel Garcia Marquez ha vuelto a ofrecer otra expresion memorable de sus excepcionales dotes de fabulador. (De EL Pais para El Nacional) Gabriel Garcia Marquez. Del amor y otros demonios. Mondadori. Barcelona, 1994. 190 paginas. .