SECCION: ESPECTACULOS PAG. 43 CINTILLO: HOMENAJE CABEZA: Un iconoclasta llamado Archibaldo Burns CREDITO: ROGELIO SEGOVIANO "Hay muchos modos de ser mexicano y uno de estos es siendo Archibaldo, porque la gente se pregunta: ¨bueno, Burns que es, escritor, cineasta, arquitecto, decorador...? Pero antes que otra cosa, Archibaldo es Archibaldo, un fenomeno mexicano singularisimo", dijo el otrora cronista de la ciudad de Mexico, Guillermo Tovar y de Teresa, durante el sentido homenaje que le rindio a Archibaldo Burns la Direccion General de Actividades Cinematograficas de la UNAM en su sede de San Ildefonso. Durante el homenaje, Burns, autor de las cintas Juego de mentiras, El reventon, Juan Perez Jolote y Oficio de tinieblas, recibio la medalla Filmografia, que por segunda ocasion concede la UNAM (la primera fue Maria Felix). La medalla es realizada con una emulsion de plata extraida de las peliculas rescatadas de los laboratorios de la Filmoteca. Al hacer referencia a Juan Perez Jolote, su opera prima convertida ya en un clasico de nuestro cine en el que se exhiben los problemas campesinos chiapanecos, Archibaldo Burns comento que esa pelicula la hizo "para retratar una realidad que se nos iba descubriendo. Aun aguanta porque presente el Chiapas de siempre: un estado medieval dejado de la mano de Dios. Juan Perez Jolote es un documento doloroso". Relato el cineasta que cada que Juan Perez Jolote es exhibido en Chiapas "los cines se atiborran" porque la gente se identifica y se reconoce. "Aita fulano!, gritan en la sala. Es conmovedor, gozan la pelicula como ninos felices", comento. Sobre los filmes que hizo basado en las novelas Juego de mentiras, de Elena Garro y Oficio de tinieblas, de Rosario Castellanos, Burns aseguro que las realizo porque siempre le fascinaron esas historias, y admitio que Juego de mentiras "tiene rasgos de la personalidad de Garro, pero que ella no se entere". Al hablar sobre la relacion entre el cine y la literatura, el "hombre rebelde, iconoclasta y atrevido", como lo definio Tovar y de Teresa, dijo que son dos lenguajes diferentes que nada tienen que ver entre si. "La palabra infunde respeto, mientras que la imagen es contundencia", dijo Archibaldo, y agrego: "Aunque uno se siente solo filmando, hay una comunicacion, una camaraderia distinta a escribir en soledad". El homenajeado tambien explico a la nutrida concurrencia que se dio cita en la sala Fosforo, que sentia un placer similar al dirigir en sus cintas a indigenas que a actores profesionales, aunque anadio que estos "pierden su frescura de tanto repetirse a si mismos. Archibaldo, "un joven de 80 anos", recordo la ocasion en que filmaba Oficio de tinieblas llevando a Lilia Prado y a Tito Junco de protagonistas. "Ella era toda una leyenda, pero una pesima actriz, mientras que a Tito, quien tenia fama de buen actor, se le olvidaba todo". .