SECCION INF. GRAL. PRIMERA DE PRIMERA BALAZO: VIERNES SANTO CABEZA: Con llagas de barniz, el Nazareno de Iztapalapa sufrio para inspirarse CREDITO: CARMEN CALVIMONTES Miro a su alrededor con ojos atentisimos. Al filo de las diez, cuando el sol ya no solo daba calor sino empezaba a quemar, las maquillistas, que habian comenzado su labor con los demas desde las cinco de la manana, le avisaron que le tocaba a el. Con esmalte de unas en distintos tonos de rojo le dibujaron flagelos en la espalda; con mas artilugios aparecio una llaga en su mejilla izquierda. Todos fueron a verlo en el dia mas importante de su vida, para el y para el que encarnaria en su sufrimiento. Viernes Santo de agonia, transito de la muerte a la vida. Era dificil concentrarse, olvidarse del nombre propio y asumir el universal, cuando preguntas como "¨desayunaste bien?" interrumpian el ensueno del mito secular. Mejor no hablar con nadie hasta que el rito comience una vez mas, ignorar camaras de television, grabadoras y flashazos. Fuera de la casa en Cerrada Zacatecas, Delegacion Iztapalapa, donde estuvo Jesucristo toda la manana de ayer, la gente iniciaba lentamente el dia. Todo se sabe de memoria, cada ano es lo mismo, murmuraban los pocos que deambulaban a las ocho de la manana: Policias de azul marino, cafe y azul cielo marchaban de un lado a otro de la explanada del Jardin Cuitlahuac, escenario del inicio del Calvario. Jalado por una gruesa cuerda, empujado por su verdugo, aturdido por los gritos amenazantes de un soldado romano, Jesus de Nazareth antes Francisco Lopez Mosco sufria. Era dificil concentrarse, recibir las herejes imprecaciones en medio del tumulto de quienes aspiraban a ver de cerca sus heridas sangrantes. Mejor no levantar la vista, porque la pupila se distrae en las bermudas, los oidos registran mejor el mexicanisimo "orillese a la orilla!"... Poca gente, menos que la del ano pasado, habian dicho algunos pronosticos, pero despues de estar cerca de las ancas de un caballo, asfixiados por empujones de todos lados, mojados por la sangre Marca Acme que los centuriones arrancaban a su victima, aturdidos de sol y muchos gritos, fueron mas de tres los que agradecieron que hubiese "tan poca gente". Ya habia sido interrumpido por anuncios de ninos perdidos y adolescentes desmayadas, el parlamento de varios personajes del Concilio que condeno a Cristo a morir en la cruz, ya Poncio Pilatos se habia lavado las manos, ya habia sido enjuagado el rostro de Jesus por Veronica, despues de las tres caidas hubo quienes cayeron mas veces, ese fue su calvario, cuando inicio el penoso ascenso al Golgota, antes Cerro de la Estrella. Ahi, una vez mas, Cristo padecio. Era dificil concentrarse, entrar en comunion con Eli. Dudaba de que sus plegarias llegaran hasta el reino de su Padre, porque las aspas de dos helicopteros obligaban a sus ojos a buscar inspiracion en otra parte. Entonces dijo "tengo sed" y le dieron vinagre con hiel, dijo seis veces "perdonalos, porque no saben lo que hacen" y solo unos cuantos lo escucharon. Los demas no sabian si empujar mas o quedarse inmoviles, viendo sin oir, estando sin estar. Esta vez no hubo lluvia inmediatamente despues del ascenso de Cristo al cielo. Tampoco rodaron muchas lagrimas genuinas. Ni siquiera se desmayaron quienes se supone que lo hagan, mejor lo hizo una socorrista de la Cruz Roja, mientras el Rey de los Judios era bajado de la cruz y en su cabeza coronada de espinas caia el mal clavado letrero de INRI. Viernes Santo de agonia y muerte. .