PAG. 33 SECCION: Cultura CABEZA: Ninos con corazon CREDITO: LEONARDO GARCIA TSAO Con la pelicula francesa La fractura del miocardio sucedio el ano pasado lo que normalmente sucede con las producciones de calidad compradas por el Imcine: fue estrenada en COTSA de manera casi clandestina durante una semana, para pasar de inmediato al circulo de cineclubes. Ahora se exhibe unos cuantos dias en la Cineteca, que cuando no trae estreno holywoodenses con que llenar su programacion, echa mano de las huerfanas de Imcine en plan de relleno. La fractura del miocardio fue una de las sorpresas del festival del Berlin de 1991. De un director desconocido -no he visto nada anterior, ni posterior de Jacques Fasten- la pelicula parte de una premisa sencilla pero original: en un pueblo frances, el nino Martin Gaudinier (Sylvain Copans) queda solo al morir su madre soltera de un infarto; desconcertado por el hecho, Martin recibe la ayuda solidaria de sus amigos de la escuela. Media docena de ninos, casi adolescentes, solucionan el tramite del ent ierro -la caja de un viejo reloj sirve de ataud, un hoyo cavado de tumba- y proceden a ocultar con ingenio la muerte de la senora Gaudinier, pues su hijo no desea ser internado en un orfanato. Pero aunque cada vez aumenta el numero de companeros dispuestos a cooperar para cubrir las necesidades de Martin, las reglas de la sociedad adulta acabaran por imponerse. Si hay una influencia notoria en La fractura del miocardio es la de Truffaut y Los 400 golpes. Al igual que Antonio Doniel, Martin es un nino conflictivo en la escuela, en constante antagonismo con sus maestros (recuerdese como Doniel daba como excusa la muerte de su madre para faltar a sus deberes: en este caso, la muerte es real y el nino trata de ocultarla). Sin embargo, Fansten es aun menos sentimental que Truffaut. En ningun momento permite que el pathos del huerfanito domine la hi storia. Lo que le interesa al cineasta no es el melodrama, sino la posibilidad de una comunidad infantil, que contradice la nocion -expresada por un maestro- de que en la sociedad actual cada quien persigue sus propios intereses y ha olvidado la idea del beneficio colectivo. Bajo esa misma sobriedad, Fansten renuncia a la comoda posicion de convertir a los adultos en villanos. La cinta esta narrada desde una perspectiva infantil, que ve en los mayores a seres solemnes, un poco ridiculos, aunque bien intencionados, pero incapaces de ver mas alla de las leyes y las convenciones sociales. Si bien La fractura del miocardio concluye con una nota de desencanto, Fansten deja entrever algo de optimismo: tal vez algo cambie en el futuro, si esos ninos logran mantener su espiritu de lucha cuando lleguen a la edad adulta. Habiendo escogido a ninos actores de espontanea naturalidad, Fansten se limita a encuadrarlos bajo una puesta de escena funcional y nada mas. Asi consigue, ademas, una acertada observacion de cierta conducta infantil ya entrando a la edad de la punzada (por ejemplo, para acentuar la torpeza de los primeros besos, ellas siempre mas altas que ellos). Se sabe que Spielberg esta interesado en hacer un remake de esta historia. Horror. Es de prever que las cualidades de Fansten quedaran sepultadas bajo el alud de sensibleria y complacencia holywoodenses. Hay que conocer la version original, mientras se pueda. LA FRACTURA DEL MIOCARDIO (La fracture du myocarde) D y G: Jaques Fansten/ F. en O. Jean-Claude Saillier/ M: Cancion "Pincez-moi", de Jacques Fansten y J.M. Senia/ Ed. Collatte Farruaggia/ I: Sylvain Copans, Nicolas Marodi, Cecilia Rouaud, Delphine Gouttman, Olivier Montiege/ P: Belbo Films. Francia. 1990. .