PAG. 31 SECCION: Cultura CINTILLO: EXPOSICION CABEZA: Estetica de Hitler, Mussolini y Stalin CREDITO: VIVIANNE SCHNITZER La muestra Arte y dictadura, que exhibe las preferencias artisticas de Jose Stalin, Benito Mussolini y Adolfo Hitler, ha cambiado estremecedoramente el rostro de Viena. En el exterior del edificio de la Kunstlerhaus, donde el lunes se inicio la exhibicion, cuelga una enorme reproduccion del cuadro emblematico de los nacionalsocialistas, "Atletas", de Gerhard Keil, con cuatro jovenes germanos rubios (de perfecta musculatura y menton cuadrado) que corren por la pista. Delante del museo, figuras masculi nas en color negro muestran la utopia nazi y estalinista del hombre nuevo. La exposicion Arte y dictadura, que abarca la arquitectura, escultura y pintura del nacionalsocialismo aleman, el fascismo italiano y el comunismo sovietico, reune mil 500 objetos, que en su mayoria estuvieron ocultos y olvidados durante decadas en subterraneos de diferentes paises europeos. Durante dos anos, Jan Tabor, el director de la muestra, y un equipo internacional de especialistas se dedicaron a la dificil busqueda en toda Europa de obras de arte, "algunas de verdadero mal gusto y otras de i ncreible perfeccion". Entre las curiosidades que consiguieron llevar a Viena se encuentran 17 pinturas de la coleccion privada de Hitler, que jamas habian sido mostradas al publico y son propiedad del Ministerio de Finanzas de Alemania. Las diferencias y similitudes del arte al servicio del fascismo, el nazismo y el comunismo son mostradas conjuntamente por primera vez en la historia, "lo que permite nuevas posibilidades de investigacion comparativa", dice Tabor. En las tres dictaduras, el Estado se intereso por el arte como instrumento imprescindible y perfecto de propaganda. Todos los dictadores exigian por igual a sus artistas que sus caracteristicas fueran el fanatismo, el realismo, el gigantismo, el optimismo y la lealtad partidaria. "El arte aleman es racista", asegura Tabor, "porque la utopia del hombre nuevo se basa en la raza nordica". El director de la muestra, que nacio en Checoslovaquia y sufrio durante anos la represion comunista, asegura que ahora ha logrado "sellar la paz con el arte sovietico". "Si se lo compara al aleman, son mucho mas humanistas. Cada vez que enfrento una obra nazi me estremezco y la odio", dice. El arte italiano en la era de Mussolini era "mas secreto y misterioso", asegura Tabor, pero no puede evitar "el miedo" de reconocer que "los mas brutales fascistas eran capaces de crear cuadros poeticos". El lunes, cuando se abrio la muestra, para muchos asistentes aquello fue como revivir una autentica pesadilla. Los visitantes no podian disimular su impresion de ver reunido un 70 por ciento de las obras mas representantivas de las peores dictaduras europeas de este siglo. Como verdaderos monstruos quedan fijados en la memoria los arquetipos alegoricos y artificiales de la epoca. Ahi estan las imagenes de la prolifica y ordenada ama de casa alemana, madre de la nacion; el nino uniformado levantando su mano en el saludo fascista, y los campesinos y obreros sovieticos que cosechan y laboran de madrugada con la misma alegria en sus rostros con la que asistirian a una fiesta popular. Son todas ellas imagenes rescatadas del olvido voluntario que ahora se pueden contemplar como objetos que solo pertenecen al pasado. (Servicio Especial El Pais) .