SECCION: ESPECTACULOS PAG. 39 CINTILLO: BIZET CABEZA: Carmen: opera y fiesta brava en la Plaza Mexico CREDITO: Fernando Figueroa "Jorge, ¨ya te tomaste la foto?", grito un aficionado taurino cuando el diestro de Tula se disponia a matar al toro Palomo, como parte del cuarto acto de la opera Carmen, de Bizet, que se efectuo el viernes por la noche en la Plaza Mexico. A pesar de las protestas de aquellos que se preocupan mas por el sufrimiento de los animales que por el de los ninos de la calle (sin dejar de entrarle a los tacos de suadero y al pastor), se llevo a cabo la lida completa de un astado, con un torero de renombre (Jorge Gutierrez) y su cuadrilla, quienes vistieron trajes de luces al estilo goyesco. Al termino de la faena, Gutierrez, en su papel de Escamillo, dio la vuelta al ruedo acompanado de la mezzosoprano Adria Firestone transfigurada en Carmen; no falto el gracioso que pidiera un toro de regalo y aquel que le grito "musica maestros" a la Orquesta Ensamble de la Catedral de Mexico, dirigida por Enrique Ricci. El reloj de la plaza marcaba las 12 de la noche cuando don Jose (Giuliano Cianella) apunalo a Carmen en la arena del coso mas grande del mundo. Diez mil espectadores fueron testigos de un espectaculo que bien podria calificarse de performance, mas que opera a secas. Una brillante luna en cuarto creciente ilumino la accion dramatica que se desarrollo tanto en el escenario montado en la tribuna de sol como en el propio ruedo. Los coros de la Catedral de Mexico y de la Schola Cantorum arroparon la actuacion de Carmen, Don Jose, Escamillo (Armando Mora) y Micaela (Ana Maria Gonzalez). Los cambios escenograficos provocaron tres intermedios de 25 minutos cada uno, momentos que aprovecho el publico para comprar cervezas, palomitas y toda clase de chuchulucos. El director de escena, Claudio Lenk, fungio tambien como anunciador de las tres llamadas previas a cada acto. Durante uno de los intermedios nos acercamos al director de orquesta Enrique Batiz, quien disfrutaba del evento como un espectador mas. A traves de la mirada fresca de un nino y con la ironia propia de los adultos inteligentes, Batiz nos dijo: "Yo disfruto todo. Mira nada mas que espectaculo tan bonito!... Un cuarto de plaza para ver a Carmen no esta nada mal; el publico aguanta retrasos de media hora, no se queja de nada, le gusta divertirse. A pesar de todo lo que nos pasa, Mexico es un pais lindo ... Hace cinco o seis anos yo dirigi aqui a la Royal Filarmonic y fue un evento muy espectacular, con mas de 30 mil espectadores... En Queretaro dirigi en dos ocasiones la opera Carmen; la segunda vez nos llovio y la gente queria que continuaramos; yo tome el microfono para decirles que no podiamos seguir; uno se mete en cada bronca... En la Carmen de hoy Bizet es como un boxeador al que han apaleado; la orquesta nunca entra a tiempo; creo que no ensayaron. Adria Firestone salva la situacion p orque es una muy buena Carmen, no excelente, pero bastante bien... El sonido, muy malo, el escenario esta lejisimos; hay muchas fallas, pero yo me estoy divirtiendo de lo lindo, en serio. .